Capítulo XIV

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Este capítulo ya fue publicado pero agregué un detalle ( relacionado con el tiempo transcurrido) para que el siguiente capítulo tenga más sentido
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Esa mañana el despertador sonó, pero a diferencias de otros días en los que no quería ir a trabajar, esta vez estaba entusiasmado. La noche anterior había hablado con Marinette, era la tercera vez en esta semana que iba a visitarla. Adrien no había tenido la oportunidad de verla nuevamente, por lo que Chat decidió ir, aunque para ella no fue una sorpresa, pues le había dicho que volvería cuando nos despedimos esa primera noche, hace cuatro día atrás.... evitamos todo acerca de los akumas, de Hawk Moth, de sentimientos (a petición de ella  aunque deje en claro que lucharía por ella). Simplemente hablamos de temas triviales, literalmente de cualquier cosa. Algunas veces me habla del templo, pero veo la incomodidad al hacerlo así que no sigo insistiendo en que me cuente. Algunas veces comenzamos a hablar de las razones de porque los akumas la atacan, era claro que tenían algo contra ella, en sus dos formas, pero la pregunta era ¿porque?

“imitación” dije para resumir mi teoría

“reciclaje”dijo ella resumiendo la suya

Esa mañana estaba feliz debido a que me iba a encontrar con ella en la empresa, mi padre le iba a dar la bienvenida, por lo que nuevamente la iba a poder ver en mi forma civil. A Chat le explicó bien las inseguridades que tenía hacia Adrien, temía dañarlo nuevamente, exponerlo. Era claro que debía convencerla de lo contrario pero ¿no sería contraproducente intentar hacerlo como Adrien si ya prometí como Chat que no me rendiría? mi plan era acercarme como amigo siendo Adrien...si, eso será lo mejor. 

-Es un gusto volver a trabajar con usted señorita Dupain- habló mi padre una vez en su oficina

-El gusto es mío- dijo Marinette sentándose frente a mi padre, yo me encontraba a un costado junto a Nathalie. Escuche la conversación, los términos del trabajo, veía como Nathalie anotaba todo lo relevante, participaba cuando me preguntaban, pero lo hice fue observar a Marinette, ver sus gestos, quería saber si le incomodaba estar frente a mi padre por todo lo que él le hizo en el pasado. Para mi alivio Marinette no mostraba incomodidad, todo lo contrario, era mi padre quién al parecer se sentía incómodo con la chica frente a él.

Cuando acabó la reunión fue mi turno de llevar a Marinette a donde seria su lugar de trabajo, no era necesario ya que ella había trabajado antes en la empresa, pero pese a el argumento dado por la Marinette, insistí en acompañarla.

-Me alegra que hayas vuelto- dije- extrañe verte por la empresa

-Me alegra regresar también- dijo entrando al taller en donde trabajaría- ¿es más grande?

-Creo que no- hasta donde sabían no habían modificado nada en la empresa, al menos en términos estructurales

-Entonces hay menos cosas

-Eso es posible, este taller no se ha utilizado en algún tiempo

-¿Porque?

-Mi padre ha despedido a varios diseñadores, así que cerró esta parte del edificio y los nuevos trabajan en el taller del primer piso

-¿Y porque yo no trabajaré allí?- dijo mirándome de manera acusadora

-Supongo que mi padre espera que te quedes esta vez- y yo también lo espero

-Mientras el no me despida- dijo alzándose de hombros, no dandole importancia

Cuando termine con mi, innecesario, recorrido por la empresa decidí invitar a Marinette a tomar un café, vi que trató de negarse pero la convencí diciéndole que era una forma de disculparme por la discusión que tuvimos antes de que apareciera el akuma.

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