Toradora

Capitulo 7

Era el último día de las vacaciones conocidas como Golden Week.
Era la 1pm.
"Tienes tiempo libre ahora, ¿no?"
Como si el buen clima de afuera fuese una mentira, la residencia Takasu se veía un poco
sombría. Esto era porque la ventana estaba justo del lado que miraba al alto edificio de
apartamentos, así que el brillante sol de principios de verano era bloqueado y no llegaba
adentro.
Sin embargo, el interior estaba ordenado metódicamente, cada rincón estaba
perfectamente limpio. A pesar de ser estrecha, permanecía milagrosamente habitable
gracias a una planificación inteligente. Era un lugar muy confortable y tranquilo para
vivir, y todo esto era gracias a las habilidades de un solo hijo llamado Ryuuji, quien
ahora estaba en la cocina recién terminando de almorzar.
"¿Me estas escuchando?"
Nadie se tomó la molestia de responder y mucho menos de darle las gracias por su
trabajo. Ryuuji hizo una pausa del lavado y se dio la vuelta mirando el bulto tumbado en
el suelo. Bulto que yacía tirado y desordenado al lado de la mesa de comedor, estaba
cabeza hacia abajo con el mentón sobre el cojín y con un desconcertante rostro
inexpresivo mientras le metía un dedo en la jaula que tenia cerca.
Como si fuese un animal hambriento metía su dedo en la jaula como si estuviese
probando al delicioso loro color amarillo, Inko-chan. Su fealdad era parte de su
encanto, el pico, el cual le gustaba mantener abierto, era de color gris y la pequeña
lengua que sobresalía era como el color de la carne al pudrirse. Además, con los ojos
blancos descoloridos, parecía como si estuviese al borde de la muerte. Y como los
pájaros son incomprensibles para los humanos, sus parpados se movían como si
estuviera teniendo convulsiones, al parecer eran en respuesta del peligro. De acuerdo al
dueño, era imposible que su situación empeorase.
"...Taiga. Detén eso. Inko-chan esta enloqueciendo"
"...¿Hmm? Tienes razón"
Finalmente se dio vuelta el bulto blanco... quiero decir Aisaka Taiga se giró y saco su
dedo de la jaula. O al menos, así parecía.
"¿Eh? No puedo sacarlo"

"...Tan torpe". Mirándola inclinar su cabeza, Ryuuji solo pudo suspirar.
"¿Qué pasa contigo? Este no es el momento de andar suspirando. Creo que estoy
atascada"
Tirando con fuerza, se sentó en el tatami, Taiga mantuvo la jaula en una mano mientras
trataba de sacar su dedo gruñendo hoscamente. Inko-chan no la dejaba ir, aforrándose
valientemente en la punta del dedo de Taiga con fuerza.
"... Uwa está usando su lengua .."
En la tenue iluminación, se veía el estremecimiento de la chica de pelo largo, de color
castaño, contrastado con el entorno gris. Cubriendo ligeramente su delicada figura
estaba un vestido de una pieza con encaje. Con una sobrefalda blanca, la pieza completa
era encantadora...
"Oye, espera, ¿Por qué solo te quedas mirando? Es tu pájaro el que esta molestando, así
que apresúrese y haga algo su 'excelencia'..."
"¿Excelencia?"
"Estupido perro. Lo dije de una forma mas gentil, así que ¿porqué no me muestras algo
de gratitud?"
Este repentino aumento de agresiones verbales lo dejaron incapaz de hablar, pero si no
fuera por el duro lenguaje, Taiga se vería como una muñeca francesa moviéndose.
Además de eso, sus ojos brillaban como gemas, sus pálidos labios eran como los brotes
silvestres de la rosa, y su apariencia de chica linda era una tentadora trampa empapada
en leche condensada. Desafortunadamente, en ese momento ella se estaba desesperando.
"Agh, que irritante, ¡gah!"
Con un crujido, la forma de la jaula comenzó a doblarse en su mano. Inevitablemente
ella había nacido bajo la estrella del brutal y violento tigre. Su apodo era 'la Tigre de
bolsillo'...porque aunque su tamaño fuese pequeño, su ferocidad es comparable a la de
un tigre.
Dicho esto, no es como si Ryuuji perdiese en términos de apariencia feroz. Él estaba a la
par con ella claramente, desde que el espacio que cubría su flequillo aun estaba en
proceso de crecimiento. Tenía una mirada casi excesivamente peligrosa, una mirada que
ocultaba su personalidad. Aunque no había nada de especial sobre sus capacidades
físicas, el aura desprendía, lo volvía un ser terrible.
Sin embargo.
"¡No, no la rompas! ¡Ten cuidado!"

En el caso de Ryuuji, solo parecía peligroso. Secándose las manos mientras iba a
proteger a su mascota del hábitat de los tigres, se arrodilló al lado de Taiga. Trato de
tirar de la jaula, pero:
"¡Oh-ow-ouch!"
"Ah, lo siento"
Ryuuji saltó hacia atrás cuando Taiga gritó con su dedo todavía atrapado.
Probablemente sorprendido por el grito, Inko-chan de repente apretó más la punta del
dedo de Taiga.
"Eeeeeee~!"
Quizás como resultado del inmenso dolor, mientras gritaba más fuerte, se las arregló
para sacar por fin su dedo.
De esta manera, liberó su dedo y luego pasó a sentarse en los tatamis sin decir nada
durante un rato.
"...eso me dolió..."
Levantando su cabeza, Taiga miró a Inko-chan con esos ojos, que aunque estaba un
poco húmedos con lágrimas, reflejaban una filosa y fría mirada. Quizás él entendió la
gravedad de la situación porque:
"...Awawawa"
Chillo Inko-chan mirando a Taiga y temblando con estruendo. Con la tensión por todo
su cuerpo, comenzó a sacarse las plumas en grandes cantidades. En su confusión,
Ryuuji abrazó la jaula contra su pecho.
"Uwawa, Inko-chan te volverás calvo si sigues así, ¡tranquilízate! Si te vuelves más feo,
no podremos vivir juntos, ¡lo sabes! No sé que mas te seguirá haciendo Taiga, así que
salgamos de aquí"
Al mismo tiempo, Taiga se puso de pie.
"Espera, ¿Qué dijiste? No me gustaría ponerme seria contra esa cosa llamada Inko.
"Entonces, ¿porqué estas cerrando el puño?"
"Para darte el castigo a ti"
Obligándolo a ponerse de espaldas contra la pared, ella apretó su puño fuertemente.
"¿Qué hice?"
"¡Mi dedo duele!"

"¿Y que culpa tengo yo?"
Persiguiendo a Ryuuji, quien huía sosteniendo firmemente la jaula, Taiga le dio la
vuelta a la sala cuando:
"Fugya~!"
Ella cayó de cara sobre el tatami. A través de la puerta corrediza, pudo distinguir algo
blanco sobresaliente del piso, lo cual había sido la razón de que Taiga se tropezara.
Por cierto, la cosa blanca en verdad era:
"...¿Porqué esto se salio?"
Aunque la mirada de enojo de Ryuuji era automática y parecía blandir una espada, bajó
la jaula, y miró la cosa blanca que en realidad era la pierna desnuda de su madre. Por
cierto, Ryuuji no estaba enojado, solo desconcertado.
Con solo una pierna sobresaliendo de su habitación por la puerta deslizable, la cabeza
de la familia, Yasuko había caído en un profundo sueño. Después de emborracharse
mientras prestaba servicios en Bishamontegoku (el único bar con anfitrionas donde ella
consiguió trabajo), llegó a casa a las 6 am.
"Ah, ¿terminamos despertándola?"
Dijo Taiga, quien a pesar de ser egoísta, de naturaleza retorcida y vanidosa, aun
mostraba modos de preguntar amablemente en voz baja desde su posición en el piso.
"Nah, aun duerme"
Por supuesto, Ryuuji también bajo la voz, y tomó la pierna que se había salido,
comenzando a empujarla devuelta a su dormitorio. Resultando de esto:
"Mmm ... Hm, hua ~ .."
Gimió coquetamente Yasuko y luego:
"¡...Waaah!"
"Ah, ¿qué paso, que paso?"
La propietaria de la pierna se puso a llorar de repente. Tenia puesto un short corto de
gimnasia de secundaria y una camiseta bastante delgada que mostraba su sujetador
negro, pataleaba sacudiendo sus extremidades y frotando las palmas de sus manos
contra la superficie blanca del futon.

A pesar de su patético comportamiento, ella ya tenía 33 años, una mujer cuyo tamaño de
busto era una copa F.
"Yo, huelo tortilla de arroz frito~! Ryuu-chan y Taiga-chan se comieron todo mientras
Ya-chan dormía! Waah ~!"
"No seas ridícula; me aseguré de dejarte. Esta envuelto en la cocina para ti. Lo pondré
en el refrigerador por el momento para que lo calientes y lo comas cuando te levantes"
"...¿Escribiste 'Yasuko' con ketchup?"
"No escribí nada. Se estropearía al envolverlo. De todas formas, es 'Yasuko'"
"...Oh...Ya-chan, sigue con sueño, así que no digas cosas difícil de entender..."
Cayendo en la almohada con un plop, la madre soltera Yasuko comenzó a bostezar de
sueño. A pesar de ser inútil en los quehaceres del hogar, ella ganaba una respetable
suma de dinero en el trabajo, y a pesar de que tenia una personalidad amable y gentil,
los tornillos de su cabeza estaban comenzando a salírsele...cada día su hijo Ryuuji
gastaba tiempo ayudándole a mantenerse cuerda. Sin mencionar, que cuando Yasuko
estaba en su tercer año de secundaria:
"Mi puntuación en matemáticas era de 17~. Mi profesor de la clase estaba sin palabras,
y solo nos quedamos mirando hasta que el día terminó~"
...o algo así.

Independientemente de todo eso, por el momento la vida al estilo de la familia Takasu,
en lugar de caer en quiebra, ha prosperado. Con Yasuko como el pilar de apoyo, Ryuuji
a cargo de las tareas del hogar, la mascota Inko-chan y...
"Ouch...me raspé mi mentón. En serio, esta casa es demasiada estrecha. Oye Ryuuji,
¿harás sashimi para la cena? No tiene nada que ver, pero la caída me hizo pensar en
eso"
"...No digas cosas sin sentido ..."
"¿Qué? ¿Estas diciéndome que no tendré sashimi?"
Deslumbrando a Ryuuji, con sus ojos bien abiertos mientras se frotaba su mandíbula se
veía como un tigre con un temperamento salvaje.
"...Hay una venta de atún frente a la estación a las cinco. Si mal no recuerdo"
"Bueno, quiero ir de compras también, así que pásame a buscar a las 4:45. Me voy a
casa"
"¿Eh? ¿Te vas?"
"¿Alguna queja?
Durante las vacaciones, habían estado juntos todo el día. Incluso iban a comprar juntos.
Si bien es natural que ella durmiera en su casa, aun así tomaba una siesta en la casa de
Ryuuji después de la cena hasta altas horas de la noche casi todos los días. En cuanto a
estar juntos casi siempre, era más una cosa de conveniencia. Sin embargo, Ryuuji
continuó arrojando palabras sin rumbo hacia Taiga quien estaba de pie frente a él.
"¿Qué te iras? ¿Tienes algo que hacer? En cualquier caso, todavía estamos de
vacaciones, ¿verdad? ¿No es eso bueno?"
Él divago esto yéndose con evasivas por solo un rato más. Molesta cepillando su pelo
de lado, Taiga lo veía fríamente.
"Eres el único que tiene tiempo libre, tengo que lavar la ropa. Hay que aprovechar el
clima".
"¿Lavar la ropa? Solo debes apretar un botón, ¿no? Tu lavadora automática puede lavar
y secar, así que ¿Por qué dices que tienes que irte a tu casa?"
"Che" chasqueó con irritación Taiga, manifestando que mataría al que se le cruzase en
su camino.
"Agh, ¡que irritante! ¿Qué quieres decir? ¡Si hay algo que quieras decirme escúpelo
ahora!"
Casi con dolor, Ryuuji murmuró:

"... ¿Iras al restaurante familiar conmigo...?"
"¿¡De nuevo!?"
En ese instante, la irritación de Taiga aumento aun más. Sin embargo, Ryuuji no se
intimidaría solo con eso.
"No pasa nada si eres tú. ¿Verdad? ¡Yo no puedo ir por mi cuenta! Hoy dijiste que mi
tortilla de arroz frito era buena, así que te hice un poco, ¿no es así? Y además, ¿Cuánto
tiempo crees que voy a seguir ayudándote con Kitamura? ¿Por qué no me ayudas tú un
poco? Estaría bien que lo hicieras, ¿no?"
"Ah, maldición, ¡cállate ya! ¡Solo cállate y déjame en paz!"
"¿¡Qué dices!?"
En medio de su inútil discusión, desde atrás de la puerta deslizante vino un "Oo, ohh" –
un gemido de resaca, proveniente de Yasuko – deteniendo a los dos al instante.
"...Me harte, ya he tenido suficiente"
Finalmente la primera en rendirse fue Taiga.
"Estoy harta de hablar contigo, me tendrás que comprar un revista después, ¿lo captas?"
Pretendiendo escupir de mala manera con un sonido de 'pe', o por lo menos eso hizo
ver Taiga. Ryuuji asintió como un hombre, sin una sola queja. Si ella iba a acompañarlo
al restaurante, la revista era un precio bajo, porque en el restaurante familiar estaba...

"Ah, ¡aquí tienes tu pedido!"
El yogurt parfait apareció ante los ojos de Taiga sorpresivamente.
"Esto es un secreto, este es el especial de Taiga, con helado de vainilla extra. No se lo
digas a los otros clientes y disfrútalo~"
"¿Esto estará bien Minorin? ¿No serás regañada por hacer esto?"
"Te digo que no importa, ¡no te preocupes y relájate! Además, han estado viniendo casi
todos los días durante las vacaciones. ¡Esto es lo menos que podía hacer! Y que hay de
Takasu-kun, ¿Qué vas a pedir? Te recomiendo el té verde parfait, o si no quieres algo
dulce, entonces pueden ser papas fritas. Te las daré con un servicio especial"
"Ah, no, yo..."
Al enfrentarse a esa maravillosa sonrisa, Ryuuji solo podía mover sus brazos y ser
incapaz de levantar su mirada del café. Aun más, ni siquiera podía abrir sus ojos en
primer lugar.
Minori Kushieda, vestida de camarera, era demasiado deslumbrante.
Llevando su sedoso cabello amarrado en una cola de caballo, su esbelta y deslumbrante
nuca estaba expuesta. Con un vestido naranja pálido cubierto por un delantal blanco, el
uniforme completo era muy lindo. Incluso su discreto busto era resaltado con el fino
tejido, y su brillante sonrisa tenia el encanto de un melocotón sin madurar.
Mirando hacia abajo intentando ocultar su roja cara, evitaba desesperadamente el
contacto visual con su amor no correspondido de hace un año. Quería mirarla, pero no
podía, o más bien, no se atrevía a hacerlo. Esta era la contradicción de un hombre
enamorado.
"Talvez no quieran oírlo, no me gustaría insistir en lo mismo, pero ¿de verdad no están
saliendo?, ¿a pesar de que estén viniendo aquí juntos casi todos los días durante las
vacaciones? Ustedes son una pareja, ¿o no?
Había una sola respuesta a este tipo de preguntas y era:
""No, absolutamente no""
Respondían al unísono negando con la cabeza.
"¿En serio?"
"¡¡En serio!!".
Examinándola, como si estuviese sorprendida, Taiga miró a su mejor amiga a la cara, la
cual estaba llena de bondad y sin un rastro de malicia.

"Minorin, has estado trabajando aquí casi todos los días durante tu tiempo libre, pero
eso no significa que estés saliendo con el dueño del restaurante o algún viejo de la
cocina ni nada parecido. Para nosotros es lo mismo. Aunque digas que nosotros
venimos juntos, no quiere decir que estamos saliendo o algo así"
"... ¿tiene algo de sentido esa lógica?"
"Lo que tu decías era igual de ilógico entonces"
Se había vuelto algo usual que 'Takasu y Aisaka no estuviesen saliendo', sin embargo
ahora, Minori tomaba cada oportunidad para plantear sus dudas en modo de broma.
Pero para Ryuuji, quien estaba enamorado en secreto de Minori, esto era demasiado
cruel para ser una broma.
"Sí, sí, entiendo eso de los dueños"
"¿A que te refieres con dueños?"
"Que tu lógica no funcionaria por todos los trabajos que tengo, no funcionaria con el
dueño de la tienda de shabu-shabu donde trabajo a part-time cada noche, o con el del
karaoke, o con el del restaurante de comida rápida en el que trabajo en la mañana. Y esa
misma lógica no se aplicaría con Taiga y Takasu, ya que siempre están juntos. Bien eso
es todo, tengo que volver al trabajo"
"... ¿para qué son tantos trabajos part-time?"
Sin pensarlo, las palabras salieron de su boca por accidente, de manera espontánea, aun
así Ryuuji se felicito a si mismo por hacerlo.
"Tienes razón, son muchos, pero esto es debido a que estoy ahorrando. Además, a pesar
de que estemos de vacaciones, aun tenemos actividad en el club. Según el capitán, no
podemos simplemente andar jugando"
Ryuuji no encontraba como responder a eso. En cambio, la que mantuvo la
conversación fue Taiga.
"Has estado trabajando demasiado. Con todo el dinero que has ganado, ¿no hay algo
que quieras?"
"Porque tengo tiempo debo seguir trabajando. Es un fetichismo"
"... ¿Qué es eso?"
"El trabajo me refresca. Bien, ¡nos vemos mas rato!"
Dejándolos con la misteriosa frase, Minori la hiper-franca chica mesera se alejó
dirigiéndose a la cocina. Después de que los dos la vieran irse:
"Que admirable...ella no solo es linda, sino que también esforzada. Totalmente
diferente a ti"

"... ¿Qué?"
"Bueno, te despiertas por la tarde, vienes a mi casa con el pelo y la ropa hecha un lió,
mendigando un almuerzo, y luego continuas holgazaneando viendo televisión, mendigas
la cena, quedándote a holgazanear hasta tarde en la noche, y luego yéndote a casa, ¿no
es así? Que improductivo"
Taiga levantó su cabeza de repente.
"Son las vacaciones, por lo que esta bien, ¿no? Y tú no eres diferente. Además, ¿no se te
olvida algo importante? He estado esforzándome por venir acá por tu bien ¿no lo crees?
En realidad, eso debería ser lo más importante para ti"
Ella tomó la cuchara con parfait y se lo arrojó.
"Ugh... ¡me cayó en el ojo!"
"Aunque este de vacaciones, he estado perdiendo mi tiempo contigo, ¿lo captas? ¿hm?"
Aparte de mostrarse enojada, Taiga hablaba arrogantemente.
"Deberías estar satisfecho con todo esto. Estoy aquí dejándote ver a alguien que te
gusta. Pero sabes, no es lo mismo para mí. Nadie me ayuda de esta forma"
"... ¿Qué intentas decir? No es mi culpa que tú no seas capaz de ver a Kitamura. Porque
yo te he ayudado, ¿o no?"
"..."
"¡No me ignores en medio de una conversación!"
"¡Cállate!"
Diciendo esto, bajó la cabeza en silencio para ver a la chica de la revista que había
comprado como siempre al pasar por la tienda. Aunque Ryuuji no estaba de acuerdo con
lo que ella dijo, solo podía tragarse su comentario junto con el negro café.
A pesar de lo que Taiga dijera, él no tenia la culpa. Empezó a recordar la tarde del
primer día de vacaciones.
Mientras era molestado por Taiga, él había telefoneado a Kitamura, su amigo cercano y
también el enamorado de Taiga. Sabiendo que Kitamura tendría al menos 3 días sin
actividades en el club de softball, del cual tanto él como Minori eran parte, Taiga hizo
que Ryuuji le preguntase sobre sus planes para esos días. Dicho esto, Taiga carecía
completamente del valor para pedirle salir con ella, así que elaboró un plan donde
Ryuuji se reuniera con Kitamura y así ella poder pretender que se unía de camino.
Sin embargo, solo hubo una respuesta a la llamada telefónica que estaba haciendo junto
a una nerviosa Taiga y fue: - "¡Es lo peor! Quería por lo menos un día para relajarme,
pero con las tareas y con lo del consejo de estudiantes, ¡estoy completamente ocupado!"

– no importa como lo mires, el momento fue terrible. No había nada que pudiese él
hacer en esta situación.
"...De todas formas si lo vieses, no serias capaz de hablar con él"
"..."
Viendo si ella respondía o alteraba su expresión, lo único que vio fueron sus labios
apenas susurrando "Vete-al-infierno"
"...No puede ser... ¿allá me envías?"
"¿No escuchaste bien? Pues lávate los oídos"
Con una mueca de burla, le dio una mirada más de demonio que de tigre.
En esta situación, Ryuuji no podía dejar de pensar, ¿Por qué desperdiciaba su tiempo
ayudándole, cuando solo era ridiculizado y despreciado?
"¡Ah~!"
El gritó de Taiga cortó sus pensamientos
"¡Ahh! ¿Qué diablos estas haciendo torpe?"
A pesar del pánico, Ryuuji se paró con un pañuelo en la mano antes de acercarse y
ponerse de rodillas como un sirviente al lado donde Taiga estaba sentada.
Un poco de salsa de arándonos se había caído de la boca de Taiga en su vestido cerca de
las rodillas. Tenia que limpiarlo antes de que se seque y no saliese.
"Aww, ¿no se sale?"
"No, no importa. Cuando volvamos lo limpiare y quedara como antes"
Mojando el paño en una taza con agua, Ryuuji rápida aunque nerviosamente lo frotaba
contra el vestido mientras ella se quejaba lastimosamente. Después de todo, Ryuuji
estimaba que el vestido era veinte veces más caro que su ropa de calle. Incluso si no
fuese suyo, él no podía dejar que algo tan valioso sin cuidado. Y aunque estuviesen
discutiendo hace un rato, no era problema, porque cuando pasaba algo malo, él siempre
le ayudaba. Sí, así es, tal y como estaba ocurriendo ahora.
Ellos siempre eran así. Mientras continuaba con la limpieza de emergencia, Ryuuji
inconcientemente evitaba el contacto con sus ojos.
La única razón para que ellos dos estuviesen juntos, era porque cada uno estaba
enamorado del mejor amigo del otro. Este hecho lo supieron con una serie de casuales
eventos y de los cuales después nació una extraña alianza.

