XXXXIII.

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Nunca imaginé en mi vida estar bajo estas circunstancias, pero ella lo vale, sonrió mientras camino con el ramo de flores que preparé para Camz, sí, solo por ella me metería en jardines ajenos a robar flores amarillas a pesar de que he tenido que huir prácticamente por mi vida cuando perros rabiosos me persiguen, solo por hacerla sonreír aunque sea un poco haría un bouquet envuelto en una delicada hoja de seda junto a su dibujo, sí, no soy buena con las palabras como Camz pero dibujando es otra cosa, solo espero que ella me dé la oportunidad de hablar, solo pido eso... me niego a ser siempre tan débil con las cosas del corazón, estamos hablando de mi vida, de una vida junto a ella, no, a eso no pienso renunciar.

Levanto la vista y me encuentro a Lucy que me ve entrecerrando los ojos justo después de cerrar la puerta de la oficina de Camz, supongo que ella ya le contó todo.

-No sigas, dale espacio. -Me dice al tiempo que me saluda de beso en la mejilla, su barriguita ya casi no nos deja acercarnos.

-Tú no entiendes, no es lo que estás pensando, con Keana no sucedió nada. -La veo directamente a los ojos para que vea que mis palabras son ciertas, ella me estudia y finalmente asiente.

-Te creo... en serio que sí, pero comprende, esas fotos... -¡Maldición! Ese malintencionado periódico tomó fotos de todo, del flashmob, de nuestro recorrido por la ciudad, de ese maldito beso que no fue nada, no puedo creer que haya llamado tanto la atención, nunca entenderé el porqué de esa insana obsesión por saber de la vida de los demás.

-Las fotos en manos irresponsables no muestran la verdad. -Lucy respira pausadamente, vuelve a asentir mientras tuerce sus labios pensando qué decir.

-Camila está dolida, ella piensa que Keana es la indicada para ti, que solo ella puede hacerte feliz. -No puedo creer que piense eso, ¡por Dios! Pero debo aceptar que eso es mi culpa, no le dije que la amaba, no le hice entender que solo ella es mi destino.

-¡No! Si tan solo me dejara hablar. -Resoplo con desgano.

-Te aseguro que si sigues presionando no vas a conseguir nada. -Me dice apretando mi mano, no sé que busca al intentar que desista de mi misión de estar junto a Camz.

-Sé que siempre has querido lo mejor para las dos, pero comprende, no puedo vivir sin ella. -Ella sonríe, supongo que sabe de lo que hablo.

-Está bien... solo no sigas haciendo estupideces. -Asiento mientras me despido, trato de controlar las emociones, golpeo ligeramente la puerta pero nadie responde, espero un momento y al no escuchar respuesta decido entrar de una buena vez, ella levanta la vista al sonido de la puerta abrirse, se ve preciosa, pero su mirar triste sigue ahí, bajo saliva y me acerco a su escritorio con las palpitaciones en la garganta.

-Solo voy a dejar esto aquí y no me veas así, lo seguiré haciendo hasta que me dejes hablar. -Llevo cinco días trayéndole flores, la conozco, debo ser paciente aunque ese nunca haya sido mi fuerte. Las primeras me las devolvió sin siquiera hablarme, solo aceptó finalmente las anteriores, en todas coloqué una pequeña nota pidiendo hablar. Ella retira la mirada y me ignora, me duele estar así, pero decidí ser firme, luchar por ella y esta vez va a ser para siempre. -Será como tú quieras, esperaré paciente a que me dejes explicarte todo. -Me retiro, eso es todo por hoy, por lo menos esta vez me vio, debo resistir sin desfallecer.

*****************

Estamos revisando con Ally que todo quede en orden para la sesión de fotos en el parque Monte Rainer, Sam aceptó mi propuesta de hacer allí las fotos, los permisos ya están listos, las modelos están contratadas, solo checamos que nada quede por fuera, el único inconveniente a resolver son las maquinas que hagan nieve artificial, sí, culpemos al cambio climático... Ally sigue concentrada en la pantalla, descanso la cabeza en mi mano derecha, solo necesito que Camz entienda que solo con ella puedo ser feliz... el suave golpetear nos hace detener, solo puede ser Camz.

PROMESA|| CAMREN|| ADAPTACIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora