La cafetería era un gran espacio lleno de mesas redondas con grupos ya formados en cada una. Al costado derecho estaba la barra en la cual podía pedir mi almuerzo con una talonera que me había dado mi padre antes de irse. La verdad la comida no se veía nada mal y las señoras y señores que servían el almuerzo eran muy simpáticos, sus personalidades eran de gente esforzada y parecían disfrutar lo que hacían -ojalá en mi otro colegio hubieran sido así, me acuerdo que el pure de papas parecía respirar..
Cuando ya tenía mi bandeja con toda la comida en ella, me dirigí a una mesa que se encontraba vacía junto a la ventana, pero justo cuando pensaba colocar mi bandeja en la mesa una mano me impidió el paso.
―Esta mesa es nuestra nuevita, deberás ir a comer afuera― me dijo una de las chicas, de las tres que se encontraban espiándome cuando estaba con Declan.
―Disculpa, pero no veo una etiqueta que diga que es de tu propiedad― la chica irritada miró a sus amigas como buscando apoyo y vi que las otras aprecian a su lado. Seguro pensaron que me estaban intimidando, pero yo ya había cambiado, ahora era la Celestine que siempre oculté en mi interior.
―Bueno de todas formas tomaremos esta mesa ¿Por qué no te pierdes? ―me dijo la que parecía ser la cabeza de las tres.
―Mira Jenna...
― ¿Cómo sabes mi nombre? ¿Nos conocemos? ―Bueno tal vez era la cabeza, pero parecía tener la suya hueca.
―Declan me lo dijo, cuando nos seguían por los pasillos― pareció ofendida, como si ella no fuera capaz de algo así. Pero en cosa de segundos una sonrisa inundó su rostro y meneo su pelo hacia la morena que se encontraba al lado de ella, quien tristemente se llevó un latigazo en toda la cara.
― ¿Declan te hablo de mí? ―y soltó un suspiro que pareció más un orgasmo, sus amigas la abanicaban como si algo muy dramático estuviera sucediendo.
―Bueno, te mencionó― no le quise decir que al parecer no le agradaba mucho al pelirrojo.
― ¡No puedo creerlo! ¿Y qué te dijo? ―se sentó en la mesa y me señaló el asiento al lado de ella, como una invitación para que siguiera hablando. ¿Quién se cree esta, la Paris Hiton de la cafetería? Prefería comer en el suelo que con ellas. Me provocaban indigestión sus pequeñas mentes retorcidas.
―Nada, solo te mencionó cuando le pregunté sobre las acosadoras que nos seguían― abrió la boca con indignación y cuando estaba a punto de decir algo la interrumpí― Ahora si me disculpas me voy a otra mesa antes de que se me quité las ganas de comer― dije sin más alejándome de ahí. Todos en la cafetería parecían haber estado pendientes del "enfrentamiento" de la nueva con las imitaciones de Mean Girls esas. Me miraban como sin poder creer lo que había hecho.
Vi a una chica en una mesa sola, que estaba comiendo sin querer ser notada. Por lo que leí de sus pensamientos, había estado mirando discretamente la escena y bajó la mirada cuando se dió cuenta que yo la estaba visualizando. Por lo que vi de su pasado, Jenna y sus secuaces la habían molestado en toda la secundaria por venir de una familia afrodescendiente y su tono de piel. Sentí pena y a la vez empatía por ella así que me acerqué a hacerle compañía -o bueno que ella me hiciera a mí-.
―Hola― la chica no parecía creer que le estuviera hablando a ella, así que solo miró fijamente su plato― Soy Celestine Jones, soy nueva― al parecer comprendió que me dirigía a ella y finalmente levantó el rostro. Era muy tierna, tenía una piel increíblemente tersa y que se veía tan suave. Unos ojos enormes café chocolate y unos labios gruesos envidiables ―Me gustan tus trenzas, ¿es muy difícil hacerlas? ¬―la verdad se veían tan perfectas y simétricas que me preguntaba si se habrá demorado mucho en hacérselas. Tomó una con su manicura perfecta color rosa pastel y me sonrió tímidamente. En su mente aún se preguntaba por qué yo le estaba hablando.
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Celestine
Teen FictionCelestine Jones siempre ha tenido una vida dificil llena de acoso por parte de sus compañeros y el constante pensamiento de tener que mantenerse lo más distanciada posible de la vida sociedad. Esto por culpa de su habilidad para leer personas que, a...