Iniciación: Parte 2

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"¿Qué es lo que ocurrió?" La pregunta llegó a mis oídos y aunque sé la respuesta que tanto ha estado esperando, mis labios permanece cerrados, incapaces de pronunciar las simples y terribles palabras que responden la pregunta

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"¿Qué es lo que ocurrió?" La pregunta llegó a mis oídos y aunque sé la respuesta que tanto ha estado esperando, mis labios permanece cerrados, incapaces de pronunciar las simples y terribles palabras que responden la pregunta. Mi mirada se mantiene fija en el blanco patrón de la pared cercana a la pesada puerta de metal, mientras ignoro al hombre sentado frente mí, quién me mira desinteresadamente desde su lugar junto a la cama.

Se supone que está aquí para obtener alguna respuesta más allá de miradas y quejidos de mi parte, aun intentando descubrir lo que ocurrió aquel día, sin embargo, su libreta permanece en el bolsillo izquierdo de la bata, probablemente esperando el mismo resultado que los demás obtuvieron. Un suspiro de fastidio sale de sus labios mientras pasa su mano por el escaso cabello en su cabeza, dirige su mirada al reloj en su muñeca antes de volver a verme.

-Escucha, podemos estar aquí toda la noche si así lo quieres, -dice, aunque no parece feliz por ello- así que haznos un favor y dime ¿qué les pasó a tus amigos?

Con el paso de los minutos, el único ruido en la habitación es el golpeteo de los dedos la pierna de aquel hombre. Haciendo un gran esfuerzo para poder moverme, logro acomodar mi cabeza lo suficiente para verle directamente a los ojos. No es lo que esperaba. Frente a mi veo por escasos segundos a Bill Cipher, con su vista fija en mí, desapareciendo tan rápido como apareció. Si es real o no, ya no importa, ¿quién le creería a un paciente en un hospital psiquiátrico? Nadie... tal vez algún otro paciente.

-No...no lo recuerdo. -Miento, mi voz sale rasposa y casi en un susurro inaudible. Ha pasado un tiempo de la última vez que pude hablar, y de acuerdo con las constantes charlas de las enfermeras, mis cuerdas vocales deben estar bastante dañadas por los gritos de aquella vez.

-Por supuesto que lo recuerdas, -una lúgubre sonrisa se extiende en su rostro - pero déjame ayudarte ¿Qué le ocurrió a él? -saca de su bolsillo derecho una pequeña fotografía de un joven de piel morena, con ojos oscuros (uno de ellos más cerrado que el otro), cabello ondulado, color castaño y cuerpo encorvado. "Wybie"

La clara imagen de Wybie comienza a borrarse lentamente de mi memoria, como si nunca hubiese estado ahí.

-No puedo recordarlo-digo finalmente, volviendo a fijar mi vista en la pared, sintiendo la mirada pesada del hombre enfocada en mí. "Sabe que mientes"

- ¿Seguro? ¿Qué les ocurrió a tus amigos? -esta vez no muestra una foto, pues sabe que no la veré.

El claro recuerdo de una joven de pelo castaño golpeando con el puño a un chico robusto de cabello rizado y naranjo. La chica llora, pero ambos gritan.

-No...sé...-Murmuro. "Debe haber una salida"

-Bien, ¿qué hay de Coraline? ¿Recuerdas dónde está?

El sonido de una silla metálica arrastrándose por el suelo me sobresalta.

El recuerdo de la chica de cabello corto y azul con pecas en el rostro, sus ojos llorosos mirando hacia atrás, antes de subir a un auto y cerrar la puerta. La lluvia que cae en ese momento cubre lo último que dice la joven antes de marcharse.

Mystery Kids: SAMHAINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora