Serendipia.

c i n c u e n t a

Después de clase voy corriendo al gimnasio.

Me pongo un top deportivo y unos leggings y me uno a las otras chicas.

Llegan Emily y Chloe, y Emily me mira hecha una furia.

Ya se habrá enterado de que la entrenadora me ha ofrecido su puesto, y le he dicho que sí.

—Te dije que no me subestimases— Digo sonriendo.

—No cantes victoria—

Si esto fuese una serie de dibujos animados, Emily estaría echando humo por las orejas.

Terminamos de ensayar y voy a darme una ducha.

Salgo y veo a Oliver apoyado en la pared mirando su móvil.

—Hola— Le saludo con una sonrisa.

—Venía a preguntarte que si no estás muy cansada, podríamos ir a comer—

—Un momento— Llamo a Ryan pero me salta el contestador.

—¿A donde quieres ir?— Le pregunto acompañándole a la salida.

—Un amigo de mi padre tiene un restaurante en el Upper Eats Side—

—No— Digo negando. —Mejor vamos al McDonalds—

—Como quieras— Dice incómodo, no ha comido en un McDonalds en su vida, eso seguro.

...

—Oliver, la hamburguesa no se come con cubiertos— Digo poniéndome una mano en la frente.

—Lo sé— Dice cogiendo la hamburguesa con cara de asco.

—¿Has venido alguna vez?— Digo intentando no reírme.

—Claro que sí—

Le miro con las cejas levantadas.

—Bueno no— Dice avergonzado.

—Que mono eres— Se sonroja y me río.

Me he fijado en que es muy blanco, eso hace que cada vez que se sonroje se note mucho.

—¿Que tal te va en el equipo?— Dice soltando la hamburguesa y limpiándose las manos con una servilleta.

—Bien, ¿tú juegas en el equipo de fútbol?—

—Sí, pero el fútbol no es lo mío—

—Ah, ¿Que se te da bien?—

—El golf— Dice orgulloso.

Me aguanto la risa y finjo una tos.

—¿Que pasa?— Dice confundido.

—Nada, está muy bien—

—Oye el golf es un deporte muy sofisticado, no tiene nada de malo— Dice ofendido.

—Claro, muy sotisficado— Asiento con la cabeza.

—¿Has venido nueva este año?—

—Sí, llegué hace seis meses de Atlanta—

Oliver hace una mueca.

—¿Que pasa?—

—Nada, está muy bien— Dice con una sonrisa irónica.

—Vaya, no eres tan inocente como parece— Digo riéndome.

—Te sorprenderías—

—¿Ah sí? ¿Que es lo más peligroso que has hecho? ¿Usar el tenedor de la ensalada para el postre?— Estallo en carcajadas.