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Yuta le hablaba a Kun pero aquel no le respondía las llamadas. Yuta se había empezado a desesperar un poco porque aquel aquel ni siquiera le rechazaba, simplemente la llamada no era contestada.

Tuvieron que mentirle a Hendery, diciendole que llamarían a su tío Kun para que vinieran por ellos, para no volver a pasar todas las calles y cansarse aún más. Hendery entendió y ahora estaba esperando a que el tío Kun contestara.

─Bueno, mejor vamos nosotros ya que no contesta. ─Hendery se hartó y se levantó de la banca donde estaba, sus padres lo vieron y rieron nerviosos.

─Llamaré a Ten, de seguro él si contesta. ─Yuta ignoró la petición de su hijo y llamó a Ten.

Aquel pronto contestó, Yuta se alejó un poco para que Hendery no escuchara la conversación.

─¿Qué onda? ─Ten se escuchaba con la voz de ebrio, habían estado tomando frente a los niños seguramente.

─Necesitamos que Kun venga por nosotros, nos perdimos. ─Yuta hablaba con una pena encima y se escuchó una risa en la llamada.

─Dios mío. Ya le hablo... ¡Precioso!.. Te hablan. ─Ten se escuchaba, reía sin parar y hasta se escuchó como se había pegado contra algo, definitivamente aquel había tomado.

─Bueno, sí? ─Se escuchó la voz de Kun y suspiró alviado.

─Necesitamos que vengas, estamos en un parque donde hay varias estatuas de viejos sin importancia. Nos perdimos, haznos el favor. ─Yuta habló mientras que miraba donde se encontraban. Kun rió levemente.

─Claro, iré hacia allá, parece que se fueron bastante lejos. Nos vemos. ─Kun colgó después de decir eso.

Yuta volteó para ir con WinWin y Hendery, pero Hendery se encontraba enfrente suyo con los brazos cruzados.

─Así que nos perdimos. ─Hendery suspiró al ver que le mintieron y Yuta sonrió nervioso.

─Ya viene, no te alteres. ─WinWin abrazó a su hijo haciendo que Hendery sonriera, asintió.

[📞]

Xiaojun había estado leyendo por mucho tiempo en la habitación de Mark, aquel escritorio se le había hecho demasiado cómodo como para leer. Aunque a veces le llegaban a doler los ojos por lo que tenía que parar.

Sus ojos caminaban por toda la habitación; analizandola. Los colores eran claros y bonitos, combinaban todo a la perfección, un banco con un gris llegando al blanco, un rosado bebé y pequeñas partes de rojo que daban un contraste.

Miraba aquellas fotos, unas fotos con amigos, fotos de su graduación de la escuela, cuando iba a natación aparentemente, una con RenJun, una familiar y una en solitario de pequeño.

Su escritorio era demasiado ordenado, todo estaba bien centrado. Tenía su laptop cargandose, luego tenía algunos libros y cuadernos de los mismo tonos de color que hacían que se vieran ordenados, después muchos plumones acomodados en varias cajas. A un lado se encontraban algunas hojas.

Le llamó la atención después de ver tan ordenado, tal vez Mark había escrito, sabía que el mayor escribía desde hace tiempo pero jamás pensó que dejaría las hojas a la vista de cualquiera.

Se mostró un poco curioso ante eso, tomó las hojas y luego las dejó. Se retractó, escuchando la voz de su padre en su mente "No debes tocar, leer o escuchar las cosas ajenas" sabía que no estaba bien por lo que las dejó ahí, se sintió un poco avergonzado consigo mismo, siguió leyendo y se olvidó rápidamente.

Después de unos 30min, Mark volvió después de dormir a RenJun, saludó a Xiaojun y le sonrió, se tiró a la cama y volvió su mirada a aquel.

─¿Te la estás pasando bien éstas vacaciones? ─Mark sonrió.

desde niños ; nct. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora