➳ Capitulo 6

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Lo besé con cada vez más desesperación para que entreabriera sus labios. Y como si leyera mi mente los entreabrió.

Mi lengua entró como loca en su boca, saboreando cada rincón de ella.

Acaricié una de sus piernas, haciéndolo sonreír mientras una de sus manos acaricia mi cabello húmedo y con la otra toma fuertemente las sábanas.



/..Pov JungKook../

Mordió mi cuello mientras acariciaba su creciente erección. Con otra mano acaricié su torso, sacándole pequeños suspiros.

-Lámelos, Kookie... -puso tres de sus dedos sobre mis labios.

Saqué mi lengua para introducirlos en mi boca y así comenzar a humectarlos bien. Los sacó y metió uno de sus dedos en mí.

Un segundo dedo fue a parar dentro y así el tercero.

-Ya no aguanto... -dijo con su voz más gruesa de lo que ya es.

Sacó su pantalón de debajo de la cama. Tomó un condón poniéndoselo lo más rápido posible.

Metió su miembro de golpe haciéndome gritar bajo por el dolor que me producía. Tomé una almohada y la mordí.

No esperó a que me acostumbrara por completo y se comenzó a mover.

Se movía cada vez más rápido, salía y entraba muy duro, pero se sentía tan bien. Una combinación de dolor y placer.

Sus gemidos y los míos se mezclaban. Dio en un punto que hizo que mordiera más fuerte la almohada.

-Ah... ahí... dale más... si... -gemí contra la almohada.

Quitó la almohada de mi boca y me besó salvajemente mientras me tomaba de las muñecas y las ponía sobre mi cabeza.

Le mordí el labio inferior y me corrí. Dio un par de embestidas más y el también se corrió.

Salió de mi lentamente, tiró el condón y se dejó caer sobre mi pecho.

Nos cubrió con las sábanas y al parecer se durmió.

Dia siguiente.

Amanecí solo... Ni siquiera una nota dejó. Suspiré y como pude me vestí y me levanté de la cama.

Preparé ramen y la comí mientras veía televisión, muy aburrido.

Lavé los platos y las sábanas que ensuciamos ayer en la noche.

Barrí la calle y toda casa. Fui interrumpido por una llamada de mi madre.

-Qué bueno que contestas hijo -dijo alegre.

- ¿Qué necesitas?

-Tu padre y yo saldremos de viaje de negocios, necesitamos que prepares nuestras maletas. Nos vamos esta noche.

-Si, como ordené -dije y colgué.

Me cambié de ropa y salí de casa a comprar unos artículos de limpieza que me hacen falta. De paso compraré unos dulces para la tarde.

Pasé por una bolita de chicos y no les presté atención.

Escuché unos pasos aproximarse a mí, oh no. No quiero morir.

Unos brazos me tomaron de la cintura, sentía el aliento de aquella persona en mi cuello. Me tensé.

-Oh Kookie, tranquilo. soy yo, Jimin -besó mi cuello con suavidad.

Me separé de él y me giré.

- ¿Qué sucede? -preguntó confundido.

-Me asustaste...

-Lo siento, pequeño -besó mis labios.

Le seguí el paso, el beso tan lento me hace sentir enamorado. Envolvió mi cintura con sus brazos y yo lo tomé del cuello acercándolo para profundizar el beso.

-Cariño... lo siento por dejarte esta mañana -habló al separarse.

-Fuiste malo por no dejarme una nota -le hice un puchero.

Rozó su nariz con la mía haciéndome sonreír. Volvió a juntar nuestros labios en otro beso dulce.

Me separé y dejé otro beso pequeño.

- ¿A dónde vas? -preguntó.

-Debo comprar unas cosas para el aseo de la casa

-En ese caso, yo te acompaño a comprar lo que necesitas y te ayudo con la limpieza de tu casa

- ¿De verdad? -sonreí. Asintió.

Ataqué sus labios de nuevo pero este beso era distinto. No quiero tener sexo en la calle, pero no es una mala idea.

Vecinos Con Derechos [JIKOOK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora