Jughead mantenía su mirada fija en aquella rubia guardando los cuadernos en su taquilla mientras hablaba con su amiga pelirroja.
La falda negra y el top blanco la hacían ver extremadamente sexy.
Desde que entro en el instituto hace tres años, siente una enorme atracción hacia esa rubia de ojos verdes como la esmeralda. Soñaba con tenerla solo para él. Poder besarla cuando él quisiera y decirle todos los días lo mucho que la quería. Pero todo habían sido eso, sueños, que dudaba que pudieran hacerse realidad.
Su amigo Archie lo sacó de su trance con un movimiento de manos.—Tierra llamando a Jughead ¿estas ahí o en onda Betty?—Pregunta con un tono de diversión en su voz.
El chico evadió su pregunta y apartó la vista de la chica, quien se encontraba hablando animadamente con su amiga Cheryl.
—¿Qué tal tu día hoy?—Hoy Archie le pediría salir a Verónica, la mejor amiga de Betty.
—Todavía no se lo he pedido y como sé que me va a costar hacerlo...he tenido una idea.—Exclamó contento.
—¿Y qué maravillosa idea es esa?—Dijo curioso.
—Tendremos una cita doble.—El pelirrojo siguió su camino, pero Jughead se detuvo.
—Eh, quieto vaquero ¿como que tendremos?—Remarcó el "tendremos" y su mirada se volvió demandante.
—Pues que Verónica, su amiga, tu y yo iremos a una cita juntos.—Los ojos del ojiazul se abrieron y mostró desaprobación en sus ojos.
—No pienso ir a una cita con una chica con la que apenas he hablado, quien ni si quiera sé quien es.—Se excusó.—Además, tu bien sabes que me gusta alguien.
Archie rió.—Sabes quien es, es más, la conoces muy bien.—Aseguró el chico mientras chocaba su hombro con el de su amigo.—Y por lo de que te gusta Betty, no importa, lo tengo todo controlado.
—¿Tienes controlados mis sentimientos?—Preguntó Jughead sarcástico.
—Tu déjame a mi. A las nueve estáte listo, hemos quedado con ellas en el restaurante.—Dicho eso, el pelirrojo salió casi corriendo del lugar, sin dejar protestar a Jughead.
—BUGHEAD—
Archie llama a la puerta de la casa y su amigo lo recibe con un libro en la mano.
—¿Qué haces así?—Preguntó molesto Archie, quien llevaba una linda camisa y apestaba a colonia.
—Te dije que no iba a ir.—Jughead hizo un intento por cerrar la puerta, pero su amigo fue más rápido y lo paró.
—Jughead, no me puedes hacer esto. Por fin tengo una cita con la chica que me gusta y no la voy a desperdiciar por tu culpa.—El pelinegro resopló ante las súplicas de su amigo.
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One shots
Teen FictionHistorias en las que no prometo un final feliz, la mayoría lo tendrán. Estas pequeñas historias solo tiene de protagonistas a la pareja Cole y Lili o Betty y Jughead. 𝗡𝗼 𝘀𝗲 𝗽𝗲𝗿𝗺𝗶𝘁𝗲 𝗹𝗮 𝗰𝗼𝗽𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗲𝘀𝘁𝗮 𝗵𝗶𝘀𝘁𝗼𝗿𝗶𝗮. 𝗦𝗶 𝗾𝘂...