¿Cómo me enamoré de su sonrisa?

Capítulo 2

Saqué el móvil y los cascos para poner algo de música y poder distraerme aunque fuera un poco en aquel viaje interminable de siete horas y media, aunque obviamente yo ya sabía que la batería de mi IPhone no iba a durar todo el camino de ida. Ya había hecho esa ruta ente montañas, lagos, cascadas y fiordos dos veces. Los turistas se impresionan, no cogen el tren por necesidad de desplazarse, simplemente lo hacen por ver el paisaje. Y lo entiendo, el único tren que comunica Bergen con Oslo en toda Noruega es un tren turístico, que hace once paradas de veinte minutos cada una en todo su recorrido. Pero eso también me parece una idiotez. Ósea, con todo el dinero que tiene el país, ¿tanto les costaría hacer una ruta de tren que no gastase dos horas y media en paradas para que los turistas contemplen el paisaje? Digo yo. Aunque bueno, ese tren es una de las atracciones turisticas más importantes del país, y con todo el dinero que recauda, el govierno noruego nunca renunciaría a el. Aunque todo hay que decirlo, las vistas son preciosas. Aún recuerdo el viaje que hice con mis padres en ese tren para ir a casa de mis tíos. Los hecho mucho de menos.

Nunca olvidaré la tarde de diciembre en la que estaba tumbada en mi cama viendo la televisón, y de repente llamaron al teléfono de casa. Eso fue extraño para mi, nunca nadie llamaba al teléfono de casa ya que siempre dabamos los números de móvil. Entonces dudé por un momento si cogerlo o no, pero al final acabé haciéndolo.

-Yup?- ('¿Sí?')

-God ettermiddag, jeg snakker med Miss Anna Jënssen?- ('Buenas tardes, ¿hablo con la señorita Anna Jënssen?')
-Ja , hvem er det?- ('Sí, ¿quien es?')
-Vi kaller Haukeland sykehus i Bergen. Har foreldrene dine er Mrs. Rune Jësen og Mr. Alex Jënssen?- ('Le llamamos del hospital Haukeland de Bergen. ¿Son sus padres la señora Runa Jënssen y el señor Alex Jënssen?')
-Ja ,hva har skjedd med mine foreldre?- ('Sí, ¿que ha pasado con mis padres?')
-Miss Du skjønner, herrene Jenssen har et kjøretøy ulykke på riksveg 555. Møhlenpris Damen er i en kritisk tilstand med flere brukne ribbein, lunge tåre og en hjerneblødning . Og Mr ... sorry men Mr. avdøde. Vi forventet at siden du er datteren kunne komme til å se sin mor, og det er liten sjanse for å redde henne.- ('Verá señorita, los señores Jënssen han tenido un accidente de vehículo en la autopista Mohlenpris 555. La señora está en un estado crítico con varias costillas rotas, un desgarre pulmonar y una hemorragia cerebral. Y el señor... lo lamentamos pero el señor ha fallecido a causa de una hemorragía interna general. Esperábamos que pudiese venir a ver a su madre, ya que usted es su hija y hay muy pocas posibilidades de salvarla.')
En ese momento todo el mundo se me cayó encima. No sabía como reaccionar, me había congelado completamente. Me acababan de anunciar que mis ambos padres acabaron de morir. Bueno, en ese momento solo mi padre pero estaba claro que a mi madre tampoco le faltaba mucho. Mil lágrimas caían por mis mejillas, notaba como me faltaba el aire a causa de no poder respirar, ni siquiera de mover un solo músculo. Al final logré susurrar algo.
-Gud...- ('Dios...')
-Ms?- ('¿Señorita?) -¡Ms!- (¡Señorita!)
Tengo el recuerdo exacto en mi mente de cuando entramos al hospital con mi tía y nos anunciaron que mis padres habían muerto. Es como una imagen que se repite una y otra vez en un bucle gastado y dañado por la vejez. Como la cinta de una película que vuelve aproyectar la misma imagen de mi madre dejando de respirar entre mis brazon en la pared de la desesperación. Me sentí como si hubiera caído en un agujero negro que me mataba lenta y dolorosamente por dentro. Como un sentimiento de culpa que no me dejaba reaccionar. Como si intentara escapar de ese pozo pero cuando casi alcanzaba la luz los miedos me arrastraban otra vez hacia adentro.
Los siguientes meses los pasé fatal. No comía, y mis costillas se notaban más que un grano de café en un bote de azúcar. Tampoco dormía, y las ojeras empzaban a destruírme la mirada. Esa mirada perdida, que ya no tenía sentido, que ya no encontraba lugar entre las otras. Lloraba, aunque ya no me quedaran lágrimas por derramar. Me lo habían arrebatado todo, por muy poco que fuera. Y nunca me había sentido tan desgraciada en toda mi vida.