Domestico/Cotidiano

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Dia #3 Domestico

Llevaban horas atrapados en su apartamento, ni siquiera contaron los días, solo cumplían tratando de entregar el mayoría de papeleo que se les asigno

¿Qué pensaron?

¿Que la vida de héroe seria todo pelear contra el crimen, cruzar paredes de manera asombrosa, piruetas geniales con trajes ultra cools y cuerpos esculturales?

¡JA!

Sí, hay momentos geniales, completamente peligrosos y nada recomendables pero en su mayoría...más cuando eres un héroe no muy grande y más cuando eres un héroe que está contribuyendo con sus amigos a crear una agencia propia, tu vida moza sobre las calles y callejones se termina y es cambiada por enormes pilas de papeles listas por leerse y hacer algo con ellas, era aburrido, tedioso, casi se sentía como las largas guías que enviaban los profesores infernales de la academia, el estrés de la responsabilidad adulta era un infierno. ¡Y mira que apenas tenían 21 años!, no podría quejarse de todo, su vida ha sido bastante buena, pero. Santa mierda, a veces quieres tirar todo a la mierda, rasgar tu ropa para que un vestido mágico de... ¿escarcha?, ¿Nieve? o algún material poco probable para la costura fuera hecho en un instante mientras gritas como loco a los cuatro vientos en una montaña; desgraciadamente aquellas maravillas solo existirían en películas con grandes detalles, justo ahora su única forma de liberarse serian las quejas y un buen descanso de media hora.

Envió los últimos tres correos del día, suspiro agobiado, nunca pensó que crear una agencia siendo solo un copropietario iba a ser tan atareado, ni siquiera se imaginaba todo el trabajo que tendrían Bakugou y Kirishima quienes eran los principales líderes, se sentía un poco fresco de poder ayudar a rebajar la carga de ellos dos, sabiendo de sobra que el dueto solía cargar de más el papeleo que le correspondía solo por molestar y hacer el tonto, claro, el luego se las cobrara con su hijo si es que ese par se le ocurre tener algún niño a quien aterrar, pobre de quien sea el futuro malandrillo que tengan. Agradecía tener como pareja a alguien que también lo apoyara con la locura que él y el escuadrón habían hecho, muchos les dijeron que podrían rendirse en el camino, obviamente esos muchos terminaron con un buen sermón y un 'Estos asquerosos extras están más que preparados para una jodida agencia de mierda y la mía será la mejor agencia de todas, así que ya verás a estos malditos detrás de mi culo' o algo así entendió, la verdad no presto mucha atención pero igual está encantado de ser considerado por su rabioso bro. Levantando su adolorido trasero de la incómoda silla de escritorio, estiro cada musculo y hueso que pudo, el crujir de ellos fue placentero y sin duda liberador, horas sentado en el mismo punto hacían pesadillas en sus piernas, tomo la taza negra con una gran higa en su superficie de color morado brillante orgulloso de la frase que tenía en su lateral, un tonto regalo de cumpleaños que le dio a su novio hace tiempo y que no se arrepentía en absoluto de dar la sonrisa del tipo ojeroso al leer lo de la cursi frase fue la mejor recompensa de todas, el recuerdo viajo detrás de sus ojos como si flashes brillantes de fresca memoria.

'' ¿You are my Shinzou?'' soltó un resoplido, su risa característica que solo escapaba de vez en cuando, tal vez por eso serían tan maravillosas recompensan por el hecho de ser tan exóticas

''¡Sip!'' silbo '' tengo más con diferentes frases'' agarro unas dos cajas más que tenían más tazas de diferentes colores variados y con estilos diferentes, cada una personalizada con una frase, piropo o dibujillo tonto que más representara, esta vez sin duda no solo fue un resoplido, una carcajada genuina, una que calentó el corazón de Denki de una manera inexplicable, Hitoshi tomo una de las tantas tazas que ahora se encontraban en la mesa, leyendo con detalle el contenido de ella, las puntas de sus orejas se tornaron de un color rosado, su expresión paso de chistosa a avergonzada en segundos, dejando la taza en su lugar, inhalo llevando su cabeza hacia atrás en el aire, miro con ojos amatistas el techo tratando que la sangre en su rostro bajara lo más rápido posible esquivando la mirada curiosa de su novio ''¿Pasa algo?, ¿ No te gusto ninguna?, porque puedo cambiarlas si quieres'' espeto nervioso, limpio sus manos sudorosas en los short deportivos de tiro alto que llevaba color vino, los pequeños temblores en sus dedos se intensificaron por la idea del rechazo.

!Shinkami Week 2020!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora