Los enrollados de mermelada de cereza que prepara la señora de la esquina eran los favoritos de Chanyeol, por lo que, muy devotamente, el gigante Park salía a comprarlos todos los domingos por la mañana. Hasta la misma señora se los separaba muy temprano, y se los envolvía en una bolsa negra para que el chico los viniera a recoger, sin que nadie sospechara del contenido, pues al atleta le daba un poco de vergüenza que lo vieran comprando este tipo de calorías, cuando se suponía que debía estar en forma para antes del partido. Pero, mientras nadie se enterara, todo estaría bien.
Este era un secreto entre la señora de los pasteles y Park Chanyeol.
—¡Buenos días~! —exclamó alguien extremadamente radiante detrás de Chanyeol, mientras que este se encontraba pagando por los pastelitos.
El atleta volteó por inercia para ver quién estaba hablando con tanta efusividad. Se sorprendió cuando vio que se trataba del menor de los tres hermanos, Baekhyunee.
—¡Oh! ¿Park Chanyeol?
¡Fantástico! Lo habían atrapado con las manos en la masa.
—¿Qué haces por aquí tan temprano?
Chanyeol sudó frío por primera vez en su vida.
—Ah... Pues... Venía por... —Nunca antes su cerebro había trabajado tan rápido como ahora. "Vamos, piensa en algo. Piensa, piensa, piensa. ¡Ya sé!"—. ¡Mi hermana!
—¿Venías por tu hermana? —Baekhyunee ladeó su cabeza, dando la apariencia de un cachorrito.
—¡No! Bueno sí, pero no... Lo que quiero decir es que-
—¡Ah! ¿Viniste por los enrollados de cereza de la señora? —señaló hacia la bolsa, la cual estaba un poco abierta, por descuido de él mismo, y se revelaba su contenido.
—¿Qué? —Chanyeol se alertó por la pregunta y luego se dio cuenta de su propio error—. ¡Puedo explicarlo!
Baekhyunee soltó una risilla inocente a causa de la torpeza del más alto.
—Son para tu hermana, ¿no es así?
—¿Eh? ¡Ah! ¡Sí! Son para ella...
—Tiene muy buenos gustos —señaló—. Este es mi postre favorito, así que venía a comprar una porción también. Señora, por favor, deme una media docena de los mismos enrollados.
—Oh, lo siento, jovencito, pero hoy solo estoy vendiendo estos a pedido.
El rostro de decepción de Baekhyunee era terrible; lucía como un cachorro abandonado. Chanyeol se sintió acongojado al ver la expresión del muchacho. Este chico, a pesar de tener la misma cara que sus hermanos mayores, era tan diferente a ellos. Tenía la misma edad, incluso era unos meses mayor que Chanyeol —este dato lo obtuvo gracias a Byun-ssi—, pero parecía un frágil chiquillo que necesitaba ser protegido a como dé lugar.
El instinto protector de Chanyeol emanó de su interior tan pronto como vio a Baekhyunee cabizbajo.
—Oye, no te preocupes... Si quieres, puedo darte de mi porción.
El chico levantó la cabeza. —Pero son para tu hermana...
De pronto, Chanyeol recordó su mentira, así que se las ingenió para no decir algo que lo dejara al descubierto.
—Tienes razón, pero puedo comprarle otra cosa, al fin y al cabo, mi hermana se contenta con cualquier postre.
—¿En serio? —El rostro iluminado del muchacho le confirmó a Chanyeol que había tomado una buena decisión.
—Sí, claro. Toma, llévatelos —dijo y le entregó la bolsa.
Pero Baekhyunee negó con la cabeza.
—No sería justo que los comiera yo solo. ¿Por qué no los compartimos?
La idea era genial, porque de esa manera podría pasar un rato con el menor de los trillizos y además, degustar los exquisitos pastelitos que tanto amaba.
—¿Estás seguro? No me gustaría dejarte con menos porciones. —Aunque se moría por devorarlos, tenía que mostrar cierto desinterés en ellos.
—Tienes razón... Me quedarían pocos... —Baekhyunee hizo puchero y pensó seriamente acerca de eso—. ¿Qué debería hacer?
Ah~ ¡Qué tierno era! Baekhyunee parecía una tierna masita de miel apapachable.
—Bueno, quizá podrías invitarme uno o dos... Para que no te dé una indigestión después —sugirió Chanyeol, con la finalidad de ayudarlo y a la vez recuperar su oportunidad de comer uno de esos enrollados.
—¡Eso estaría bien! —exclamó con alegría—. Será un placer compartirlos contigo. ¡Ven! Vamos a comerlos juntos.
Finalmente, aceptó la invitación muy feliz y, después de comprar otro postre "para la hermana" de Chanyeol", se fueron a sentar en un pequeño muro que estaba en la acera de enfrente. En cuanto Chanyeol abrió la caja de los dulces, los ojos de Baekhyunee se iluminaron como dos hermosos luceros, y su sonrisa se pintó de oreja a oreja. Chanyeol se aguantó las ganas de acariciar la cabeza del más bajo y apretujar sus mejillas.
Eso lo haría ver como un anciano... ¿O no?
—Muchas gracias por dejarme comer estos ricos pasteles —dijo Baekhyunee—. Suelo venir los días de semana para comprarlos, pero tuve visita y se los terminaron todos antes de tiempo. ¡Tan desconsiderados! Y eso que los escondí muy al fondo de la alacena. Pequeños bribones, ¡me dejaron sin nada!
Baekhyunee infló sus mejillas, mientras refunfuñaba.
—¿Quiénes fueron los malvados que te dejaron sin tus pastelitos? —preguntó Chanyeol, curioso por saber todo respecto a aquella fechoría.
—Fueron mis primos —confesó con el ceño fruncido y un puchero involuntario que se formaba cada vez que decía una palabra—. Son pequeños y no se les puede negar nada, aunque siendo franco, ¿por qué debería decirles que sí a todo? Si se les sigue engriendo de esa forma, nunca sabrán cuando detenerse.
Chanyeol tuvo que estar de acuerdo con eso. Si uno no corrige a los niños cuando estan en proceso de formación, entonces después será demasiado tarde.
—Entiendo lo que sientes —afirmó el atleta—, mi hermana no hace nada más que consentir a mi sobrino. A veces también me saca de las casillas porque no puede corregirlo en el momento que debe hacerlo.
—Es molesto, ¿no es así? —Chanyeol asintió—. Deberíamos hacer una marcha para que también se tomen en cuenta los sentimientos de los adultos. Quiero decir, seguimos siendo niños aunque seamos grandes, ¡tómennos en cuenta!
Chanyeol se rio por el tono tan firme y decidido en el que lo estaba diciendo el muchacho; hasta tenía una pose estoica, como si estuviera listo para una batalla.
Baekhyunee, a diferencia de sus hermanos mayores, parecía tener toda la inocencia de un niño y un corazón tan puro, el cual, en ese mismo instante, había decidido proteger.
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Para tu deleite ❝ᴄʜᴀɴʙᴀᴇᴋ⁀➷
FanfictionChanyeol ha visto varias veces a los hermanos Byun rondar por su campo de entrenamiento. Ellos tiene una fisonomía exactamente igual, pero tienen personalidades tan diferentes. Byun-ssi, el mayor de los tres, tiene una personalidad un poco más madur...