La historia de chelsea

es agradable ir despacio

Cuando llegamos allí, Chelsea ya estaba allí con sus padres. Mi gente no bromeaba, la hija de sus amigos era linda. Cabello castaño claro ondulado, una gran sonrisa. Tenía unos 5-3 años y, por lo que pude ver, tenía una buena figura. Nos saludamos y decidimos pasar el rato y dejar que las personas mayores hagan lo suyo. Acababa de graduarse de la secundaria. Le pregunté casualmente qué edad tenía.

"17. Pero tendré 18 en unos meses. ¿Y tú?"

"Tengo 20 años, acabo de empezar a trabajar en la ciudad. Material básico de oficina". Continuamos de esta manera. Aprendimos que teníamos un gusto musical similar, nos reímos de algunas de las mismas películas tontas. Le pregunté: "¿Por qué viniste a esto? ¿Debes tener algo mejor que hacer un sábado por la noche?"

"Estoy un poco castigada. Mi mamá me atrapó con un chico en la casa. No estábamos haciendo nada TAN malo, pero ella se asustó. Así que no querían dejarme en casa mientras están fuera tarde. Mamá dijo que tal vez conocería a un buen tipo. Tal vez lo haga. ¿Y tú?

"Realmente no tenía nada especial que hacer. Mi mamá dijo que sus amigos tienen una linda hija".

"¿Ellos?"

"Sí, eso creo", respondí con una sonrisa. Después de hablar un rato, sugerí que saliéramos a tomar aire fresco. Había demasiado humo de cigarrillo adentro para mí.

"Bien, déjame decirle a mi mamá que estamos dando una vuelta a la manzana". Su mamá estaba bien, ya que era yo. Supongo que me consideraron seguro. Pasamos una buena noche caminando, hablando. Tentativamente tomé su mano. Su sonrisa era contagiosa. No sabía si intentar besarla o no. Decidí que no. Ella pudo haber estado decepcionada. Más tarde, antes de que el evento terminara, me dijo que todos los padres saldrían en dos semanas, pero que cuidaría a su primo; me gustaría venir a pasar el rato? Por supuesto que dije que sí.

Dos semanas después estábamos en la casa de su tía. Los padres, tíos y tías iban a una fiesta. Alrededor de las 8:00 Chelsea puso a su prima arriba a dormir. Ahora éramos solo nosotros dos. Ella se sentó a mi lado y después de unos minutos se inclinó para besarla. Torpemente le devolví el beso. Ella me miró, luego volvimos a eso. Después de un rato ella dijo: "No has hecho tanto, ¿verdad?" Me tropecé un poco, traté de negar lo obvio y realmente me sentí completamente avergonzado.

"Está bien, Brent. La mayoría de los chicos están sobre mí en cinco minutos. Es agradable ir despacio". Supongo que fue un cumplido. Al menos ella no estaba lista para echarme. Comenzamos a besarnos de nuevo y espero que me haya ido mejor. Ella se sentó a horcajadas para obtener un mejor ángulo y continuamos de esta manera por un tiempo. Al notar que se estaba haciendo más tarde y sin duda sintiendo mi incomodidad en mis jeans, ella dijo: "No nos queda mucho tiempo. Pero sientes que te vas a lastimar allí. Déjame ayudarte".