Capítulo 1

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Parte 1: Rumores en la taberna.

En una taberna en medio de lo Desconocido, los hombres se embriagaban mientras las mozas seguían poniendo más cerveza en los jarrones, las mujeres cuchicheaban chismes sobre los habitantes, y los niños, ignorados por sus padres, corrían jugeteando entre las mesas del local.

Todo era risas, diversión, baile y gozo con la fuerte banda de músicos escuchándose de fondo.

Hasta que la puerta del local se abrió con brusquedad, los hombres dejaron de gritar, las mujeres dejaron de hacer todo lo que estaban haciendo, los niños se quedaron congelados en su lugar y la orquesta se desafinó del susto.

La presencia de un hombre se mostró en la puerta de entrada, entró a la taberna, y un fuerte y helado viento lo siguió, los adultos al reconocer quién era, temblaron, los niños curiosos se mantuvieron quietos en su lugar.

Era un hombre joven, alto, Delgado, con un gorro rojo puntiagudo como el de un Gnomo, llevaba una capa azul que parecía ser su único abrigo en la ventosa noche y en su mano una linterna de aceite; entrando al local y cerrando la puerta se sentó en la mesa más alejada que se encontraba cerca de una ventana, dejando la linterna sobre esta.

Los habitantes intentaron seguir con la diversión, pero aún así les era imposible quitar los ojos de encima del tan nombrado "Peregrino".

Una moza se acercó con cautela para atenderlo.

-Solo cerveza de regaliz, gracias-. Dijo sosegado el hombre misterioso a la mujer y ella se retiró para luego traerle su pedido.

Los niños eran los más curiosos por la presencia del Peregrino. Formaron un círculo y se sentaron en el suelo para hablar entre susurros sobre él.

Ninguno lo conocía, pero al parecer los adultos sí, debido a su actuar incómodo, pero los niños no se atrevían a preguntar, y fue por eso que entre jugarreta obligaron a uno de los chicos a ir hacia el forastero para hablar con él, a regañadientes el niño aceptó el reto, con miedo se acercó y solo verlo de perfil le daba pavor, hasta que llegó a la mesa del hombre, y se mantuvo a una distancia prudente.

-Disculpe señor, ¿Quién es usted?-. Nuevamente la taberna se inundo de un sepulcral silencio, los adultos rezando para que el pobre niño saliera ileso y las mujeres culpandose por no prestar más atención a los jovencitos.

-¿No te han contado sobre mi?-. Dijo el hombre aún tranquilo, sin ningun aire de amenaza o molestia. El niño negó con su cabecita y miró hacia atrás donde estaban sus amigos expectantes, y él aún dudoso por lo que hacía. -Todos me llaman El Peregrino de la Linterna Oscura-. Volvió a hablar con una voz que pasó de ser tranquila a escalofriante, provocando que hasta el más valiente se sintiera intimidado. -¿Vez esto?-. Dijo señalando su linterna que reposaba en la mesa. -Es mi linterna, con ella jamás me pierdo...y me ilumina los caminos más oscuros, por eso no temo a la oscuridad de lo Desconocido-. Su voz cada vez era más lúgubre.

El silencio del niño le daba una buena señal al Peregrino y gracias a que la orquesta había dejado de tocar se escuchó a lo lejos, fuera del local, en el oscuro bosque, una voz ronca que cantaba una canción al estilo ópera. Los adultos miraron a su alrededor y entre ellos temiendo que el cantante de esa tenebrosa canción los estuviera acechando afuera.

"Donde este el Peregrino la Bestia está cerca", no paraban de pensar los habitantes.

-¿Escuchas esa voz?-. De nuevo le habló el Peregrino al niño, el cuál casi estuvo apunto de desmayarse por el miedo. -Es la Bestia, me llama para que vuelva con él-. Después de decir eso se levantó y el niño retrocedió asustado, pero el Peregrino pasó de largo sin siquiera mirar al pobre niño y fue a pagarle a la mesera que lo atendió. Abrió la puerta y otra ventisca entró, y la capa azul del Peregrino se elevó, miró atrás dirigiéndose a los niños todavía sentados en el suelo. La voz de la Bestia se escuchaba más fuerte. -¡Cuidado con la Bestia niños! Escuchen mi advertencia, jamas entren al bosque, sino ¡él los matará a todos!-. Sin decir más cerro de un fuerte portazo la puerta de la taberna.

El Peregrino de la Linterna OscuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora