Torture sounds incredible (Hopega)

Capítulo 12

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Hoseok se regaño a si mismo cuando abrió los ojos, aún de noche, aún cansado y frustrado por todas las excursiones del día. El otro hombre estaba, como en todas las últimas noches, totalmente pegado a él. Pecho contra espalda. Él había decidido que esa posición le gustaba más porque no tenía sus soniditos en la oreja, aún podía escucharlos a la perfección, pero por lo menos así no podría darse el lujo de mirarlo a la cara para encontrarlo moviendo su lenguita. YoonGi tampoco se quejo con el cambió de posición, para su sorpresa se tomó relativamente bien el despertar todos los días con una erección clavada en su culo. Alegaba que así estaba abrigado y cómodo, que ese pequeño detalle no perturbaba su tranquilidad.

Él odiaba las noches en las que YoonGi estaba especialmente movedizo, justo como esa. Se sacudía como si tuviese calor, pero si intentaba alejarse para darle su espacio él corría a pegar su espalda a su pecho nuevamente. Esa noche estaba terriblemente fatigado, incluso algo molesto por la broma pesada del staff. Apretó sus brazos alrededor del chico pero no consiguió que dejara de menearse, los gemidos lo estaban volviendo loco. Movía su cadera por sobre la suya generando una fricción que lo estaba haciendo perder los estribos y por primera vez desde que tuvieron esa conversación realmente se planteo hacerlo, tenía ganas de tocarse y, por extraño que fuese para él mismo, también quería tocarlo.

Quería acariciar la piel de su vientre que había quedado al descubierto por tanto ajetreo. Quería rodearle el cuello con una mano y masajearlo con su pulgar, sentir su pulso debajo. Se preguntaba si los sonidos cambiarían si su mano ejercía suficiente fuerza. Sintió un tirón en su pene cuando la imagen se planteo en su cabeza. 

YoonGi se acomodo un poco más cerca, como si fuese posible, moviendole su cadera encima. La tomó fuertemente con una mano para dejarla quita y contrarió a la que sabía que debía hacer, él mismo comenzó a frotarse. Lento y experimental. Quería que la sensación, la situación en si, le disgustara. Quería sentirse sucio, y si que lo así pero no en la forma en la que él deseaba. No quería que la morbosa idea lo encendiera aún más, quería sentirse mal consigo mismo, sucio en el mal sentido, pero no lo conseguía. Tenía consentimiento para tocarse a si mismo y para tocarlo a él, y con eso en mente simplemente no podía parar.

Comenzó a frotarse con más intensidad, su mano acariciándole el vientre y sus labios pegándose a su nuca. Podía escuchar a la perfección sus gemidos y eso solo lo excitaba más. Procuro ser cuidadoso cuando bajo su propio pantalón y bóxer, y especialmente cauteloso cuando hizo lo mismo con el de YoonGi. No sabía si desnudarlo entraba en el consentimiento que tenía, pero todo pensamiento coherente o de culpa se perdía cuando más gemidos aparecían. Metió su pene en la línea de unión entre su culo y se frotó con fuerza, casi desesperado por correrse después de tantos días ansiandolo. 

La mano que mantenía en su vientre subió hasta tomar uno de sus pezones suavemente y rasguñar la punta con su uñas. Escucho su lengua hacer un sonido húmedo y su cabeza se lleno de ideas de lo que podía hacer con esa boca tan mojada. Volvió a subir su mano hasta llegar a su cuello y apretó levemente, sintió una corriente de placer recorrerlo cuando sus soniditos salieron distorsionados, casi como jadeos desesperados. Dio una fuerte embestida que fue recibida con un gemido más fuerte que el resto y YoonGi removiéndose.- ¿Hobi?

Dejó de moverse totalmente ante la pregunta adormilada, parecía estar más dormido que despierto, pero sabía que había perturbado su sueños siendo tan brusco.- Vuelve a dormir, Yoon.- Susurro en su oreja, bajo la mano que tenía atenazada en su cuello a su vientre otra vez, lo acarició lentamente, con amabilidad. Disculpándose por haberlo despertado.

No tardó mucho en volver a caer dormido con las suaves caricias. Hoseok rogaba porque sus ganas se hubiesen extinguido con el retorno a la consciencia de YoonGi, pero de lo contrario, su pene palpitaba con más ganas que nunca por la adrenalina. Volvió a frotarse, esta vez sin ser tan brusco, pero lo suficientemente bueno para que se sintiera al limite. No pudo frenarse a tiempo y acabo corriéndose en su espalda baja, culo y muslos. La imagen era morbosa, estaba manchado con su espeso líquido y no tenía idea, no era consciente de nada de eso. Siquiera había podido negarse a que se corriera sobre él, y ese pensamiento en vez de disgustarle y hacerle sentir culpable le excitaba. Se sintió jodido, enfermo.

Se movió lentamente, poniendo su propia almohada a espaldas de YoonGi para que no notará su momentánea ausencia. Primero se dirigió a la cocina, toma una botella de whisky y le dio varios tragos, pero la imagen perduraba en su mente sin importar con cuanto alcohol quisiera ahogarla. Su siguiente parada fue la habitación de los menores. Entro lentamente, no queriendo despertar a los 3 chicos que dormitaban pegados y uno sobre el otro sobre 2 camas pegadas. Se acerco a la bolsa de cosméticos de Jimin y se sobresalto al oír una voz.- ¿Hobi hyung?

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