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De alguna manera me llamó la atención aquél número desconocido. Por un momento me sonó tan familiar...

Desconocido

"Hola.."

Era extraño verlo ahí. Sabía que era conocido. La pequeña esperanza de que fuera alguien específico se prendió en mi pecho. Pero...

Desconocido

Olvídalo, adiós.

Se apagó tan rápido como se encendió. Algo me decía que en el fondo esperaba ese mensaje.
Releí el número un rato, y luego recordé;

Lo siento, estaba viendo una película, ¿qué sucede?

Me había olvidado de su existencia totalmente, a tal punto de que ya no era perceptible en mi mente. Por un momento recordé la primera vez que le. dije te amo, pero lo ignoré. Mi párpado tembló.

Lo siento, te voy a dar el mal gusto.

Apreté aquél botón que tenía un pequeño signo característico de un teléfono. Comencé a llamar mientras la música sonaba de fondo, la llamada fue rechazada.

Desconocido

Lo siento, me dormí

Lo sé, te conozco.

Solo te extrañé y te hablé.

—Sí, yo también me extrañaría.

Por un segundo sonreí. Sabía cuanto dolor le causaría, el mal sabor que le dejaría en la boca. La conocía como la palma de mi mano.
No quería ser así, pero la necesidad de devolverle todo lo que me dejó, me ganaba.

—¿Qué pasa?

No podía dormir, y... Con la hora que es... Solo, no lo pensé. Dios...

—Yah.

¿Podemos hacer cómo si jamás te hablé?

Suspiré, mis piernas empezaron a temblar, debido a la ansiedad. Suspiré, creando un poco de vapor. La habitación estaba fría

—Siempre hacemos lo que preferís, así que sí.

Eh... No lo sé, solo... Yah, lo siento. Hasta luego.

—Adiós.

Esa persona... No se merecía tanto de mí al final.
Con el paso del tiempo, luego de que me dejara por su propio bien, me empecé a preocupar por el mío. Me di cuenta de que en verdad no me merecía.
Yo merecía algo mejor, algo a mi altura, y qué mejor que mi propio yo.

Preferí mi salud mental, antes que la de otros. Comencé a ser alguien sin pelos en la lengua. Me corté el pelo como quería, me lo dañé y me vestí como quise.
Me permití sentirme mal, y bien. Me permití cuidarme como quería y preferirme antes que se otras personas, por más importantes que fuesen.

Varias personas me llamaron egoísta, pero sinceramente, creo que amarse a uno mismo no es egoísta. Es libertad.

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⏰ Última actualización: Jul 12, 2020 ⏰

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