Taiga, quien había estado viviendo solo, de repente comenzó a contar con Ryuuji para
sus necesidades diarias, y Ryuuji, a quien le gustaban las tareas domésticas y la
limpieza, no se negó. En consecuencia, las cosas se mantenían progresando poco a poco
hasta caer en un complicado estilo de vida que se ejemplificaba con la situación actual.
Es tan torpe
La temible chica conocida como la Tigre de bolsillo tenia un sorprendente otro lado; en
otras palabras, ella era simplemente la persona más propensa al peligro que nadie que él
hubiese conocido, así que termino siéndole imposible no estar pendiente de ella en todo
momento. Cuando la dejaba ir por si misma, ella inevitablemente se caía varias veces en
el día. Si ella iba detrás de él, terminaba viendo para atrás a cada instante, o si ella usaba
un fósforo, no dejaba de estar pendiente de ella. Si él no le preparaba la comida, ella se
quedaría sin comer y su condición física se deterioraría. Ella era tan torpe que él se
sentía como un escolta viéndola todo el día para que no hiciera nada absurdo.
¿Aparte de eso que podría decir? Además terminó presenciando su fallida confesión. Y
sorprendentemente se dio cuenta de que era una llorona.
Las cosas fueron muy suavemente en mayoría, pero a pesar de que Ryuuji y Taiga
comían, iban al colegio e incluso iban de compras juntos, no existía ningún afecto
mutuo en la extraña relación que habían desarrollado.
Ryuuji podía encontrar solo una razón más para que ellos estuviesen juntos y era porque
era un dragón y Taiga era un tigre, juntos componían un conjunto completo, o algo por
el estilo.
"¡Ah!"
Una vez más, Taiga salpicó donde Ryuuji estaba limpiando.
"...Se un poco mas cuidadosa. Aparte, de todos los lugares, ¿Por qué lo tiras en el
mismo lugar? Menos mal que me cayó en el dedo.
"Geez, cállate ya, no lo hice a propósito. En primer lugar, no te pedí limpiarlo ni nada"
"¿Qué tonterías estas hablando? Si te dejo sola, ¿podrás quitarla por ti misma? No,
¿cierto? Debes saber, que no hago esto por tu bien, lo hago por el vestido"
"¿Qué? Oh, ya veo. Si te gusta tanto, te lo puedo dar. Así podrás llevarlo"
De todos modos...ahora, ella era cada vez más despiadada.
Aun así, no podía quedarse tranquilo viendo una ropa tan cara ser ensuciada, así que
mientras hacia tres veces mas dura su expresión, como si fuera un delincuente
condenado a diez años (con cierta cantidad de malestar), hizo caso omiso de ella y
siguió esforzadamente sin vacilación limpiando el vestido. Entonces:
"Ah"

"¿¡Hiciste algo mas ahora!?"
Ryuuji miró instintivamente hacia los indefensos sonidos que Taiga emitía.
"No es eso...esta cosa es linda, voy a comprármelo. Definitivamente"
Taiga murmuraba mientras sostenía una página de la revista por los bordes.
"¿Gastaras tu dinero de nuevo? ¿Cuántas cosas similares seguirás comprando? Bueno,
¿Cuál es? ¿Cuánto cuesta?"
"¡Deja de hacer tanto ruido! ¿¡Te crees mi madre o algo así!?"
"Yo voy a ser el que termine ordenándolos, así que tengo el derecho de verlos primero"
Ryuuji se levantó y se sentó junto a la tempestuosa Taiga, tomando una mirada de la
página que estaba viendo mientras se acercaba.
Él había gastado todo un día en ordenar su costosa ropa que estaba desparramada fuera
del closet de su habitación, las cuales por suerte estaban por los alrededores. Por esto, él
tendría el derecho de restringir sus gastos. Así que:
"... ¿Es este? Este....me preguntó cuánto costara"
Él ladeo su cabeza sin darse cuenta. En la pagina que Taiga había dicho lo de la compra,
estaba una modelo que llevaba un par de delgados jeans que mostraban sus largas
piernas en una hermosa pose. No era llamativo ni nada, pero...
"...Diré esto por tu propio bien... si llevas esto, te quedara grande"
En cualquier caso, Taiga media un poco más que 1,40 mt., era fácil de ver que no tenía
las piernas tan largas, sin embargo:
"... ¡Lo que quiero es este bolso!"
"O, oh...a eso te referías"
"Geez, lo siento por tener las piernas tan cortas"
Como su voz resonó con un inquietante tono misterioso, desmintió por completo su
imagen de tranquilidad. Ryuuji sin pensarlo se echo hacia atrás, preparándose para
escapar. Taiga lo miró con ira.
"Espera, vamos, cálmate... estamos en el lugar de trabajo de Kushieda"
"¿¡Qué estas diciendo!? ¿¡Te estas burlando de mi!? ¡No permitiré esa actitud!
¡Cometiste un error, así que discúlpate!"

Taiga arrugó la nariz de forma feroz – parecía que su extraña broma se volvió real –
esto era malo. Ella estaba muy enojada ahora. Por supuesto, él se quería disculpar
rápidamente, pero:
"Guh..."
"¡Yo sé que tengo las piernas cortas! ¡Pero nunca antes me habían molestado!"
Agarrándolo por el cuello, ella comenzó a sacudirlo violentamente. Ryuuji no podía
hablar; de hecho, ni siquiera podía escapar. Lo estrangulaba sin piedad y pateaba la
mesa sin vergüenza, mientras él desesperadamente trataba de decirle '¡me rindo!, no
más'
Luego, de repente, fue liberado del agarre de Taiga. Una vez libre, Ryuuji se derrumbó
tosiendo en el asiento, intentando recuperarse.
"Hey... ¿¡estas tratando de matarme!? ¡Enserio!"
"...Qué, qué..."
Distraída, con la boca abierta. Taiga parpadeaba sorprendida. Parece que finalmente se
dio cuenta de que estaba siendo demasiado violenta, Ryuuji asentía complacidamente.
"Así debe ser. Sabes, estoy sorprendido. Esperemos que ahora lo entiendas, esta
experiencia evitara que estrangules a alguien de nuevo"
Mirando intensamente a Ryuuji, Taiga apuntó a la página de la revista que acababan de
ver, seguido de un "¡Mira, mira!"
"...Ya se que quieres ese bolso"
"¡No eso! ¡Esta persona!"
Al final de sus dedos color cerezo estaba una bella mujer con las piernas cruzadas
hábilmente, era una chica hermosa con una cara sonriente. En la fotografía se veía muy
a la moda, tenía puesto una camisola que debería costar muy cara, unos jeans vaqueros
y su suave pelo suelto al viento. Era ciertamente una modelo muy bonita, pero como era
una modelo, es de esperar que lo fuese. No parecía haber nada fuera de lo común en
ella.
En el momento que él intento preguntarle que pasaba con ella, Taiga le agarró la cabeza.
"¡Owowow!"
Al tomársela hizo que la girara en 180 grados para que mirase detrás de él.
"...Oh"
Sin pensarlo, emitió un sonido de sorpresa.

Una cliente recién llegada se estaba sentando no muy lejos de donde Ryuuji y Taiga
estaban sentados.
No solo Taiga y Ryuuji la miraban. Girándose y murmurando en silencio, casi todos los
clientes del local relativamente lleno, estaban mirándola.
Lo primero que la destacaba era su esbelto cuerpo que hacia que uno se quedase con la
boca abierta. No parecía ser excepcionalmente alta, pero debido a que tenía la cabeza
ladeada a la derecha no se alcanzaba a apreciar su altura.
Su pelo había sido cuidadosamente arreglado para estar brillante y sedoso. Pero en vez
de sentirse abrumada por las miradas, descansaba sus hombros con aire despreocupado.
Tenía puesto unos lentes al estilo Hollywood y caminaba con una elegancia impecable.
Sus delgados tobillos calzaban unas sandalias con tacones, que la hacían parecer una
escultura terminada.
A pesar de que solo estaba llevando jeans de mezclilla, su apariencia poco japonesa de
piernas largas aumentaba su estilo de niña más de lo que podría haber hecho un vestido.
Con un bolso de marca colgando del hombro y una pulida tez blanca, era fácil ver que
ella no era ninguna aficionada.
En resumen, una verdadera belleza. Tenia un gran atractivo que no se podía evitar notar.
Después de sacarse lo lentes de sol, el lugar se sumió en una sola reacción.
"Oooh..."
Incluso Ryuuji suspiró con exaltación y miró sin pensarlo. Como si una neblina se
levantase ante sus ojos, su chispeante atractivo fue liberado.
Era maravilloso que un par de ojos tan grandes pudiesen caber en un rostro tan pequeño.
Su rostro era suave y tenía un elegante color rosa. La discrepancia entre su cuidadosa
expresión y su estilo refinado la hacían aún mas llamativa.
Ella parecía encantadoramente pura hasta la médula. Era tierna, tranquila y elegante.
Definitivamente como un ángel, que descendió benevolente hasta este restaurante
familiar para compartir su aura brillante con las masas. Ryuuji casi esperaba ver un halo
sobre su cabeza.
"... Esta persona, ella es..."
"... Sí..."
Era la misma persona a la que Taiga había apuntado en la página.
"... Ella es una modelo..."
Ryuuji suspiró profundamente; era la primera vez que veía a alguien famoso y que fuese
una modelo.

A pesar de ser una revista común y corriente, ella era muy linda en persona.
"Esa chica, su nombre es 'Ami Kawashima'. Estuvo en la portada hace un par de meses
atrás"
Taiga se lo dijo inusualmente excitada.
"¿Enserio?...Haa...creo que debería volverme un fan...Ami Kawashima-san...me
preguntó que hará en un lugar tan aburrido como este..."
"Su madre, es la actriz Anna Kawashima"
"Ooh~... ¿no la vimos la otra noche?... (Reiko Yuuzuki, la gran investigadora de
homicidios en: 'Izu es un buen lugar para asesinar en primavera')...así que ella es la
hija de Reiko Yuuzuki...ahora que lo mencionas, se parecen. Bien, le tomaré una foto
con mi celular"
"Ya basta, o me volveré loca"
"Lo siento...de todos modos, calmémonos por ahora. Me emocioné un poco"
"Que indigno"
"¡Oye, tú también lo estabas!"
Sentados uno al lado del otro, respiraron profundamente para calmarse.
"Bien, como sea...vimos algo bueno, ¿no?"
"Esto es lo único que recordare de estas vacaciones"
Ryuuji asintió con la cabeza al estar de acuerdo con ella, luego cada uno agarró sus
respectivas tazas al mismo tiempo, la de Ryuuji llena de café y la de Taiga de té con
leche, y simultáneamente se las llevaron a la boca.
"¡Yuusaku~! ¡Tía, tío, aquí hay un asiento~!"
"¡Oh!"
""¡¡Guah!!""
Al mismo tiempo, arrojaron sus bebidas violentamente. Ahogándose y tosiendo al
unísono, los dos casi se atoraron...esto debido a que la bella modelo que había
aparecido delante de ellos estaba llamando a alguien familiar para ambos.
"Por, por... ¿¡Por qué!?"
"~ Ki, Kita ~, ~ Kitamu, Kitamura-kun? De ninguna manera, ¿por qué? ¿¡Qué esta
pasando!?"

Ryuuji estaba contra la mesa temblando como un pedazo de papel y Taiga mecía los
brazos como el baile de un pulpo, sus brazos de alguna manera se habían enredado.
Ambos fueron vistos.
"¿Hmm? ¿Si no es Takasu y Aisaka?, ¡que inesperado! ¿Qué están haciendo? No
importa eso, ustedes se llevan muy bien, ¿no muchachos?"
Yuusaku Kitamura, quien había entrado al restaurante, los saludó de manera casual
como siempre. Negando con la cabeza, la mirada afilada de Ryuuji se hizo más aguda, y
Taiga, quien había sido desbordada por una avalancha de emociones, se quedo
anonadada. Mientras tanto, inconciente de su situación:
"Al parecer Kushieda trabaja aquí de part-time. ¿La han visto?"
Continuó Kitamura alegremente.
"Bueno, la vimos, pero... ¡esto no es lo que parece!"
Viendo de reojo a su bella acompañante. Ryuuji se acercó un poco a su optimista amigo.
"Oye, ¿¡Qué esta pasando aquí!? ¿Porqué estas con...?"
"¿Eh? Ah, es cierto. Esta es una buena oportunidad para presentártelos. Estos son mis
padres, Takasu, probablemente ya conociste a mi madre cuando tuvimos la reunión de
estudiantes, padres y maestros"
A pesar de que seria rudo mientras los padres de Kitamura se inclinaban educadamente
y hacían el saludo formal, Ryuuji le dijo:
"¡No, eso no es lo que quise decir!"
Ryuuji negaba con la cabeza violentamente, y agregó:
"No es sobre ellos, si no, ehm, ¡eso!"
Con limitadas expresiones faciales, Ryuuji intentó expresar lo que quería decir a su
mejor amigo con movimientos exagerados del cuerpo. Sin embargo:
"¿Qué pasa? ¿Yuusaku?"
"Oh, estoy intercambiando presentaciones"
Las cosas solo empeoraron.
La bella modelo se estaba acercando a ellos. Parecía como si fueran rodeados por
brillantes chispas, y una fascinante fragancia.
"Ella es Ami Kawashima. Aunque no lo parezca, ella vivía por aquí. Antes de que se
mudara, era mi vecina. Creo que se podría decir que es mi amiga de la infancia"

"¿Qué intentas decir con 'aunque no lo parezca'?"
Inflando sus mejillas juguetonamente mientras miraba a Kitamura, se veía como una
chica normal. Todo pasó frente a Ryuuji. En un espacio de tres dimensiones.
En una situación tan extraordinaria... Kitamura aún mantenía la calma.
"Era una introducción. Como sea, estos son mis amigos Takasu Ryuuji y Aisaka Taiga"
Sentado uno al lado del otro en el mismo asiento y mirando con una extraña expresión
combinada de chico/chica, fueron presentados al ángel. El ángel de nombre Ami
Kawashima los saludó riendo y sonriendo tiernamente.
"¿Cómo están? ¡Soy Ami, es un placer conocerlos!"
Ágilmente ella extendió sus manos abiertas.
Ryuuji miró sus hermosas manos... hipnotizado, no pudo evitar que sus movimientos
fueran rígidos como un robot, entonces mientras el ángel extendía sus manos agregó:
"Hey, agitémoslas. Cualquier amigo de Yuusaku es mi amigo también"
Las manos de Ryuuji comenzaron a sudar.
"...A. ah, a"
Al tocar las manos de Ami Kawashima, sintió que estaban agradablemente frías, y que
su anillo al tocarlo, era incluso más frío.
"Eh, hm, ¿podría ser eso...?
Soltando rápidamente la mano de un Ryuuji estupefacto, apuntó su delgado dedo a la
revista de Taiga que permanecía sobre la mesa.
"¡Kyaa!"
Un grito exquisito. Nerviosa, Ami tomó la revista y se la puso contra el pecho, luego se
encogió de hombros como si estuviera avergonzada. Mientras sujetaba la revista inclinó
su rostro hacia abajo, y empezó a murmurar.
"¡No puede ser!... ¡que coincidencia!...podría ser que...ah, no puede ser, ¿entonces ya
lo sabes? Esta soy...esto...quiero decir, que yo aparezco ahí...que tengo este tipo de
trabajo..."
Ella estaba temblando de vergüenza, manteniéndose desconcertado por unos segundos.
¿Qué esta diciendo?, pensó Ryuuji, un poco sorprendido.
Era bastante obvio que alguien que haya visto alguna revista de moda, supiese de
inmediato quien era ella con solo mirarla. Ryuuji no entendía por que ella actuaba de

esa manera, como si fuese un secreto. ¿Sería posible que Ami no supiese que tan
popular era?
Después de un rato, logró decir lo que estaba pensando.
"Bien...si me fijo en ti, se nota que eres una modelo...así que es obvio que algo sepa"
Diciéndolo lo más claro que pudo, aunque sentía que podía hacerlo mejor, ella le
respondió:
"¿Eh? ¡Tienes que estar mintiendo!"
Dijo Ami totalmente incrédula elevando la voz, abriendo más los ojos y ladeando su
cabeza.
"¡Me veo como todos! No estoy usando maquillaje y esta ropa es del montón... ¿Qué
parte de mi luce como una modelo?"
En otras palabras, ella no se había dado cuenta de cómo se veía, como un ángel. Tan
inocente y puro.
"Mira, mi pelo es un lío, porque no me lo peine al despertar, y lo deje tal cual y salí, ¿lo
ves? Me preguntó porqué... es raro... no consigo entenderlo"
Mientras miraba su rostro preocupado, Ryuuji comenzó a entender algunas cosas. Para
una persona que había nacido naturalmente bella, no entendería lo inusual que era,
definitivamente. Sin embargo, era esta razón la que la hacía ser pura. Además esta
pureza la hacía ver más bonita, y ser perezosa también le hacía ver aun mas linda.
"¡Ah!"
Ami apuntó de repente a la nariz de Ryuuji.
"Justo ahora, pensaste 'ella es una natural cabeza de chorlito', ¿no?"
Frente a un agitado Ryuuji y de ojos inflexibles, Ami hincho su cara y comenzó a verlo
con ojos burlones. Ryuuji definitivamente había estado pensando en lo 'natural, pero el
significado era diferente...aunque en este caso, el significado que ella le dio, debía
aplicarse también.
"¿Entiendes a lo que me refiero, no? ¿Tú piensas eso, cierto?"
Por supuesto, las pupilas de Ami estaban temblando insinuando una sonrisa, y
guiándose por ese movimiento, Ryuuji terminó asintiendo.
"¡Lo sabía!"
Llorando dulcemente con un 'Aah', Ami torció sus labios haciendo un puchero.

"Caray, siempre me llaman así. Como, 'Ami en verdad es una cabeza de chorlito, ¿no?'.
Me preguntó porqué será así, porque no soy así en lo absoluto, pero todos continúan
diciéndolo...apuesto que incluso Yuusaku piensa de esa manera"
"No, no es cierto"
Apenas hablando, Kitamura sonrió amargamente y se encogió de hombros. Luego,
decidiendo que había esperado el tiempo suficiente, empujó a Ami suavemente por la
espalda y dijo:
"Bueno, volvamos a nuestros asientos. Papá y los otros están esperando nuestros
pedidos"
"¡Ah, es cierto! Dejamos a los tíos esperándonos en la mesa"
Kitamura hizo una seña en disculpa hacia Ryuuji y Taiga.
"¿Takasu y Aisaka, seguirán estando acá por un rato, cierto? Estamos cenando con mi
padre y los demás antes de irnos a casa, así que hablemos un poco más después"
"Ah, claro"
"¡Nos vemos, entonces!"
Agitando su mano antes de girarse, la figura de Ami era extremadamente hermosa,
como una poderosa ola emergente. Y así mismo, como una ola, ella siguió adelante.
Al ver a su amigo y Ami irse, Ryuuji inclinó su espalda contra el asiento agotado.
Mantuvo un ojo en ellos hasta que llegaron a sus asientos.
"Ah..."
Aun delirante, suspiró, quizás por millonésima vez.
Aunque sea tan bella en persona y su madre sea una actriz, aun así es tan pura y nada
pretenciosa. No es egocéntrica, hasta tal punto que ni siquiera se considera a ella misma
en lo absoluto. Podría ser un poco cabeza de chorlito, pero incluso así es linda. Para que
una chica así exista en este mundo...ella es simplemente perfecta.
Era tan diferente de la desordenada Taiga, quien es lo suficientemente bonita, pero sin
duda tenia un temperamento tan malo que era deprimente. Era una perdida de tiempo
ponerse a compararlas.
"...Oye, sobre Ami Kawashima, aunque ella sea una celebridad, parece ser una chica
realmente agradable. Aunque tenga una cara bonita, mantiene una personalidad
amable...sabes, no sería malo que le preguntases unas cosas de él. Como ella y
Kitamura son amigos de la infancia.... ¿no lo crees, Ta...?"
"..."

"¿...Tai, ga?"
Tragando saliva, Ryuuji rápidamente se alejó de ella. Luego, se sentó en el asiento del
otro lado de la mesa.
Él no se había dado cuenta de su descuido, pero había estado sentado muy cerca de un
tigre, que estaba gruñendo silencioso. Erróneamente, él llegó a pensar que se había
vuelto inusualmente débil, pero en lugar de eso, era más como un predador al acecho
ocultando su presencia.
Aunque podría haber tenido un aspecto débil, ahora tenía un aura asesina irradiando por
todo su cuerpo y alrededor de ella. Con su pequeña cara bonita pareciendo una mascara
de Noh (mascara usada para el teatro musical japonés), comenzó a morder sus
retorcidos labios, como un animal salvaje desgarrando la carne. Una feroz y penetrante
luz, podía verse en sus grandes ojos, parcialmente cubiertos por sus delgados parpados,
mientras veía a Ami marchándose. Su pequeño cuerpo permaneció en su asiento, pero
su mentón se elevó orgullosamente mientras la veía con disgusto.
Dejando de lado la comparación, Ryuuji no pudo evitar preguntarle:
"...Tú... ¿De que se trata todo esto? Aunque es cierto que una chica muy bonita y que
se lleva bien con Kitamura ha aparecido de repente, no deberías estar tan irritada. ¿No
estabas feliz sólo hace un rato?"
"... Te equivocas"
Juntando sus labios, bajo un susurró que sonó de manera siniestra.
"No es una cosa tan simple como esa. Mas bien es..."
Sin embargo, Taiga se detuvo a la mitad, miró hacia arriba y lanzó un 'Fuu' con un
pequeño suspiro, Ryuuji podía sentir la tensión en el aire.
"...Ah bien, no importa"
Su brillante mirada, se transformo en una cruel sonrisa al mirar a Ryuuji y dijo:
"¿No caerás tan bajo como para acercarte a ella, cierto? ¿Lo entiendes, no? Ni siquiera
tú puedes ser tan tonto"
"... ¿De qué estas hablando?"
"Bueno, quizás tenga un sexto sentido para este tipo de cosas. Te daré una pista 'las
personas que se catalogan a si mismas como tontas', no hay manera de que sean
honestas"
"... ¿Será de verdad cierto eso?"

"Piensa lo que quieras"
"Fu", Taiga torció sus rosados labios en señal de victoria, deteniendo su mirada en Ami.
A pesar de que ella hiciera un puchero por un rato, Ryuuji podía entender que no quería
irse a casa porque esperaba hablar con Kitamura, aunque fuese un poco.
Mientras Taiga continuaba viendo su revista con una expresión que Ryuuji no podía
leer, él continuó vacilante leyendo su folleto complementario sobre comida de bentos.
Casi había pasado una hora.
"Hey. Mis padres ya se fueron a casa"
Vestida a la moda en un conjunto de ropa de Uniqlo, Kitamura venía acompañado de
una radiante y bella modelo joven que caminaba hacia ellos. Todos en el restaurante la
miraban llenos de admiración.
"¡Siento la demora!"
Un paso detrás de Kitamura, Ami se expresó con una sonrisa angelical haciéndole una
seña a Ryuuji, quien le respondió agitando la mano por instinto.
"...Ohh, estas muy animado... como un perro moviendo su cola..."
Las frías palabras de Taiga hicieron que se sintiera extrañamente avergonzado de cómo
se veía, y bajó su mano.
Como era de suponer, aunque sin decir nada como 'Kawashima-san siéntate aquí, y
Kitamura acá', se sentaron los hombres por un lado y las mujeres por el otro.
Sentado junto a Ryuuji, Kitamura le preguntó a Ami abriendo su menú.
"Ami, ¿aun tienes algo de tiempo, verdad? ¿Quieres algo?"
"No gracias, ya estoy satisfecha, pero... ¿Qué hay de ustedes dos?"
De repente los incluyó en la conversación, los hombros de Ryuuji saltaron como si se
electrocutara. Taiga mantuvo la cabeza hacia abajo, mirando sus rodillas, petrificada y
al parecer, incapaz de ver donde estaba Kitamura.
"Eh, bien, nosotros... ¿Qué te parece, Taiga? ¿Quieres algo?"
Taiga negó con su cabeza, y la conversación murió. Hmm, ¿Qué seria bueno hablar
ahora?
Ryuuji esperó expectante viendo a Kitamura, el único que conocía a todos los presentes,
para que empezara a hablar y se reanudase el dialogo. Siendo realista, esta seria
probablemente la primera y única vez que estuviese junto a una modelo en toda su vida.

