cąpįtulø1: intentando olvidar

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-el había despertado Temprano, ya que no pudo descansar mucho, debido a que la madrugada había sido helada, había llegado el invierno, y hacia mucho frío, en las calles no había ni una Sola persona, todas estaban resguardadas en sus casas, abrigados, descansando tranquilamente, tal vez disfrutando en familia, tomando chocolate caliente, conviviendo... En cambio el felino no tuvo un buen día, ya que en la madrugada mientras dormía, fue corrido de donde dormía (al ser encontrado por el dueño) le toco buscar un lugar caliente entre toda esa nieve, lo bueno era que no había seguridad, como guardias, ni patrullaje, Así que no debía preocuparse

-paso la mitad del día arrinconado en un balcón, tratando de calentarse, aunque no le servia pues igual le caía nieve en la cabeza, el día era pésimo para robar algo, con suerte logro buscar robar algo de comida para desayunar, hasta llegó a decir que era el peor día de su vida pero luego se retractó Al recordar un día peor...

Decidió mejor moverse de ese sitio, y mejor buscar un sitio para esconderse, pasando alfrente de un banco con velocidad, ya que no era muy querido hay.

-¡No seas imbécil! ¡¿Cómo que le diste la clave?! ¡Eres un inútil

-¡¿Que querías que hiciera ?! ¡Tenía un arma!

-¡¿Sabes a quién le echarán la culpa?! ¡A mí imbécil!

Escucho la discusión de ambos guardias, no comprendía nada, miraba la escena apenas entendiendo lo que decía

-¿Seguro que no es el gato con botas?

Gato puso una cara de confusión, no recordaba haber robado ningún banco, eso hizo que su curiosidad se hiciera mas grande, queriendo escuchar un poco mas de la conversación, dando otro paso para oír mejor

-¡No! ¡esta era una hembra, una de color negro...

Al mencionar este dato, Gato abrió los ojos, no quizo escuchar mas, retrocedió torpemente, casi cayéndose del tejado, mirando el piso de este, apoyándo la espalda en la pequeña pared donde estaba escuchando, comenzando a respirar agitado, mirando un punto fijo, pensando en muchas cosas, mezclando los pensamientos, haciendosele imposible pensar en algo concreto, no  había sabido de ella en un largo tiempo, y resivir noticias..era algo impactante -kitty...- susurró para el simplemente sorprendido, agitando la cabeza varias veces, dispuesto a olvidar todo eso

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Esta corría velozmente en cuatro patas, sobre  los techos de las casas, repitiendo cosas en susurros que eran inaudibles y hasta se podría decir que sin sentido, seguía avanzando soltando a un balcón, quedándose en la baranda de este, solo para revisar su premio de robo, abrió la bolsa, sonriendo al ver el montón de dinero en esta

-bien, no es mucho pero servirá- hablo en susurro aún viendo la bolsa, quitó la vista de esta y miro hacia alfrente, se puso de pie en la baranda, viendo completamente el pueblo, notandolo igual, San Ricardo no hacía cambiado en ningún sentido, ella se negaba a volver a ese pueblo, prefería seguir robando en otras partes, luego del acontecimiento, prefería estar lo mas lejos posible de ese pueblo; sin embargo, noticias llegaron a sus oídos, resulta que el “gran gato con botas" se fue a far far away por tiempo indefinido, pero eso no quitaba que lo siguieran buscando en San Ricardo, las calles estaban llenas de carteles de búsqueda, recompensas por encontrarlo.

~la gata negaba con la cabeza al ver esos carteles, y hasta llegaba a pensar ¿Porque nunca  lo entregue? Cosas tontas como esas pasaban por su cabeza, pero en realidad...nada de lo que decía era verdad, ella no quería matarlo como aveces decía, tampoco ahorcarlo, no quería hacerle nada, sólo quería olvidar...y encontrar la razón de porque era así, tenía miles de preguntas; ¿Cómo era capaz de fingir enamorarse de alguien en un solo día?¿Y después dejarla? ¿Cómo era capaz de no sentír culpa? ¿¡Cómo rayos lograba que todas las gatas se enamorarán de el?! Y la pregunta mas importante, que ella misma se hacía...¿Cómo podía olvidarse de el..? 

comø sį fuęrą lą prįmęrą vęz [Gątty]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora