-En blanco-||Rivamika fanfiction||

Capítulo 18. Misión ¿Exitosa?

I just wanna be somebody to someone, oh

Solo quiero ser algo para alguien

I wanna be somebody to someone, oh

Solo quiero ser algo para alguien

I never had nobody and no road home

Nunca tuve a alguien ni un camino a casa

I wanna be somebody to someone

Solo quiero ser algo para alguien

Fueron unos días de paz, finalmente pudieron tomar un respiro, sin embargo, Levi casi deseaba que volvieran a ser perseguidos, que el antiguo rey diera un golpe de estado otra vez o algo así, mierda casi anhelaba que los titanes lograran pasar una muralla.

–Repasemos –Dijo Hanji del modo más serio posible mientras sujetaba una hoja de papel– ¿Flores?

Levi simplemente levantó un ramo de crisantemos violetas con un par de camelias blancas, todo envuelto en un listón blanco.

–¿Ropa?

El hombre más fuerte de la humanidad extendió sus brazos mientras daba una vuelta lenta, Hanji examino cuidadosamente su atuendo, a pesar de que la castaña había insistió que usará el dinero dado por Historia para buscar un conjunto más elegante, Levi simplemente se había negado al ver la ropa que se consideraba "elegante", por lo que termino vistiéndose con la ropa más decente que tenía, unos pantalones negros con una camisa gris y la chaqueta negra que robo cuando los titanes aparecieron dentro de las murallas con su pañuelo de siempre, Hanji se había ofrecido a peinar y cortar su cabello, la castaña estuvo a punto de perder un ojo (spoiler jajaj), el cabello de Levi quedó igual que siempre.

–¿Tienes la reservación?

El más bajo saco el documento con dos reservaciones en un restaurante, no era demasiado elegante (o ridículo como decía el más bajo), era adecuado para ellos.

–Oficialmente estamos listos para la misión "Cita" –La castaña lanzó el papel por la ventana mientras se acomodaba los lentes, a pesar de que Levi no quería su ayuda al inicio, la mujer no paro hasta que él la dejó ayudarlo–. Tan siquiera intenta verte emocionado, con tu cara de siempre la espantarás.

El Capitán simplemente puso los ojos en blanco mientras intentaba sonreír, aunque termino viéndose como una mueca extraña.

–Eso fue la cosa más horrible que he visto en mi vida –Tras decir eso la castaña soltó una carcajada mientras se sujetaba el estómago, Levi le pegó con una escoba.

Mientras tanto Mikasa estaba rehaciendo su peinado por quinta vez, se hizo una cebolla en la nuca dejando sus mechones de cabello usuales en su cara, estaba por deshacer su nueva opción cuando Armin la detuvo.

–Realmente te vez bien Mikasa, no tienes que cambiar tu cabello de nuevo –Exclamo el rubio tratando de calmar a la nerviosa azabache–. Estoy seguro de que le encantarás como sea que vallas.

–¿Por qué es más fácil matar titanes que esto? –Preguntó tratando de ser graciosa para liberar tensión, sin embargo, realmente sentía que matar titanes era más fácil, ni siquiera el ser considerada como una fugitiva la había hecho sentir tan nerviosa, resignada se levantó para contemplar su reflejo en el espejo de cuerpo completo.

Un vestido azul oscuro sencillo que le llegaba a la pantorrilla, tenía un cuello en o que no mostraba nada más de lo necesario, las mangas a la altura del codo, llevaba un cinturón delgado de color plata junto a unos zapatos sencillos de color negro al igual que la chaqueta que habían remendado para que encajará con el conjunto. Armin había hecho que Sasha le comprara estas cosas a escondidas, (claro que Mikasa le había dado el dinero) aunque la chica patata intento preguntar para que Armin quería estas cosas, él solo le dijo que consiguiera algo sencillo pero bonito, nada tan extravagante como acostumbraba la gente rica, Sasha le contestó que no había problema, pero que, a la siguiente fuera con ella, que no tenía que avergonzarse por sus gustos. Armin termino más rojo que un tomate.

–Gracias por tu ayuda Armin –Exclamó Mikasa, antes de abrazar al rubio–. No sé que habría hecho sin ti.

–Cualquier cosa por ti Mikasa –Respondió Armin correspondiéndole el abrazo.

Entonces tocaron la puerta.

La pelinegra respiro hondo, se acercó a la puerta mientras Armin la mostraba un pulgar arriba en señal de apoyo, abrió la puerta esperando ver al otro Ackerman.

–Mikasa, ¿Por qué estas vestida así? –Preguntó un confundido Eren una vez que la puerta se abrió.

–¿Qué haces aquí... ? –Cuestionó la otra.

–Eren –Exclamó el castaño un poco molesto al ver que Mikasa no se acordaba de su nombre.

–Aja, ¿Qué haces aquí de todos modos? –Volvió a insistir la pelinegra con indiferencia.

–Quería ver si podíamos salir Armin, tú y yo, a pasar el rato por ahí –Dijo Eren aun con la incertidumbre de ver a Mikasa más arreglada de lo usual.

–En realidad Mikasa ya tiene un compromiso, pero tú y yo podemos salir Eren –Explicó el rubio, antes de que otra cosa ocurriera Armin tomo a Eren por los hombros para llevárselo a casi rastras de ahí, él castaño intentó protestar, pero la determinación del rubio fue suficiente para sacarlo antes de que llegara Levi, quién alcanzó a ver por el rabillo del ojo como se alejaban por un pasillo.

Ni Mikasa ni Levi recordaban quien había acordado que tendrían una "cita" (según Llevi fue por causa de Hanji) pero eso no evitaba que se sintieran felices al poder hacer algo de una pareja normal.

–Te vez increíble –Fue lo primero que exclamo el pelinegro con un toque de cariño, con cierta rigidez extendió el ramo de flores a la joven, quien las sostuvo con una sonrisa–. Esto es lo más romántico que puedo ser mocosa.

–Francamente estaba esperando un ramo de detergentes –Bromeo la más alta mientras colocaba el ramo en un jarrón que tenía en la habitación, Levi simplemente rodó los ojos.

–Yo intentando ser un caballero y tú me desprecias –Expreso el más bajo, por lo que Mikasa le dedico una sonrisa mientras entrelazaba su brazo con el de él.

–Tú igual te vez increíble enano –Dijo con una sonrisa la más alta, el más bajo solo mostró una pequeña sonrisa mientras empezaban a caminar. Al final, salieron del castillo rumbo a su cita (evitando ser vistos por cualquier otro).

Fue una cena agradable para sorpresa de ambos, pasaron la comida hablando de todo, hablaron de cada cosa que se les ocurrió, desde lo que vendría a partir de ahora (regresar a Shinganshina) hasta las extrañas cejas de Erwin, de vez en cuando regresaba el sentimiento de culpa a Levi, pero el ver a la joven dedicarle una sonrisa a él con tal apreció, con una mirada que nadie le había dirigido antes, podía disfrutar ser egoísta por una vez.

Y aquí estaban, de regreso en la puerta del cuarto de la pelinegra, disfrutando de los besos del otro, caricias fugaces, todo cargado de amor y sentimiento, ambos con el miedo de que esto sea solo un sueño fugas, estaban entrando lentamente, Levi cerraba la puerta tras de sí. Cuando empujo a la pelinegra hacia dentro antes de ser emboscado por un castaño furioso.

–¡¿Cómo se atreve a aprovecharse de ella así?!