Diablo [ minjoong ]

|PARADISE |

Mingi caminaba pacíficamente por las calles, debía hacer algo malo. Miro un festival que había un carro alegórico enorme, lo miro unos instantes y sonrió.

Al carro se le fundiría el motor en un periodo no menor de tiempo, poco a poco se iba acercando a la casa su cuerpo pesaba y se sentía extraño. Acelero el paso hasta entrar y ver a Hongjoong en el sofá

- M-mingi - se levantó bastante nervioso

- ¿ Qué te pasa? te traje un gato por si te sientes mal, escuche que hace bien a la salud - dejo al gato en el suelo. Se detuvo en seco por la presencia que sentía

- G-gracias - apretó sus puños y sus labios - C-creí que no V-vendrías

- Pero lo hice ¿ estuviste rezando? - el menor negó - Dime la verdad

- Y-yo...

- Hongjoong - una tercera voz, el aludido cerro los ojos

- ¡Tu! - habló Mingi

el menor solo vio al pelinegro pasar a paso rápido hacia el pasillo. Vio volar al de piel blanca que se levanto enseguida y se lanzó sobre él pelinegro. Se asustó tanto que retrocedió buscando la puerta que ambos mayores estaban obstruyendo.

La mano de Seoho estaba sobre el rostro de Mingi que sujetaba del cuello al Dios.

- P-paren - habló con un hilo de voz

- Maldito seas Mingi

- Maldito tú, devuélveme mi libertad - su agarre se hizo mas fuerte

¿Crees que podrás matarme? - rió con dificultad

- No, pero tú a mi tampoco

- Basta - otra vez dijo muy suave

- Ere sólo un demonio estúpido

- Este estúpido casi te supera, pero me desterraste. Tenias tanto miedo que hiciste que me dejaran aquí

- Solo mírate, no eres un Dios no eres nadie

El pelinegro soltó su agarre del cuello de este y en un movimiento rápido lo lanzo al suelo para dar golpes en su perfecto rostro. Hongjoong seguía estático, su voz no salia. No había razón de pelear, no se podían matar pero si hacer sufrir. Ese era el precio de ser inmortal

- ¡ Ya basta! - grito con fuerza y se desplomo en el sofá temblando

- Hongjoong - ambos hablaron y se dirigieron hacia Hongjoong

- Aléjense de mi - dio manotazos

- Yo llegue primero - reclamo el demonio

- Pero yo soy bueno - contraataco el ángel

- Cállense, no los quiero escuchar - tapo sus oídos - Llévate a tus animales, no los quiero

- Pero Hongjoong

- No, Mingi vete. No te quiero ver... Quiero descansar - bajo la cabeza

- ¿ puede quedarme? - hablo Seoho

S-si - titubeo

¿Que? Hongjoong somos - por alguna razón se sintió mal

- No, no somos nada vete. Por tu culpa estoy así

se levanto y abrió la puerta molesto, miro al mayor e hizo la seña con su mentón. Mingi asiento y salio con el felino y el cachorro entre sus brazos. Cerro la puerta de un portazo y corrió a su habitación a encerrarse. Se tiro a la cama llorando

- ¿ Por que lloras? - el Dios estaba sentado en la cama

- Sal de aquí, no quiero ver a nadie