Un destino distinto (BillDip)

Capitulo 32

El tiempo pasó lentamente

Tres días para ser exactos, Bill se encontraba impaciente, sabía que el grupo de pesadillas que envió a capturar a los humanos liderados por Ford volverían dentro de otros dos días, un día como mínimo pero eso no era lo único que lo mantenía de ese modo, no, lo que lo mantenía así era el hecho de que este era el último día que le había dado a Estrella Fugaz para que le entregará el dado infinito

Y aunque envío a varias pesadillas espía a vigilarla, ni una podía confirmarle que la niña haya cumplido su parte del trato lo cuál eso lo hacía enfadar

-Amo Bill -se acerca una de sus pesadillas con lo que parecían ser dos luciérnagas gigantes entre sus manos- donde quiere que pongamos a los luminas?

Bill miró como las criaturas empezaban a brillar, uno de rosa y el otro de azul

Oh cierto, en realidad tenía tres cosas que lo mantenían agobiado y una de ellas era la decoración para el baby shower de su bebé la cual de llevaría a cabo el día siguiente

-Ponlos en las paredes, que se mantengan quietos a lo largo de cada muro

La pesadilla asintió antes de alejarse con los luminas, Bill tenía todo el salón del trono decorado de varias criaturas pequeñas y medianas demoníacas, unas brillaban, otras se inflaban y otras eran el aperitivo

Bill miró complacido como todo se llevaba a cabo, con un suspiro se relajo lo más que pudo en su trono mientras miraba y se aseguraba de que sus pesadillas hicieran el trabajo perfecto

Por otro lado, Dipper sabía lo del grupo que fue enviado a traer a los humanos y aunque no lo demostrara él estaba emocionado de volver a ver a su madre, aquella "visita" lo había mantenido distraído del problema que tenía con respecto a su temprana muerte, el bebé seguía absorbiendo energía de los demonios quienes lo tocaban incluyendo a Bill y según lo palabras de Pyronica el bebé nacería hasta que tuviera la energía suficiente

Si el bebé seguía absorbiendo energía de la misma manera que lo hace ahora entonces su tiempo de vida sería menos a lo que estaba planeado

Él y Pyronica lo sabían

Y aunque la demonio púrpura había buscado maneras de salvar a ambos desgraciadamente no pudo encontrar nada, Dipper era la primera persona embarazada de un demonio caótico, un obvio resultado de mantener a ambas dimensiones separadas por milenios

Ese hecho debió haber permanecido otros miles de años de no ser por un mortal que logró acceder a la dimensión demoníaca, desde ese momento el muro que los mantenía separados se fue disolviendo poco a poco hasta terminar en la actualidad

Ambos sabían que Bill enloquecerá si perdiera a su pareja o en el peor de los casos a ambos, no podían dejar que eso pasará, tenía que haber una manera de que ambos sobrevivan pero su tiempo se acababa

-*suspira* Ya no sé qué hacer -dijo Dipper para sí mismo- ya no puedo seguir ocultándoselo a Bill pero...no se...como decírselo

Dipper acarició su ya abultado vientre mientras tenía la mirada puesta en el cielo, ya que el bebé seguía absorbiendo energía su barriga estaba del tamaño perfecto para un bebé de cinco meses y eso a Bill le encantaba, finalmente después de unos momentos perdido en sus pensamientos llegó a una conclusión

Con un suspiro se armó de valor y salió de la habitación para dirigirse a la sala del trono donde seguramente su marido se encontraba

Todo estaba en silencio lo cuál aprovechó para pensar y buscar las exactas palabras que usaría ante difícil situación, unas pocas pesadillas se encontraban en el palacio y las que se encontraba Dipper en el camino lo saludaban, todo parecía estar tranquilo y en calma hasta que finalmente llegó a la sala del trono en donde encontró no solo a su marido sino que también al resto de las pesadillas ayudando a decorar con otras criaturas pequeñas