( Cinco ) la chica de Griddy's

12.3K 616 407
                                    

Advertencia: ninguna.

Cinco estaba cansado de la absurdas cosas que sus hermanos hacían. Él se la pasaba leyendo libros y resolviendo problemas de matemáticas, lo cual a los demás les parecía algo estupido y no muy divertido sabiendo que volvió a tener 13 años, se le reinició la vida y puede hacer todo de nuevo. Ya habían detenido al Apocalipsis ¿ahora qué seguía? eso es lo que se preguntaba todos los días. Dejar a Dolores en su tienda fue una equivocación, se sentía solo sin ella, pero sabía que no podía volver porque le prometio que seguiría adelante buscando otras cosas más interesantes en las que entretenerse.

Bajó las escaleras con su típica ropa de siempre, su uniforme de la academia. Iba a salir cuando justo en ese momento Número 4 se acercó.

— ¿A dónde vas, hermanito? ¿puedo ir contigo? — pregunta curioso.

— Primero: a ningún lado que te interese y segundo: no.

— Ay, eres un amargado... ¿Sabes qué? tengo una excelente idea; deberíamos irnos juntos hoy de noche de hermanos, buscando chicas, teniendo sexo, ya sabes...

— ¿Se te olvida que literalmente soy otra vez un niño de 13 años o qué, idiota?

— Eso no es ningún impedimento porque hay mujeres que les gustan menores, además ¡tienes poderes! eso es cool.

Cinco bufa molesto y se teletransporta a la camioneta, enciende el auto. Se sobresalta al ver a Klaus sentado a su lado en el copiloto.

— Por favor, Cinco, no seas amargado. Vamos a comer, tengo mucha hambre.

Se queja y comienza a conducir a algún lugar cualquiera donde nadie pueda molestarlo más que su hermano. En el camino escucha la radio pero no puede por la constante  de Klaus que lo abruma cada vez más así que termina por apagarlo. Se detiene en un semáforo que lo único que hace es ponerlo más nervioso. Sigue conduciendo sin dirección alguna hasta que se choca con Griddy's, la pequeña cafetería de donas que había visitado hace días y hecho un desastre adentro. Le trae buenos recuerdos. Se bajan y entran como si nada sentándose en una mesa alejada de las personas. Esperan unos segundos a que alguien venga a atenderlo.

— Hola, bienvenidos ¿están listos para pedir? — llega una chica de unos 18 años. Cinco la mira y la examina atentamente. Cabello negro, ojos claros... Sí, es su tipo.

— Dame una dona con extra de chocolate y un café helado con crema batida, gracias linda — pide Klaus amistoso.

— Un café. — responde simple el niño.

Ella se va después de anotar el pedido. Cinco la sigue con la mirada durante un rato pensando en que quizás lo que dijo su hermano se salir con mujeres mayores no es tan mala idea.

— La deseas ¿eh? — el niño mira enseguida al adulto con el ceño fruncido — tengo que admitirlo, tienes buenos gustos. Después de todo seguiste mis consejos.

— ¿Quieres callarte? si ella llega y te escucha, creerá que somos unos acosadores... Tus consejos son lo peor de tí, por cierto.

— ¡Cinco está enamorado, Cinco está enamorado! — grita celebrando. El niño se enoja y le tira un pedazo de papel en la boca para que se calle.

— No estoy enamorado, nunca me enamoraría y mucho menos de una mesera desconocida que puede ser perfectamente una secuestradora de niños.

— Ay, eres tan estúpido ¿acaso no sabes qué es el amor a primera vista? ¿nunca lo experimentaste? seguramente estabas muy ocupado besando a tu maniquí de plástico falso que jamás disfrutaste de las chicas de verdad como yo.

— Ahora sí estás muer...

— Eh... ¿Disculpen? — ambos escuchan al lado, viendo a la chica con todas las cosas en su mano. Cinco se aleja de su hermano volviendo a su sitio. Si ella no hubiese llegado, seguramente Klaus ya hubiese estado ahorcado. La peli negra deja todo en la mesa y los mira — ¿desean algo más?

— Mi hermano te desea a tí y quiere tener una cita contigo — dice antes de tomar su comida e irse corriendo como si no hubiese un mañana, dejando a Cinco solo. Él maldice por lo bajo.

— Disculpalo, él es un... Tonto... — dice sacando algo de dinero de sus bolsillos y dejándolo en la mesa — quédate con el cambio, no interesa.

Cinco se va rápidamente antes de que la chica diga algo más.

[...]

Cinco no había vuelto a Griddy's después del incidente con aquella chica, se sentía avergonzado de que su hermano lo haya hecho comportarse así delante de una chica. Eso nunca le había pasado. Ni siquiera con Dolores. Él sigue hundido en su libreta todavía con sus ecuaciones y millones y millones de números. No era tan tarde, la mayoría de sus hermanos habían salido, por lo que esta vez nadie podría interrumpir sus momentos de paz. Hasta que sonó el timbre de la academia. Se queja tirando el lápiz a un lado y se teletransporta  hasta la puerta principal, donde la abre. Iba a gritarle a la persona que estaba ahí pero se calló de inmediato al ver a la chica de Griddy's.

— Hola... Tu hermano fue hace rato a la cafetería y me dijo que querías hablar conmigo. Supe que vivías aquí porque mi madre era fanática de ustedes cuando era adolescente. — dice

— Maldito Klaus... Lo siento, es una confusión. Mi hermano solamente está urgido por conseguirme una novia, no quería meterte en esto. Todo lo inventó.

— Oh... Bien... Descuida. Pero te traje un vaso de café porque el que pediste en la tarde, lo dejaste y no te lo llevaste. — extiende la bebida hacia él y la toma. — lo hice porque me lo pagaste y no lo tomaste.

— Sí, perdón por eso también, como verás mi hermano es alguien que tiende a dejar en problemas a otras personas.

Ella se ríe levemente recordando lo mucho que humilló el adulto al niño en la cafetería. Literalmente escuchó todo lo que estaban hablando pero al parecer Cinco no quería hablar del tema.

— Soy Scarlett — se presenta amable. Él toma su mano lentamente y se saludan.

— Creo que ya sabes mi nombre.

— Sí, así es... Eh... Klaus me dijo que si tú no me invitabas a salir, lo tenía haría yo así que... ¿Te gustaría salir algún día? sé que suena absurdo porque eres mucho más menos que yo pero... ¿te gustaría?

Cinco se quedó estático literalmente. Una chica le estaba pidiendo salir. ¿Qué hacía? ¿se negaba? ¿le cerraba la puerta en la cara? ¿desaparecía como un fantasma para no volver a verla?

— Claro.

Scarlett sonríe para después sacar un papel y entregárselo. Cinco lo mira viendo el número de teléfono de la chica.

— Bueno, entonces te veré mañana si regresas a Griddy's. Mi horario es de dos de la tarde a siete de la noche por si quieres ir. Es martes de dos por uno. Tú me dices cuándo salimos.

Ella se acerca un poco dándole un beso en ma mejilla al niño para después dar la vuelta e irse de la zona. Cinco traga en seco tocando su mejilla donde está pintado el labial de fresa de Scarlett.
Por primera vez no se arrepentía de lo pesado que era su hermano Klaus.

𝗈𝗌, 𝗍𝗒𝗉𝗌, 𝗂𝗆𝗀𝗌 ~ cinco, aidan 《 completa en español✔︎ 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora