Lady Rose-Capítulo 8

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Es muy probable que te preguntes por qué, aun siendo plebeya, una vez a la semana me acompaña un miembro de la realeza a casa.

¡Y no es solo eso! mantenemos incluso conversaciones largas y tendidas. No es que sea especialmente de mi agrado, pero lo cierto es que tampoco puedo
prohibirselo, asi que me toca poner buena cara y aguantar.

Durante cierto tiempo, no dejé de darle vueltas al asunto, pero, al final, decidí que mientras no me traiga problemas tampoco es que sea malo, asi que probablemente la mejor solución sería
ignorar esta situación sin más.

Otra de las razones para mi poca preocupación era que, por fin, se me permitió hacer mi propio pan y era todo lo que ocupaba mi mente.

Aunque intentara hacer el pan como el que hace la señora Michelle, lo cierto es que desde el principio y hasta el final, el mio acaba siendo muy distinto. Sea el hacer la masa, la forma o el hornearlo: Nada es igual.

En verdad, en el pasado no hacía más que vender pan, pero ahora quiero aprender todo sobre el producto. ¡Quiero saber cómo se hacen los más
variados panes! y, gracias a haber acabado como plebeya, tuve la oportunidad de encontrar algo que realmente disfruto. ¡Qué maravillosa es la vida!

Pero hoy es mi día libre.

Quiero trabajar un poco! ¡Permítanme trabajar!
Solo un poco..deseo poder hornear pan desde la apertura de la tienda hasta su cierre.

No deambulando, lentamente, por mi casa, como si de un fantasma se tratase.
pensando mas que en eso, acabé ante tal situación pensé que no estaría mal salir a pasear y pasar por las distintas callejuelas de la ciudad, pero, en ningún momento pensé que me
acabarían encontrando.

-¡Hermana Felicia! Ha pasado muchisimo tiempo desde que nos vimos por última vez.

Antes de que me echaran de casa, tenía un hermanastro, Sid Swallows.
Me froté, incrédula, los ojos, es literalmente imposible que esté en un lugar como este y, más aun, sin guardaespaldas. Pero, ese tono de voz tan poco expresivo y entonación tan caracteristica suya, además de la típica manera de llamarme y el fisico arndrógino, era un joven con pelo negro y ojos color oro. Mires como lo mires, es Sid.

Después de que se propusiera mi compromiso, mi padre mandó llevarlo de vuelta a casa, cosa que consiguieron, probablemente, por medio de violencia, para arreglar el problema de la
herencia. Conoci a Sid justo después de que me informaran sobre el dichoso compromiso, ahí es cuando supe que estoy en el juego de Lady Ro.

Al tropezarme con Sid mi cara palideció y no tardé en arrepentirme de haber salido de mi casa.

- Oh ya puedo dirigirme a ti sin formalidades?

Acercándose lentamente, inclinó levemente la cabeza como si estuviera pensativo.

Tranquilizate. ¡Tranquilizate de una vez! Para empezar no estaria mal preguntar aunque sea por que vino hasta aqui.

Sid siempre intenta aparentar ser una persona muy fria e insensible, pero la verdad es que es muy parlanchin e inocente por naturaleza, aunque nunca hay que olvidar que, en el universo
del juego, es probablemente la persona a la que más hay que evitar.

-¿Por qué viniste tan lejos?

-Eh? Simplemente quería verte. -Dios, por favor, deja de empeorar la situación, que mi Corazon ya de por si late como loco. Espera un momento es literalmente imposible que el niño
de "Lady Ro", al que todos llaman "niño trampa", venga así como así a verme.

Aunque esté en panico por no poder leer sus intenciones, por su expresión ni por su tono, no permitiré que me controle en ningún momento, no seré su marioneta y no le permitiré destruir mi apaciguada vida.

No quieres entrar? Es cierto que es más
pequeña que la habitación más diminuta de la mansión Swallows pero...

-Hmm... ¿Asi que mi hermana ahora vive en una casita para perros? Me encantaria verla. -No es que me importara su sarcasmo, siempre fue
bastante maleducado hablando con sus familiares, también he de decir que es una persona muy engreida, pero no es un mal crio.

Vosotros tambiėn mirais a las personas poco conocidas con superioridad, pero no por ello sois sobervios.

Solo gracias al juego, soy consciente de su situación, aunque entiendo perfectamente a toda persona que piense: "iQué niño tan arrogante!" o
algo por el estilo, sin conocerle de nada.

Pero intento evitar a Sid por una razón totalmente distinta.

-Es asombroso que te hayas ido tan lejos solo para verme, tu hermana mayor con la que ni hablabas.

Intenté evitar, a toda costa, a mis personajes favoritos del juego como a Sid, trataba de no hablar con él más de los necesario en casa y en la escuela, asi que nuestra relación, como ya os
imaginareis, no es muy profunda tampoco, de hecho, hablaba con él menos que con un compañero de clase cualquiera.

¿Acaso es posible que vaya a visitar a su hermana mayor, que ahora no es más que una desconocida para el? Obviamente no.

-Empezaron las vacaciones en la escuela, asi que estoy libre, además.. - Sid no terminó la frase, dejandola a medias. Le he mirado con sumo
interés y, como siempre, su cara no mostraba sentimiento alguno, por sus ojos no parecía estar vivo siquiera.

A menudo, uno se pregunta si está
siquiera consciente.

Pasados tres minutos, siguió estando en silencio.
Además, Qué pasa? ¿Acaso piensas terminar la frase? Has acabado la oración en una parte un tanto sospechosa y me ignoras cuando intento lanzarte indirectas con la mirada para que sigas. No eres
idiota, sé que lo estás viendo todo perfectamente.

¡Lo sé A...a...dios santo, Por qué todo se Vuelve en mi contra? Todo este tiempo trataba de evitar todo Contacto con mi hermano, solo queria vivir teliz,
horneando pan y vendiéndolo.

¿Por qué mi vida tiene más subidas y bajadas que las montañas rusas?

LADY ROSE QUIERE SER UNA PLEBEYADonde viven las historias. Descúbrelo ahora