vampire in caritate«Wosani

5- XXX y no tentación

"¿Por qué siempre me venís a ver a la noche?."
Pregunté mientras cerraba la puerta y me apoyaba contra la misma.

"Porque hay menos gente."
Me contestó Valentín, apoyando una mano en mi cintura.

"No es como que haya mucha gente en este pueblucho."
Levanté mi rostro y bese su mentón.

El sonrió y apoyo su otra mano en mi cintura. Con un rápido y sobrenatural movimiento nos llevó hacia el sillón, dejándome sentado sobre el.

Pasaron tres semanas desde que me enteré de toda la verdad, y no pasaba día o mejor dicho noche, que Valentín no me visitará.

Había logrado ayudarlo a controlar su fuerza. Y todavía trabajábamos con sus deseos sanguíneos.

Pero al menos ahora podía besarme como una persona normal, sin temblar.

"Dentro de dos días va a ser tu cumpleaños."
Entrelace nuestros dedos y me incline a besarlo.

El me lo siguió. Apretando levemente mi mano, y moviendo lentamente sus labios.

"Mmm eso me recuerda que yo sigo envejeciendo y vos no."
Hice un puchero mirándolo.

El me apretó los cachetes con una mano haciendome una boca de pez.

"Detecto tus deseos de inmortalidad."
Me dio un piquito y me soltó.

"Sería un buen regalo."
Me miró mordiéndose el labio.

"Si seguís conmigo para tus 25 años, podría pensarlo."
"Mmm para los 21."
"Mañana cumplís 21, para los 24."
Apretó mis piernas y yo me acomode sentándome sobre su miembro.

El inclinó la cabeza para un costado, mirándome serio.

"Para los 22."
Pase mis manos por su pecho, suavemente. Buscando persuadirlo.

"Mmmm no."
Agarró mis manos.

"Dale Valen, podemos intentar..."
Movi mi cintura y el miro a otro lado.

Sabía que le gustaba. Ya le sentía la pija media dura.

"No puedo Dani, todavía no."
Se sentó todavía teniéndome sobre el.

Aproveche esto para abrazarlo por el cuello con mis brazos, y con mis piernas por la cintura.

"Dale Valen..."
Dije con una voz melosa. Realmente sabía que se iba a seguir negando. Pero quería ver cuál era su límite.

"No me voy a poder controlar Dani."
Sentí como apretó con un poco de fuerza, una de mis piernas.

En eso tocan el timbre.

"Te salvaste por ahora valu."
Lo mire a los ojos. Notando como tenían un leve tono rojizo que iba desapareciendo, dando lugar a su hermoso color natural.

"Como te gusta probarme."
Rei acariciando su mejilla.

Los chicos no esperaron mucho más y entraron. Cuando se trataba de venir a mi casa, no eran personas con mucha paciencia.

"Apa, ¿interrumpimos algo?."
Dijo depa, dejando dos sixpack de cerveza en la mesa.

"No lo creo."
Dijo Martín tirándose sobre un puff.

"Recién empezábamos, pero podemos continuar."
Dijo valen llevando una mano a mi culo.

Le di una palmada por atrevido y me senté a su lado en el sillón.

Tobo se sentó en la alfombra y depa a su lado.

Wawa se sentó en el otro puff y encendió un puchito.