PARA ENCONTARTE

CAPITULO CATORCE

"Tengo la teoría de que cuando uno llora, nunca llora por lo que llora, sino por todas las cosas por las que no lloró en su debido momento"

(Mario Benedetti)

Ohm observó al chico que subió  al escenario, el joven estaba recibiendo él premio a la excelencia académica, Ohm sabía que estaba emocionado, aunque no lo demostró en el momento de dirigir su atención al público. El chico se acercó al micrófono y habló:

Hoy... me hubiese gustado compartir este momento con una familia, en cambio lo estoy compartiendo con grandes amigos, cuando comencé a estudiar solo quería centrarme en ser el mejor y creo que lo logré, pero en el camino me olvidé de muchas cosas, cosas que en este último tiempo he recordado y por eso tengo que agradecer a quienes me han apoyado, en especial a quienes me otorgaron la beca que me permitió estudiar tranquilamente, estoy profundamente agradecido con ellos por darme una oportunidad.

Ohm estaba orgulloso de él, su Noo era ahora un doctor. Solo dios sabía cuanto deseó ver el día en que sus sueños se hagan realidad y ahí estaba observando desde la multitud. Fluke vestía impecablemente y se veía muy atractivo con ese traje negro a la medida, él no lo sabía pero su vida cambiaría ahora. 

Al termino de la ceremonia, lo vio reunirse con Mac, estuvo a punto de ir a su encuentro en ese momento pero se contuvo cuando notó que también era
acompañado del doctor Suwan y del doctor Lee, Noo sonreía, pero no era esa sonrisa amplia que le hubiese gustado ver en su graduación. Sus compañeros lo invitaron a celebrar pero él se negó casi de inmediato. Ohm abandonó el edificio y esperó a que Fluke saliera a la calle. 

Llovía, notó que Fluke miró hacia el cielo, con las manos en los bolsillos. 

- Iré ahora. - Dijo impaciente. 

- Déjame ir primero, parezco un mendigo, al menos puedo confundirlo un poco. - Dean salió del auto, de verdad su hermano parecía un mendigo con ese aspecto. 

- ¿Podemos hablar? - Noo se dio la vuelta y lo miró con odio.  

- ¿Qué quieres? ¿Qué estás haciendo aquí?

- Vine para hablar contigo.

- ¿Qué demonios quieres? ¿Ya dije todo lo que tenía que decir? – Dijo confundido.

- Si, eso creo, pero igual necesito hablar contigo.

-¡Vete al infierno!. - Estaba tan enojado, que su piel clara ahora era color rojo intenso. ¡Adiós imbécil! - Puso sus manos al bolsillo y se alejó. 

- ¿Enano? - De verdad, debes venir conmigo, me lo agradecerás. - Fluke siguió caminando. - ¡¿No quieres sabes quién te envió el libro?!

- ¿Qué tienes que ver tu con eso? - Dijo dándose la vuelta.

- Yo sé quién te envió ese libro.- Fluke parecía a punto se perder la paciencia. 

- ¿Quién fue?, ¡habla!.

- Fui yo. - Dijo su hermano. 

- ¡¿Cómo puta sabes que ese libro tiene que ver conmigo?! - Preguntó a punto de golpearlo. 

- Para saberlo debes venir conmigo.

- ¡No iría contigo, aunque fueras la última persona en la tierra!, ¡jamás iría contigo!,... ¡no quiero saber nada de ti!...¡solo déjame en paz!. - Cada palabra de Fluke le dolió en el alma. Él se estaba retirando. Ohm no aguantó más la espera y salió del auto.