Yuanfen || JaeSon ✔

III

Agradecería mucho si en los comentarios me avisarais si hay algún error o algo mal escrito, ya que estoy usando una aplicación para no tener que escribir todo xD. Gracias. 

*****

La motocicleta de HyunJin se detuvo frente a él, y MinHo sintió alivio de que el mayor estuviera sólo en ese instante porque no sabría cómo reaccionaría si también iba a buscarlo con JeongIn.

El alfa frente a él se quitó el casco, su cabello desordenado cayendo sobre sus ojos, y MinHo sintió deseos de pasar sus dedos por entremedio de su pelo.

Por supuesto, se contuvo.

―¿Necesitas un aventón para tu casa? ―preguntó HyunJin sonriendo, ofreciéndole el casco.

MinHo lo tomó, poniéndoselo, y subió detrás de HyunJin, abrazándolo por la cintura, el masculino olor alfa envolviéndolo.

MinHo no sabía a qué olía él, no podía adivinar su aroma, pero esperaba que no fuera algo tan fuerte como el olor de HyunJin porque él inmediatamente quedó un poco aturdido cuando el aroma de cuero y pino lo llenaron.

―¿Puedo pasar la noche en tu casa, por favor? ―preguntó en voz baja.

HyunJin pareció tensarse unos segundos, sin embargo, luego relajó sus hombros y encendió la moto.

―Tus deseos son órdenes, MinMin.

Cerró sus ojos cuando el apodo envió una ola de calor por su espina dorsal, y se aferró al cuerpo de Jinnie apenas partió, apretando contra su cuerpo la cajita con las cartas.

Minutos después HyunJin se estacionó fuera de un conjunto departamental por lo que MinHo se bajó, esperando al alfa para que lo guiara a su hogar.

―Vivo solo ―comentó HyunJin en el ascensor―, bueno, con JeongIn ―se removió, nervioso―. Sobre lo del otro día, me disculpo por él...

MinHo le miró, asintiendo.

―No importa ―contestó restándole importancia.

HyunJin rascó su mejilla, sin decir otra cosa, y cuando las puertas del ascensor se abrieron salió hacia la derecha, deteniéndose delante de una puerta. MinHo le siguió avergonzado pero sin saber exactamente el porqué.

El más alto abrió, quedándose quieto.

MinHo sintió que se ahogaba cuando un olor suave, como loción de bebé, llegó a su nariz.

―¿HyunJin? ―se oyó una voz viniendo del interior―. Estoy aburrido, Jinnie, ¿por qué no vienes y me follas?

Sentía de pronto sus mejillas coloradas, en especial cuando los ojos de HyunJin se dilataron.

―Mierda, JeongIn, ve a ponerte algo de ropa ―ordenó HyunJin entrando.

―¿Por qué? ¿Sigues enojado conmigo? Anda, prometo... ―JeongIn se enderezó cuando MinHo apareció también, sin mirarlo a los ojos―. Oh ―el omega bajó un poco la camisa blanca y larga que llevaba, ocultando su ropa interior―, bueno, si quieres un trío...

―¡JeongIn!

El omega soltó un resoplido, poniéndose de pie, y marchándose al cuarto mientras murmuraba por lo bajo.

HyunJin dejó las llaves de la moto sobre la mesita junto a su casco, frustrado y molesto, y MinHo cerró la puerta detrás de él, sin saber qué hacer exactamente.

―¿Quieres un café? ―ofreció HyunJin yendo a la cocina americana.

MinHo sacudió su cabeza, nervioso, y HyunJin le miró unos segundos. Luego, abrió el refrigerador sacando dos cervezas, ofreciéndola una en silencio.