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Intenté convencer a mis hermanas que no me gustaba Hugo pero como todo el mundo sabe, yo dissimulo que digamos... FATAL.
Después de que se enteraran empezaron a reír entre ellas y a decirse secretitos en la oreja que parecían muy divertidos... Me enfadé como una mona y les amenacé con que si le decían a alguien les esperaría una buena. El castigo más fuerte de su vida. Quedaron bastante aterrorizadas. Hasta me dieron un poco de pena, ya que en verdad ellas no tenían la culpa. Soy yo la que dissimulo tan mal. Aunque eso de cotillear en mis redes sociales no me acaba de gustar. Al fin i al cabo quedé satisfecha. Al menos estoy segura de que mis hermanitas no van a decir ni mu.
- Muy bién después de mí ostoca a vosotras, ¿no es así?
- Sí. Ahora le toca a Emily! - Se apresuró Ania.
- ¿A mí? ¿Quién puso las normas?
- No lo sé, pero te toca a tí y no rechistes que a mí tampoco me gustó ser la primera!- Me desahogué yo.
Emily resopló.
- Prueba.
Se fue lejos y empezamos a planear.
- Ha de ser algo muy ridículo. Debe pagármelas al igual que vosotras dos cuando os toque.
Las dos se miraron al unísono con caras asustadas. Yo reí por dentro. Me sentía como una malvada en serie.
- He pensado en algo relacionado con Micke, ese chico que está ahí sentado. Es de la misma edad de Emily...
Todas sonreímos pícaramente.
- Podemos hacer que lo bese.
- ¿No sería demasiado?- Dijo la tímida de Ania,
- ¿Demasiado? ¡Demasiado es lo que me habeis hecho a mí!
- De acuerdo, ¿entonces lo tiene que besar?
- Sí pero en los labios o en la mejilla? - Dijo Anna.
- ¡Labios! ¡Labios! ¡Labios!
- Te estás pasando Bibiana... Yo boto mejilla.
- Yo también.
- De acueeerdo... En la mejiiillaaa... Sois demasiado buenorras. Yo a tu edad, Anna, (11) era la más pilla de todas.
Todas reímos y dejamos pasar a Emilia para contarle lo acordado.
- Antes de nada, ¿prometes hacer lo que te digamos?
- Depende de qué me pongáis. Tu antes mentiste y dijiste que no te gustaba...
- Yaya pero al final lográsteis saberlo...
- Eso no es justo!
- Ya no os discutáis! O nunca acabaréis!- Ania nunca quiere conflictos y siempre nos deja con la palabra en la boca en una discusión.
- De acuerdo. - Obedecimos
- La prueba...- prosiguió al fin Anna-... consiste en que le tienes que dar un beso EN LA MEJILLA a ese niño de ahí...
- Micke- Corrigió Ania
- ¡¿Cómo?! Ni loca me besaría ni a distáncia con ése! Ni lo conozco!
- Esmuy lindo y amable... Y parece muy solo ahí...
- No me váis a convencer, no pienso besarlo!
- Vale pero nos pensamos otra prueba más suavita y no puedes rechistar.
- Ok.
Se fue otra vez y en pocos minutos ya nos habíamos pensado la prueba.
- Debes mantener una conversación de almenos 10 minutos con Micke.
Hubo rechistes y rechistes... Canviamos 10 minutos por 6...Pero al final la convencimos y fue a hacer su prueba.

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