El caso

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Era un sábado. Sherlock y John estaban en su casa cuando llegó un hombre. Era Moreno, con barba poblada y por encima de su chaqueta sobresalía una gran barriga. Sherlock estaba sentado con los ojos cerrados y las manos juntas debajo de su barbilla. John estaba sentado en su sillón leyendo el periódico. Cuando el hombre entró John bajo el periódico y le miró

-Buenos días, señor- dijo John. Se levantó colocó una silla enfrente de la chimenea y le dijo que se sentase. El hombre se sentó

-Muy bien, cuéntenos- dijo Sherlock aun con los ojos cerrados y sin moverse.

-Pues verán... Mi nombre es Mike Baggins y me gustaría que investigasen una cosa- dijo el Sr. Baggins -Soy profesor, estaba buscando unos documentos en la biblioteca y encontré unas fotos muy interesantes-
Sherlock abrió los ojos y cogió la fotografía que le daba hombre.

-Esta fotografía es en los Juegos Olímpicos de Londres de 2012 ¿ve ese hombre? Quiero que lo investigue- dijo el Sr. Baggins señalando a un hombre en la fotografía y saco otra imagen de una carpeta -Esta es una imagen de unos dioses del hogar de una casa en Pompeya, y ahí está él-

Sherlock cogió la fotografía y al verla se incorporó en la silla.

-Esta es del asesinato de Lincon, y él está ahí- dijo el Sr. Baggins enseñando otra fotografía -Y siempre va unido a esa cabina azul que se ve en el fondo-

-¿Cree que son familia?- Preguntó John mirando al hombre desarrapado.

-No señor, creo que son el mismo hombre- contesto el Sr. Baggins

-Mmm... Lo sientes Sr. Baggins eso es imposible. Ya puede irse buenos días- dijo Sherlock levantándose.
-Pero Sr. Holmes...-
-¡Adiós!- Interrumpió Sherlock mientras abría la puerta de golpe -Pero me quedo con las fotografías- continuó diciendo es detective asesor extendiendo la mano para coger las imágenes.
El hombre desarrapado le dio a Sherlock su carpeta y se fue decepcionado.Esa misma noche Sherlock se puso a investigar en internet aunque le dijo al hombre que no lo haría

Al día siguiente John llegó al 221B y subo a casa de Sherlock. Fue a buscarlo en su dormitorio y ahí estaba
-¿Que haces aun en la cama?- preguntó el rubio a su amigo

-¿Que hora es?- Preguntó Sherlock girándose envuelto en la sabana. John miro la hora en el movil

-Las doce y media. Ayer estuviste investigando ¿Verdad? ¿A qué hora te fuiste a dormir?- Sherlock se levantó sin contestar y salió de la habitación y se metió en el baño

-Hazme un café mientras me ducho- dijo a su compañero. John fue a la cocina e hizo lo que le mandó su amigo. Cuando terminó fue al salón y vio en la pared de detrás del sofá unas fotografías y algunos mapas con chinchetas. John oyó la puerta del baño abrirse.

-¡Ya esta el café!- exclamó John para llamar la atención de su amigo que se dirigía a su cuarto

-Esta bien, voy en un minuto- dijo el detective mientras cerraba la puerta del dormitorio. Unos minutos después Sherlock entró en la sala donde se encontraba su amigo
-¿Esto es lo del hombre inmortal y su cabina?- preguntó John mirando aun la pared. A lo que su amigo solo contesto un gesto de asentimiento, lo cual le fastidiaba mucho porque le daba la sensación de que no le escuchaba -Por el amor de Dios, sécate el pelo- se preocupo por su amigo al verlo con el pelo goteando- estamos en febrero, te vas a constipar.

Como de costumbre, Sherlock hizo como si le escuchara, cogió su café y se puso a bebérselo enfrente de las fotografías, al lado de John; los dos amigos miraban concentrados fijamente las fotografías.

-¿No lo ves? John- dijo Sherlock son dejar de mirar las fotografías. Su amigo le miró con cara de extrañeza, como preguntando "¿Que se supone que tengo que ver?" Sherlock le miró pensando, como hacia a veces, que su amigo era un idiota- No hay una facción de diferencia entre todos los hombres de las fotografías. Son exactamente iguales. Un hombre capaz de no envejecer.

-Eso es imposible- respondió John frunciendo el ceño ligeramente

-Es físicamente imposible que tantas generaciones de una familia sean completamente iguales- dijo él -Cuando has descartado lo imposible, por muy improbable quedes, debe ser la verdad.

Un señor del tiempo, un detective y una caja azul (Parada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora