Capitulo 2

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Giyuu esta sorprendido, dos Alfas se le habían declarado ahí mismo. Y ahora se miraban de manera desafiante, casi estaban gruñendo. Realmente no sabia que hacer, como debería reaccionar ante dos Alfas que estaban a punto de pelear.

--Claro que no me convertire en tu cuarta esposa Uzui-- respondió Tomioka mientras empujaba al Alfa albino para así soltarse de su agarre.

--Lo siento por ti Uzui, Tomioka ya me eligió como su Alfa-- mostraba una sonrisa triunfadora Rengoku.

--Eso no es cierto, el todavía no ha dicho que te eligió a ti, dime preciosura ¿A quién eliges como tu Alfa?-- dijo mientras apuntaba a al azabache.

--A ninguno de los dos--

Los dos Pilares quedaron boquiabiertos por lo que dijo el Omega. Ellos pensaron que al menos Giyuu se tomaría un tiempo para decir con cual de los dos se quedaría, pero no los rechazo sin más.

--Oh vamos Tomioka no lo pensaras ni un poco. Yo soy tu mejor opción preciosura-- una sonrisa coqueta apareció en la cara del albino.

--No es cierto. Además tu ya tienes 3 esposas Uzui. Así que deja que Tomioka sea mio, no quiero pelear con un gran amigo como tu-- una vena resaltaba la frente de Rengoku.

--Eso no tiene nada que ver. Mis esposas son Betas, mientras que Giyuu es un hermoso Omega-- también una vena de enojo empezaba aparecer en el rostro de Uzui.

--¿Quien te dio permiso para llamarlo por su nombre?--

Mientras que los dos Alfas seguían en su pelea, Giyuu aprovecho para salir corriendo de ese lugar

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Mientras que los dos Alfas seguían en su pelea, Giyuu aprovecho para salir corriendo de ese lugar. Las feromonas que lanzaban esos dos lo estaban mareando, por esa razón no quería revelar que era un Omega.

Cuando por fin salio de la Sede de los Cazadores de Demonios, decidió que era mejor irse rápidamente a su Finca antes de que esos dos se dieran cuenta que había escapado.   

--Así que eres un Omega, lo tenías muy bien escondido idiota--

Giyuu al escuchar esa voz, un escalofrío recorrió todo su cuerpo.

--Shinazugawa ¿Necesitas algo?--

--No lo se, tal vez si-- dijo mientras se acercaba a Giyuu --Sabes hueles muy bien imbécil-- se acerco a su cuello para oler el exquisito olor del azabache.     

--Gracias, pero tengo que irme-- trato de alejarse del albino, pero el tomo su muñeca izquierda --Shinazugawa ¿Me puedes soltar por favor?--.

--Tomioka yo...-- fue interrumpido por alguien más.

--Shinazugawa, el te dijo que lo soltaras- dijo un azabache de puntas color verde menta.

--A ti que importa mocoso. Esto es entre Tomioka y yo-- 

Sanemi se sorprendió de como Tokitou abrazaba y hundía su cabeza en el pecho del Omega. Giyuu por una extraña razón no pudo alejarlo de el, así que el también lo abrazo.

Lucharé Por TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora