HISTORIA ♡SASOSAKU♡

Y SI

Había dos chicas adolescentes en el sótano de Sasori.

Así fue cómo empezó.

Más tarde, cuando Sasori recordaba toda la pérdida y la angustia, aquella serie de « y si» volvía y le obsesionaba de nuevo. Y si no hubiera necesitado hielo. Y si hubiera abierto la puerta del sótano un minuto antes o un minuto después. Y si las dos adolescentes -¿qué estaban haciendo solas en su sótano, para empezar? - hubieran hablado en susurros para que él no las oyera. Y si él se hubiera ocupado de sus asuntos.

Desde lo alto de la escalera, Sasori oyó reír a las chicas. Se paró. Por un momento pensó en cerrar la puerta y dejarlas solas. Su pequeña fiesta estaba escasa de hielo, pero aún quedaba algo. Podía volver más tarde. Pero antes de que pudiera volverse, una de las voces de las chicas subió como el humo por el hueco de la escalera.

-Entonces ¿te fuiste con Sasuke?

La otra:

-Oh, Dios mío, estábamos tan colocados.

-¿De cerveza?

-Cerveza y chupitos, sí.

-¿Cómo llegaste a casa?

-Condujo Sasuke.

En lo alto de la escalera, Sasori se quedó rígido.

-Pero si has dicho...

-Calla. -Después-: ¿Hola? ¿Hay alguien ahí?

Pillado.

Sasori bajó la escalera trotando y silbando. Con toda la naturalidad del mundo. Las dos chicas estaban sentadas en lo que antes había sido el dormitorio de Sasori.

Las baldosas del suelo, pegadas con algo semejante a cola, se abombaban. Crujían como un escarabajo al pisarlas.

Las dos chicas -Sasori conocía a una de ellas de toda la vida, a la otra acababa de conocerla- le miraron con los ojos muy abiertos. Por un momento, nadie habló.

Las saludó con un gesto.

-Eh, chicas.

Sasori Akasuna No se enorgullecía de su capacidad para iniciar conversaciones.

Las dos chicas estaban en el último curso de instituto, y era bonito su aire de colegialas. La que estaba sentada en el extremo de su vieja cama -la que acababa de conocer hacía una hora- se llamaba Hinata.

Hacía dos meses que Sasori salía con Ani Hyuga, la prima de Hinata, que trabajaba de periodista. La fiesta, en la casa donde Sasori había crecido y que ahora era suya, era algo así como la celebración del «noviazgo» de ellos dos.

La otra chica, Sakura Haruno, imitó su gesto y su tono.

-Eh, Sasori.

Más silencio.

La primera vez que vio a Sakura Haruno fue el día siguiente a su nacimiento en el Hospital. Sakura y sus padres, Kizashi y Mebuki, vivían a dos manzanas de distancia. Sasori conocía a los Harunos desde que se mudó a esa manzana con su abuela tras el fallecimiento de sus padres.

Sasori miró a Sakura. Por un momento fue como volver años atrás. Sakura se parecía tanto a su madre, tenía la misma sonrisa maliciosa y despreocupada, era muy hermosa. Eso le hacía feliz. Cada vez que veía a Sakura lo hacía sentir feliz.

-Iba a por más hielo -dijo Sasori.

Señaló el congelador con el pulgar para ilustrarlo.

-Bien -dijo Sakura.