Sin ley aparente

Capítulo 2

Dylan y yo llegamos al instituto, me duele bastante la cara del golpe que Andrew me había propinado unos minutos antes. A veces no entiendo la conducta de Andrew, el señor Cooper dice que todos tenemos una razón para actuar como actuamos, pero no entiendo qué razón tendría alguien para ser un verdadero hijo de perra.

–¿Crees que se note mucho?–Pregunto a Dylan quien me toca bajo él ojo y hace presión con su dedo–¡Desgraciado, si duele!

–Pues esa mierda fue un buen derechazo y lo más probable es que se haga algún moretón, ya que ya empiezo a notar un tono violeta–Se cruza de brazos.

–Diablos, había olvidado que eras doctor–Me burlo.

–He revisado a tantas chicas que ya hasta podría ser ginecólogo–Ríe–En fin, tengo clase, te veré más tarde Des.

–Nos vemos.

Veo a Dylan perderse entre las demás personas en los pasillos y después me doy media vuelta para dirigirme a la clase de Anderson, a la cual voy ya cinco minutos tarde. Clásico de mi.

Al entrar al salón, la señorita Anderson solo me hace una mirada con una sonrisa que dice "¿Que voy a hacer contigo?", a lo cual yo respondo una sonrisa nerviosa. Con su dedo índice señala su propio pómulo refiriéndose al golpe que seguramente ya es más notable.

–Después le explico–Es todo lo que digo.

Me dirijo a mi asiento. Hay algo raro en el salón hoy, algo que no cuadra, algo fuera de lugar. Así es, hay alguien nuevo sentado justo al lado de mi pupitre, Samantha. No la había visto desde aquel día en el que mi bocota la hizo alejarse, supongo que es bastante buena para mantener el anonimato y no llamar la atención.

–Muy bien chicos, como ya habrán notado, hoy se nos une a la materia una nueva estudiante, la señorita Samantha Walker–Dice Anderson al frente de la clase, y casi puedo notar que a Samantha le incomoda que la atención se centre en ella–Espero que la hagan sentir cómoda en este instituto.

La señorita Anderson comienza con la clase y es curioso, cuando acompañé a Samantha en el recorrido por la escuela, no había ninguna clase que ella y yo tuviéramos que compartir, qué raro.

–Ptss, oye–Me dirijo a Samantha por lo bajo–Filosofía no estaba en tu itinerario ¿o si?.

–No, yo solicité un cambio ayer. Oye, qué buen golpe tienes ahí eh.

–Clásica mañana de Viernes–Bromeo.

Su tono de voz suena amistoso, tal vez no esté tan molesta conmigo ahora.

–Por mucho que me gusta que las personas nuevas hagan amigos pronto, ¿podrían dejarlo para cuando no estén en clase?–Dice Anderson dirigiéndose a nosotros–Ahora en lo que estaba, su próxima tarea será un ensayo, pero no cualquier ensayo, será un ensayo sobre la persona, en este grupo, que ustedes elijan, profundizarán sobre la persona, que es lo que la constituye como tal y qué es lo que forma su carácter, tendrán dos meses para entregarme ese ensayo. Son libres de elegir ahora, cuando tengan su pareja se acercaran a mi escritorio para anotarlos.

Genial, otra tarea en grupos. No soy muy bueno haciendo tareas grupales ya que, bueno, no hablo con muchas personas, soy prácticamente invisible.
Veo a Samantha levantarse de su asiento y dirigirse al escritorio de Anderson, momento seguido Anderson me hace una seña para que me acerque así que me levanto de mi asiento y camino hasta el escritorio, este día si que será raro.

–Desmond, Samantha quiere saber si puede ser pareja contigo–Me dice Anderson.

–Bueno yo...