Así que para que recordase el momento con afecto, esperaba esperanzado que Kitamura
dirigiera las cosas en una dirección divertida.
Pero en ese momento:
"Aah, estoy tan agotado después de estar con mi familia. Lo siento, pero voy al baño un
rato"
Completamente ajeno a la situación, el siempre relajado Kitamura terminó parándose de
su asiento.
"Eh, espe..."
Ryuuji apresuradamente levantó su mano, pero no podía decir algo como, 'por favor, no
nos dejes aquí'.
Miró a Taiga, quien seguía inmóvil con su cabeza gacha. Y luego miró a Ami, quien
sonreía, y ladeaba la cabeza mientras veía a Ryuuji con curiosidad, como si estuviese
fascinada por su extraño comportamiento.
Es imposible, no importa que hiciera, no podía arreglar esta situación por si mismo.
Actuando despreocupadamente se rasco la cabeza y dijo:
"Ah, saben, tengo que ir al baño también....umm, voy y vuelvo"
Se levantó y siguió a Kitamura en plan de 'acompañar'.
Por supuesto, él se preguntó si estaría bien dejar a la Tigre de bolsillo y a esa chica en
ese tipo de atmósfera, pero...sucumbió cobardemente a su nerviosismo. Él era muy
malo hablando, incluso bajo circunstancias normales, y ahora sus acompañantes eran
chicas, incluida una increíble y hermosa modelo. Taiga no era fiable en este tipo de
situaciones, así que si Kitamura lo dejaba solo con ellas, Ryuuji no tendría nada de
confianza en si mismo.
Simplemente no era capaz de mirar para atrás al asiento que él dejaba, Ryuuji siguió a
Kitamura quien se dirigía en la dirección a los baños. No podía sentirse mas
avergonzado, pero no podía hacer nada. Por ultimo, le permitía liberarse un poco.
Sin embargo, Kitamura de repente se giró antes de llegar a la puerta.
"...Bien. Nos quedaremos aquí"
"¿Qué?"
"En esta situación, sabia que dejarías tu puesto conmigo"
Reajustándose sus anteojos de color plata, murmuró eso y movió a Ryuuji, cuyos ojos
estaban brillando desconcertados, para esconderse detrás de la maquina expendedora de
cigarros.

"Hay algo que te quiero preguntar y quiero que respondas con sinceridad"
Sus ojos en forma de damasco apuntaron hacia delante. A continuación, un momento
después, dijo muy claramente:
"¿Qué piensas de Ami?"
"... ¿Qué paso con ir al baño?"
"No necesitaba ir"
Poniendo una cara seria, parecía que Kitamura había camino hasta aquí solo para hablar
con Ryuuji. Aunque Ryuuji no entendía porque le preguntaba eso, se sentía con la
obligación de responder. No había una razón para no responder de todos modos.
"...Bueno, yo en realidad...tú apareciste de repente con una linda chica. Estoy muy
nervioso, no puedo pensar"
"Bueno, ella es linda. Es algo que noto también"
"Mmm, no solo es linda. Es una chica maravillosa. Como decirlo, es pura, demasiado
pura, eso es algo en verdad preocupante..."
"...Hmm..."
Arrugando su frente y sacándose los anteojos, Kitamura frotó sus ojos como si estuviera
exhausto de explicar y perder el tiempo hablando, llevó a Ryuuji a otra parte.
"Ven conmigo un momento, ¿esta bien? Solo un momento..."
"Oye, ¿Dónde me llevas? ¿Al baño? ¿No volverás a tu asiento, cierto?"
"No te preocupes tanto....como sea, agáchate un poco"
Yendo en la dirección opuesta al baño, comenzó a avanzar hacia donde estaban sentados
los clientes. Luego de esconderse detrás de una planta decorativa, paso por detrás de la
división de fumadores y no fumadores. Ryuuji siguiendo su ejemplo, hizo el camino a
su manera y terminaron justo detrás de lo asientos donde estaban Taiga y Ami sentadas.
Las dos chicas eran claramente visibles, pero no los podían ver al estar en su punto
ciego.
"...Espera, ¿qué crees que estas haciendo, pervertido?"
"Está bien. Tranquilo y observa"
Kitamura apuntó con el dedo donde Ami relajadamente cruzaba las piernas y sus brazos
los tiraba por atrás del sofá.
"Haa, que cansancio. Hey, hey, Ami-chan esta muy sedienta~. Tráeme un te helado,
¿ya?"

Meneando su hermoso cabello y luego descansando exhausta su cabeza sobre su mano,
Ami empujó bruscamente la copa en frente de ella hacia Taiga.
"..."
Sin alterar su expresión, Taiga le lanzo una mirada a Ami antes de volver su vista hacia
sus rodillas. La que ahora chasqueaba la lengua no era Taiga, sino Ami.
"¿Hmm? Que inútil, o quizás debería decir deprimente, chica... estas teniendo una mala
actitud. Bueno, lo que sea. Cuando Yuusaku vuelva, le diré que traiga algo para mí. O
talvez, se lo pediré a ese chico de raro aspecto. Estaba tan nervioso, parece que hará
cualquier cosa que le diga Ami"
Hablaba con una voz melosa y dulce, sus labios de color fresa se torcieron ligeramente.
Aun así, su apariencia pura no parecía desaparecer. Luego sin siquiera estar frente a
Taiga, quien estaba silenciosa como una muñeca, ella le preguntó con imprudencia:
"Hey, hey. ¿Acaso él es tu novio?"
"..."
"¿Te importa si Ami-chan lo toma? Aunque no lo necesito en absoluto"
"..."
"Tiene el aspecto de un delincuente de hoy en día. Si te ven muy seguido con ese tipo
de perdedores~ nadie te respetara"
"..."
Sin pronunciar palabra, Taiga dirigió una mirada vacía a Ami.
"Hmm, ya veo. Es lo mejor que puedes conseguir en un lugar tan malo como este. Ah,
eso es lo peor"
Hablando de manera monótona, parecía que Ami no esperaba que Taiga le respondiese
o algo más. Tomó su bolso de marca que tenia cerca y sacó el espejo de mano,
comenzando a mirar su bonita cara, al mismo tiempo que decía - 'Ami-chan es tan
linda' – y luego se dio una sonrisa de satisfacción.
"Aah, enserio quiero divertirme ya.... ¿que hacen ustedes dos normalmente para
divertirse? ¿Andar por los alrededores?"
"...Él no es mi novio"
Cualquier persona que conociese a Taiga temblaría ante ella, estando tan cerca de sus
susurros.

"Ah, ya veo ~. Hmm, como sea, no me importa realmente~. Aunque, es raro~, sobre ese
delincuente... ¿me estas diciendo que no tienen nada? ¿O me intentas decir que Amichan podría intentar tener algo con alguien así?"
Ami se reía de manera burlona mientras de veía en el espejo. Luego, de repente dejando
de mirar el espejo, le dirigió una ruda mirada a Taiga.
"Hey, hey, ¿Cuánto mides? Me acabo de dar cuenta, tus proporciones son
graciosísimas"
"..."
Al mismo tiempo que decía eso, analizó a Taiga de pies a cabeza y puso cara de
sorprendida.
"Que divertido~, así que hay tiendas que venden ropa tan pequeña. Entonces, cuando
compras jeans como estos, ¿tienes que cortarlos abajo un poco? Ami-chan nunca ha
tenido que cortarlos, así que no sé como lo haces"
"Esta es su verdadera personalidad"
"¿Verdadera personalidad?"
"Sí. Esta es la personalidad alternativa de Ami desde que fue al jardín infantil.
Dependiente, egoísta, y opresiva, el estereotipo de princesa mimada"
Temblando mientras veía la cara de su mejor amigo, Ryuuji estaba apunto de aplastar la
planta decorativa que tenia agarrada.
"Su personalidad es demasiado horrible... ¿Qué pasa con la 'Ami-chan'? ¡Da miedo! Es
como si estuviese poseída por un demonio"
"... ¿Cierto?"
En toda su vida, nunca había visto a una chica diciendo esas cosas... en realidad, había
algunas que podrían en su propia clase, pero por ultimo para Ryuuji, que básicamente
nunca se había acercado a una chica, era la primera vez que era testigo de esto. La
Taiga, con quien pasó su vida cotidiana, sin duda tenía una mala personalidad, pero
tenia la sensación de que Ami era mala de una forma diferente. Conociendo la situación,
aun sentía algo de simpatía por ella, pero parecía que el razonamiento de Taiga era
mejor.
"Basándose solo en las apariencias, Ami estaría bien, pero...el defecto esta en su
personalidad. Siempre que encuentra gente estar mal según su punto de vista, su otra
personalidad termina manifestándose. Estas mujeres, son por lo general así"
"¿...Todo esto es porqué debe crear una personalidad para ser modelo?"
"Creo que se puso así cuando comenzó a modelar. Si me preguntas, ella es una persona
que esta dividida en dos partes"

"Bueno eso es...eh"
Inclinando ligeramente su cabeza antes las palabras de su mejor amigo, Ryuuji meditó
un momento.
¿Qué harás, tigre de bolsillo?
"Esa Taiga, no es de las de quedarse sentada sin hacer nada"
Más bien, apúrate y dile que no soy un delincuente, pensó Ryuuji mordiéndose el labio
mientras sus ojos reflejaban una mirada asesina, miró hacia donde estaban las dos
chicas. Taiga se mantuvo en silencio con una estoica expresión.
¿Podría ser que ella se controle, solo por ser la amiga de la infancia de Kitamura?
Ella es totalmente vulnerable al tratarse de Kitamura. Eso es lo que pasa y Kitamura
debe estar pensando en cualquier otra razón de su silencio.
Luego ante la mirada de Ryuuji, la situación se prendió de repente. Esto fue, lo que se
conoce como una 'cachetada en la cara'.
"..."
Al parecer Ami, quien mantenía una expresión calmada pero con los ojos abiertos, no
podía ni hablar.
"Un mosquito. Tenias un mosquito"
Cerca de ella, el tigre quien había de repente mostrado sus colmillos llevaba una sonrisa
desapercibida.
"Que suerte, tu mejilla casi fue mordida por ese mosquito. Huh, era una mosta"
"¿Ehh?"
Abruptamente extendiendo su pequeña mano abierta, tenía un cadáver de una mosca. Al
verla, el rostro de Ami se puso rojo.
"¿¡Qué demonios estas haciendo!?"
Dijo ella indignada. Sin embargo, Taiga se mofó de su reacción exasperadamente.
"Lo hice como favor hacia ti. Deberías estar agradecida"
"¿¡Un favor!?"
La voz de Ami estaba a niveles supersónicos. Había llamado la atención de todos los
clientes.

"¿¡Eso no es verdad, cierto!? ¿¡Hay algo mal en ti!? ¡Increíble, eres de lo peor~! ¡por
algo no quería venir acá!"
"...Eres demasiado ruidosa"
"Cállate, maldita mocosa"
Tiró esas duras palabras como el filo de una espada, y así le puso fin al puntaje de Ami.
Fue el fin del partido y su otra personalidad.
"...U,...Uw,...Uw..."
Los delgados hombros de Ami temblaban con cada respiración. De repente frunció el
ceño alarmada - 'Ah, esto no es bueno' – Murmuró Kitamura y se puso de pie, seguido
por Ryuuji, volviendo rápidamente a sus asientos en medio de tan incomoda situación.
Entonces, en el momento que los dos chicos llegaron:
"Yu"
Como una chica de manga, Ami se giró como una flor en plena floración, o eso fue lo
que Ryuuji sintió. Y Ami dramáticamente gritó:
"¡Yuusakuuu~! ¡Fwaaaah!"
Ella salto al pecho de Kitamura mientras lloraba.
Sollozando y con sus hombros temblando, ella se buscaba consuelo como una niña
pequeña y le murmuró – 'me quiero ir a casa' – mirando a Kitamura con los ojos llenos
de lágrima.
"Aaaah... ¿Por qué no solo se pueden llevar bien? En serio...son tan ruidosas y
molestas, Aisaka. Incluso tú, Takasu. Voy a dejar a Ami a su casa"
Con la cabeza baja, sus cejas caídas, y una mirada arrepentida, Ami recogió su bolso del
asiento. Luego, ignorando las miradas de los otros clientes, Kitamura la arrastro a la
salida.
Después de eso, quedaron solos.
"¿...Ta,...Taiga...?"
"..."
"¡...Hey, no decaigas!"
Taiga tenia escrito en toda su cara las palabras 'gane la batalla, pero perdí la guerra'

Sus labios expresaban su disgusto y sus ojos permanecían vacíos, Taiga parecía una
estatua de Buda...completamente silenciosa. Había llegado al punto donde las palabras
de consuelo serian inútiles.
"Bueno, um...estoy aquí. Anímate"
"..."
"Para ponerlo simple, Kitamura y yo estábamos mirando todo lo que paso. Kitamura
definitivamente no cree que tú seas violenta o algo por el estilo"
"...Pues bien, después de ver todo eso, Kitamura-kun aun así protegió a esa chica y la
llevó a casa"
"...Él probablemente no la estaba protegiendo"
"...Él la protegió y consoló"
"...No la estaba consolando, creo que... ¡OH!"
Una camarera había gritado al mismo tiempo que algo se quebraba. Un plato se había
caído al piso y roto en numerosos trozos, los mocos del lugar pensando que algo bueno
había pasado, aclamaron felices, de repente uno de ellos se puso a llorar –'¡Gwaah!' –
Seguido por un grito – '¡Kyaah!' – Y un – '¡Uwaah!' – mientras la leche hervida se
derramaba y comenzaba a caerles gota a los clientes y luego – '¡Manager, el baño esta
lleno!... ¡Uwaaah~!' – la voz del empleado quien no quería ver que estaba pasando,
resonó y desapareció.
"... ¡No me gusta esa mujer!"
Desde lo profundo de Taiga, soltó una intensa intención asesina enviando relámpagos
azules para todos lados. Ryuuji no podía hacer nada en esta situación. Taiga se mordía
tan fuerte los labios que estos habían perdido su color, y sus puños fuertemente
apretados estaban temblando.
"¡Uwa! ¡No llores!"
"...~"
Si al menos Kitamura estuviera aquí, habría sido la oportunidad para otro desenlace.
Los ojos de Taiga se estaban llenando de lágrimas.
"¡Hay gente mirando, trata de aguantarlo!"
"Uuh..."
Gimiendo amargamente, Taiga se frotó los ojos contra sus mangas. Terminando siendo
algo molesto. Entonces Ryuuji, quien solo quería cubrirse su cabeza, escuchó algo
maravilloso.

"¿Eh? ¿Qué paso?"
"...Minorin..."
De la nada, apareció Minori aún vestida con su uniforme. Sus ojos se ampliaron de la
sorpresa.
"Taiga, no te ves bien. ¿Paso algo?"
"...No es nada...voy a lavarme las manos. Toque algo sucio"
"Oh, es una mosca muerta"
Ella se apartó del camino de Taiga, quien estaba parada mostrando su palma. Así,
Minori la vio caminando al baño un rato antes de girarse lentamente hacia Ryuuji.
"... ¿Qué le paso? ¿Ocurrió algo mientras yo no estaba?"
"...No en verdad...bueno, hubieron algunos problemas"
Su discurso fue vacilante, no solo era debido a su nerviosismo, también intentaba
averiguar como podría explicar lo que paso. ¿Por qué vino justo ahora? Con una
mirada de preocupación Minori habló:
"No se lo que paso, pero estaba molesta, no era la dócil Taiga de siempre"
"¿¡Eh...Dócil!?"
Ese día y en ese momento, Ryuuji quedó atónito ante la declaración.

A pesar de todo lo que paso, acabaron las compras y regresaron a la residencia Takasu,
donde Ryuuji comenzó a lavar el arroz y Taiga volvió a ser la de siempre.
"...Probablemente no la vuelva a ver. Porque no parecía que Kitamura-kun saliese con
ella. Y de todos modos, involucrarse con ella seria indigno"
"¿Es suficiente con dos litros? ¿o debo seguir y echarle dos litros y medio?"
"Dos y medio"
Su cara mostraba señales de descontento, pero Taiga habló mientras jugaba con el
frasco de azúcar en la esquina de la cocina.
"...Cuando me convierta en una adulta, seré capaz de manejar esta ira mas fácilmente"
"¿Eso viene de alguien quien llegó tan lejos como abofetear a otra persona en la
cara?...Hey, no juegues con el azúcar"
"..."
"¡No lamas la cuchara del azúcar!