Libertad- OGL 👑🐭

Parte 2

Senti cómo tocaron mi hombro, sabía que estaba muy cerca de mi porque persivia su respiración en mi cuello, lo que provocaba que mi piel se erizara, me giré para ver quien era.

-¿Ocupa ayuda?.- dijo Ovidio, con su sonrisa que extrañamente lograba ponerme nerviosa.

- Si, por favor.- respondi mientras le daba la botella, él la tomó inmediatamente.

- No ande haciendo tanto esfuerzo.- trataba de abrir la botella.- sé va a lastimar las manos y con lo chulas que las tiene.- volteó a verme, los dos sonreímos al mismos mismo tiempo.- pídame ayuda.- lo interrimpi.

-¿Para qué te la iba a pedir? Si tú tampoco puedes abrirla.- dije burlonamente y él frunció el seño.

Siguió peleando con la tapa mientras yo soltaba pequeñas risas, de la nada sentí cómo un chorro de agua chocaba contra mí cara y una parte de mí pecho, voltie a verlo.

- Eres un imbecil.- molesta tomé el vaso de whisky que unos minutos antes me habia servido y se lo tiré encima.

Comencé a caminar hacia dónde sabía que se encontraba el baño dentro de la casa, entré cerrando la puerta detrás de mí mientras bufaba, vi una canasta que contenía toallas, tomé una y me miré en el espejo del lavamanos, seguía maldiciendo mientras veía mi blusa empapada que dejaba notar mi piel debajo de ella.

¿Cómo iba a salir así frente a todos? Mi blusa se dañaría.

Primero sequé mi rostro para después comenzar a secar mi cuello, brinque al escuchar cómo la puerta se abría, volteé y vi a Ovidio parado en el marco, entró y volvió a cerrar la puerta.

- ¿Qué no te enseñaron a tocar?.- dije mientras trataba de cubrirme con la toalla.- evidentemente está ocupado, puedes salirte por favor.

- Ya ve ¿Para qué se anda burlando?.- se acercó a mí.

Estaba tan nerviosa que no sabía que hacer, me quedé paralizada observando sus movimientos.

- Pero no sé apure, qué se sigue viendo igual de chula.- me susurró al oído.

Pude sentir cómo mi cuerpo se estremecía y una sensación extraña se apoderaba de mi estómago, afortunadamente reaccione y lo empuje.

Él me miró a los ojos y camino al lavamanos, abrió el grifo, lavó su cara para después tomar una toalla de la misma canasta que yo lo había hecho, mientras se secaba comenzó a hablarme.

- Es usted muy maleducada.

- ¿Yo? Él maleducado eres tú.- lo mire molesta.- ¿No ves cómo me dejaste? No fue suficiente con arruinar mi makeup hiciste añicos mi blusa.

- Ya le dije que así se ve más chula, a demás ¿Qué se queja? Ya se desquitó, usted también me mojó.

- Eso y más te mereces.- respondí.

- Si yo la moje fue por accidente, pero usted si se ensañó conmigo.- se acercó a mi y me miró a los ojos.- pero no sé apure que yo ya la perdone.

-¿Y quién te dijo qué te quería pedir perdón?.- subí el tono de mi voz.

- Ps' una mujer como usted tener un corazón bien bonito, yo sé que en fondo ya se arrepintió, pero si me tiene que volver a mojar pa' que vuelva a cruzar palabra con usted, bien gustoso me aguanto.- rió.