Capitulo 5

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Así fue como acabo mi primer año de preparatoria y llegaron las vacaciones con la imagen de YoonGi desapareciendo enfrente de mí, diciéndome: "No soy el chico que esperas".

Ese último día no entre a las demás clases, me quedé en un lugar escondido del Colegio, no me atreví a llorar, solo me quedé atónito, pensando en varios futuros alternos de esta situación, y todos llegaban a lo mismo: Él me termina y yo me quedo solo.

Mi mente pensaba en los dibujos, en las cosas que pudimos hacer si yo fuera más valiente, hubiéramos cenado juntos, ir al cine, al parque, a correr, a jugar videojuegos o simplemente estar ahí.

Llegué a la casa con mucho esfuerzo, el nudo en la garganta lo sentía cada vez más terrible y mis ganas de escaparme eran altas.

–Me terminó–.

Se notó cuando los de músculos de mamá dejaron de estar tensos, y yo quería soltarme a llorar.

–Por fin haces algo bien–.

Otra punzada en el corazón. Encerrado en mi recámara solo me dispuse a dormir durante todo el día, al igual que la realidad, en mis sueños YoonGi me terminaba, pero al menos ahí lo pude besar.

Desperté perdido en el tiempo, no sabía que día era, si era de mañana o de noche, me levanté viendo a todos los lados, la oscuridad se adueñó tanto de mi recámara como mis ojos, vi la hora 3:40 am, me di cuenta que tenía el uniforme puesto, con pereza me dispuse a quitármelo y aventarlo en un lugar cualquiera, me puse una ropa cómoda y me aventé de nuevo a mi cama, el celular estaba cerca, lo tome prendiéndolo y me sorprendió ver la cantidad de mensajes que me llegaron, eran mis amigos preocupados por mí.

Jin.

Hobi.

4:30 p.m.

HOBI.

4:40 p.m

¿Hobi estás en la escuela?

5:00 p.m.

¿Dónde estás?

7:00 p.m.

Nam está muy preocupado y yo más.

7:30 p.m.

¿Llegaste bien a casa?

9:30 p.m.

¿Sabes que me importas? Por favor responde.

1:30 a.m.

Estoy en casa.

3:45 a.m.

Todo está bien.

3:46 a.m.

Solo necesito pensar muchas cosas, te quiero Jin, no te preocupes.

3:47 a.m.

Ahora no tenía sueño, y las ganas de quedarme despierto eran escasas. Abrace mi almohada buscando consuelo y una lagrima por fin salió.

Horas más tardes llegaron mis tíos, la visita se me hizo la más larga, molesta, tensa, que he tenido en mi mísera vida.

Después de esa visita, mi vida se mantuvo en pausa, no tenía ganas de comer y salir de mi cuarto, no escribía tantos mensajes y no me interesaba nada de lo que sucedía.

–¿Por qué no has comido HoSeok?–. Levantó la mirada asombrado, es la primera vez que mi padre notaba preocupación por mí.

–No tengo mucho apetito–. Iba rumbo a mi habitación hasta que me lo tope en el pasillo de las recamaras.

Mi ex y yo [YoonSeok, Sope]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora