5.Los zapatos

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CAPÍTULO 5

LHIAM DANKWORTH

-Te dijo que no porque eres feo- soltó mi hermana sacando la lengua.

No me esperaba que Zoé dijera que no, pero eso me termina de convencer que es distinta.

-Dices que soy feo porque estás celosa- Rachelle solo volteó los ojos, es adorable y demasiado inteligente para tener ocho años.

Abrí la puerta de lo que ahora es mi hogar, al entrar nos encontramos sentada en un sofá a Meylim, la niñera de mi hermana . -Los estaba esperando, la comida ya está servida.- sonrió, ella es muy especial para mí, está con nosotros desde hace cinco años.

-Gracias- dije devolviendo la sonrisa. -Rachelle es muy buena mintiendo.- volteé para verla, se encuentra junto a mi.

-Yo no te di permiso para hablar con niñas- cruzó los brazos- Ya tuvimos esa charla jovencito.- se dió la vuelta para dirigirse al comedor.

-¿Qué hizo ahora?- cuestionó Meylim.

-La deje regando las plantas sola para ir a charlar con una chica, ella llegó y me jalo diciendo que tenía que irme para darle de comer.- Eso realmente me había causado gracia.

-¿Es la chica torpe?- solté unas cuantas carcajadas. No esperaba que la recordara de esa manera.

-Si, ella- comencé a caminar al comedor, Meylim me siguió, nos sentamos para comenzar a comer, le he contado a Meylim de Zoé desde la primera vez que la vi.

Yo me encontraba con unos compañeros de clase, ellos estaban hablando cuando ella se formó en una fila para comprar. Llamo mi atención al ver que llevaba dos zapatos diferentes; vestía unos jeans azules, una blusa de mangas largas blanca que le llegaba un poco arriba del ombligo y sus coloridos zapatos, uno era amarillo y el otro del color de sus jeans.

Sonreí y deje de verla, comencé a pensar en la chica, era muy valiente para hacer tal cosa. Ella pasó cerca de nuestra mesa y algunos la saludaron, me atreví a preguntar por ella a Mateo quien la saludo primero.

-¿Quién es la chica?- murmuré.

-Ella es Zoé, hermana del capitán de soccer- se volteó para verme. -¿Te gusta?- cuestionó con una sonrisa.

-Tiene zapatos diferentes- dije con diversión, tome mi hamburguesa para seguir comiendo.

-Es muy segura al hacer las cosas, ya estoy acostumbrado a verla así.- habló entre risitas-Es algo rara.- con eso, el tema de la chica termino.

Meylim me lanzó un papa sacándome de mis pensamientos-Ey, come- está sonriente- Deja de pensar en ella- hizo un guiño.

Al terminar de comer subí a mi habitación, me tiré a la cama, caí encima de un cuaderno, metí mi mano debajo de mi espalda y saque el cuaderno de Zoé, es amarillo y en la pasta tiene su nombre ~Naylea~. Jey mencionó que el cuaderno es de su mejor amiga, supe que hablaba de Zoé porque siempre están juntas. Luego de verla por primera vez la seguí observando, siempre lleva una pulsera amarilla con un pequeño dije de su inicial, la mayoría de veces esta despeinada y es muy sonriente. Su cabello largo es precioso, sus ojos son avellanados, lo noté el día que torpemente tropezó, me di cuenta de las pecas que posee, la chica es realmente bonita.

Me tomé el atrevimiento de ver el contenido del cuaderno, primero pensé que se trataba de un cuaderno para alguna clase, luego noté que escribía en el. Eso llamo mi atención, no conocía a ninguna chica que escribiera ese tipo de cosas.

"Ella es la niña a la que nadie nota, puede pasar horas en un lugar pero nadie nota su presencia.
Ella es la niña que corre repartiendo amor, quien reparte esperanza y apoyo, pero al momento de ella estar mal nadie se percata, nadie la ayuda, nadie la salva. Ella es la niña del alma rota, de los ojos bonitos y la mirada vacía."

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⏰ Última actualización: Jul 08, 2020 ⏰

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