09

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No habia marcha atrás, pensó tan pronto terminó la llamada. Kris acababa de decirle que iría, pero ¿realmente iría? Quizás no, quizás solo lo dijo para que lo dejara en paz y de ese modo poder dormir o quizás iría perdería todo el interés que tenía en él y el mayor tendría todos el jodido derecho de mandarlo al infierno si quería.

Todo se acumuló en su mente, recriminado su estupidez y Chanyeol solo no quería pensar en lo mucho que odiaba la posibilidad de perder aquello que tenía con Kris.

Frunciendo el ceño, cogió su cerveza dándole un largo trago que terminó con lo que quedaba de la lata. Era estúpido, si, pero ya no había nada más que hacer que asumir que probablemente después de esa noche Kris ya no va a buscarlo de nuevo y encontraría alguien más apto que, lo que él era.

El mero pensamiento de ser reemplazado fue tan amargó que el sabor de la cerveza ya no le supo tan mal y cogió una tras otra hasta perder la cuenta. No sabía que podía tomar tanto y en tan poco tiempo, lo cual era todavía más contraproducente a sabiendas que el alcohol lo ponía más idiota.

No sabe con exactitud cuánto tiempo transcurrió, ni cuántas cervezas ya había bebido para ese momento cuando sintió el zumbido en su bolsillo derecho donde tenía guardado su celular. Era Kris avisándole que ya estaba abajo y le pedía que lo dejará entrar.

El edificio donde residía Junmyeon contaba con una puerta de seguridad para que nadie ajeno entrará sin autorización, razón por la que Chanyeol se tambaleó hasta un panel y apretó un botón que se supone desbloquea la entrada.

—¡¿Ya llegó?! —preguntó Dae, su característica sonrisa de gato apareció en sus labios.

—Estará subiendo —dijo, los nervios comenzaban a hacerle un nudo en el estómago y no solo por lo que pasaría con Kris sino que estaba a punto de presentar a sus amigos como novio a alguien con quién solo se acostó por dinero.

Ahora comenzaba a pensar si Kris lo delataría, el mayor no tenía nada que perder, pero Chanyeol no sabría cómo ver a sus amigos de nuevo a la cara si supieran algo así.

No tuvo tiempo a reaccionar cuando llamaron a la puerta y fue Jongdae quien salto primero a abrir.

—¿Eres el novio de Chanyeol? —preguntó el bajito, apenas vio a la persona del otro lado de la puerta.

Kris alzó una ceja, curioso, desconcertado y Chanyeol rezó a todos sus ancestros de que no lo delatará.

—Supongo que es asi —hablo el mayor, mirando a Chanyeol cuando esté se paró al lado de Jongdae. Solo pudo darle una mirada avergonzada.

—¿Que demonios significa eso? ¿Lo eres o no? —presionó Jongdae.

—Dae, ya basta —fulminó con la mirada a su amigo.

Tomó del brazo al más alto, obligandole a entrar al apartamento hasta la sala de estar donde el resto de sus amigos estaban reunidos.

—¡Chicos, este es mi Kris! —habló arrastrando las palabras, una mano se deslizó por el pecho del mayor quien se mantuvo callado y se inclinó ligeramente saludando.

—¡Ah, es súper guapo! —Baekhyun gritó, y lo miró embobado. Demasiado para el gusto de Chanyeol.

—Si, lo es y es mío —Kris no puso resistencia al ser arrastrado por el cuello de la camisa hasta los labios con el amargo sabor a alcohol.

De hecho, Kris lo había afianzado por la cintura con uno de sus brazos, acercándolo aún más en el proceso. Chanyeol no podía pensar con coherencia cuando Kris lo besaba con tal ansiedad y deseó hasta hacerlo perder la conciencia.

Vicio a la tentación.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora