⇝Capítulo 3⇜

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⇝Capítulo 3⇜

ρriмєr αмσr

Narradora

Mientras tanto la pelinegra pensaba en una manera de sobrevivir buscando un empleo temporal; poco a poco llegaban los Kages a la entrada de la aldea para la reunión que llevarían a cabo.

El chisme más importante y actual en Konoha se transitaba en la bocas de los aldeanos de Konoha, por lo que era imposible que los grandes líderes de las otras aldeas no se enteraran.

La boda de Naruto era algo que no se deja pasar como una simple noticia. Llegaba un Kage tras otro, pero en estos momentos cierto Kage peliplata estaba exhausto por lo que pasó hace unas pocas horas, casi no pudo dormir ya que se estaba encargando de mantener tranquilo al Daimyo.
Algo que milagrosamente resultó  con un simple intercambio de palabras, ya que no era la primera vez ( y muy seguramente no será el último) que ocurría este suceso, sin embargó, era la primera vez que la persona violenta no obtendrá castigo alguno.

El Daimyo era algo comprensivo pero no quería que esto volviera pasar en Konoha sino las consecuencias serían terribles.

Kakashi que estaba ubicado en la entrada de la aldea junto a Shizune, el masculino soltó un suspiro de frustración, había demasiado trabajo que hacer y no había avanzado casi nada aunque Yuriko lo metió en un gran aprieto admitía que la joven era una gran ayuda, pero ahora tenía que lidiar solo con todo el papeleo.

Le dolía haber castigado de esa forma a la pelinegra y más sabiendo en los problemas que ella tendrá que arreglar en su Clan, pero esto era un escarmiento para que dejara de ser impulsiva y pensar las cosas antes de actuar, como también que todo no se resuelve con golpes y violencia

Aunque también admitía que Daichi se lo merecía, pero en como terminó en el hospital no se lo desearía a su peor enemigo.
El hombre ya no podía utilizar muy bien su órgano sexual por lo que le dijeron los doctores y para obtener nuevamente su intimidad de manera normal, tenía que tomar un medicamento especial para toda su vida.
En pocas palabras... Viagra.

Expulsando esos pensamientos Kakashi miraba hacia el exterior completamemte concentrado en el horizonte, sin embargó, la pelinegra lo o saco de su concentración.

Shizune._ ¿Que tanto piensa Hokage~sama? _ pregunto curiosa.

Kakashi._ Solo llámame por mi nombre _ soltó un suspiro resignado por aquel título, se sentía muy viejo cuando lo llamaban así, pero la mujer como siempre ignoraba esa petición _ es sobre Yuriko _ se quitó su sombrero de Kage.

Shizune._ ¿Es sobre lo que pasó en la noche? _ el Hatake asintió en silenció _ en mi opinión Hokage~sama ella tenía todo el derecho de hacer aquello esa noche y no merecía este tipo de castigo, como ella iba ha saber que la mujer era sobrina lejana del Daimyo. En particular el que casi muere fue Daichi y no ella _  soltó un suspiro _  Tsunade~sama me contó que animaría a Yuriko y mantenerla distraída por hoy _ aunque estaba feliz la pelinegra por la buena voluntad de su maestra, sabía perfectamente que esa subida de ánimo conllevaba a un bar por lo que era una perfecta escusa para la Senin y beber Sake _.

Kakashi._ Es bueno saberlo... es muy probable que ella no le duela el rompimiento _ miro a la pelinegra _ solo la marca de la traición, esa relación nunca hubo amor, solo era costumbre como también era algo que Yuriko sobrellevaba para no sentirse sola y por otra parte era para deslindarse de un matrimonio forzado por el Clan Ryuuka_.

¿ємвαrαʑα∂α ∂єℓ кαʑєкαgє?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora