Mi secuestrador• F.W

Capitulo 3

-¿Que quieres?-Dije con los ojos abiertos como platos.

El chico era alto, de tes pálida, pecas en el rostro, y un cabello bastante lindo y rebelde para mi gusto.

-Dinero.-Dijo sin dejar de verme, eso me hacía sentir incómoda.

-¿Dinero?-Dije sorprendida.-Bien, si quieres de puedo dar la clave de mi cuenta y puedes tomar lo que quieras.-La verdad no tenía dinero en esa cuenta, pero si el se iba me podía escapar.

-No princesa.-Dijo con una mueca.-No quiero ese tipo de dinero.-Dijo distante.

-¿Entonces?-Pregunte asustada.

-¿Sabes? Yo sé que tus padres tienen una empresa de miles de millones de dólares.-Dijo acercándose y sentándose a la par mía en la cama.

-¿Entonces quieres el dinero de mis padres?-Pregunte.

-No, quiero la empresa de tus padres.-Ja! Si como no.

-Ellos no te van a dar la empresa secuestrador.-Le dije un poco más calmada.

-Si quieren ver a la zorra de su hija viva  creo que me la tendrán que dar.-Dijo jugando con mi cabello, y sonriendo cínicamente.

-¿Que vas a hacerme?-Dije con algo de lágrimas en mis ojos.

-Eso solo depende de tus padres.-Dijo para después salir dando un portazo.

NARRA FINN

Tenia miles de ideas en la cabeza para obtener la empresa de los padres de la chica.

Pero había un problema, su hermano. Se que si el amara a su hermana, jamás me la hubiera dado. Pero en esas situaciones no vale nada más que tu vida, aunque sea una mierda.

Me dirigía hacia el refrigerador para sacar una lata de cerveza. Después decidí no sacarla y mejor tome un cigarrillo. Lo prendí, y me di cuenta que tenía que salir, a comprar comida. Si iba a tener invitados la comida no me tenía que hacer falta.

Me puse mi abrigo, tome una caja de cigarrillos, encendedor, dinero y las llaves.

Salí de la casa, puse con llave la habitación de la princesa y me dirigí hacia mi Jeep. Encendí el auto así como un cigarrillo nuevo.

Me tarde media hora en llegar a la ciudad, me tarde 10 minutos en llegar al supermercado y comprar lo básico.

Pan, huevos, cervezas, cigarrillos, jugo de naranja, manzanas, leche, cereal, un poco de carne, y yogurt. Creo que con eso era suficiente para pasar una semana, en lo que me entregan el dinero por la chica.

-Son $100.-Dijo el cajero, tenia una cara de muy pocos amigos. Se los entregue, me lleve las compras las lleve al Jeep. Y me dispuse a regresar a mi cabaña.

NARRA _______.

Estaba totalmente asustada, el chico dijo que lo que me haría dependería de mis padres. Y recordando que nos padres me odian con toda su alma, creo que ya estaba muerta.

Pero ¿Por qué a mi? Es decir, Sam era una presa mucho más fácil, y mis padres lo amaban con toda su Alma, por el si darían la empresa y mucho más. Así que no entendía por qué a mi.

¿Por el simple hecho de ser una chica?

Senti que mis mejillas estaban empapadas de lágrimas, quería gritar y decir que deseaba nunca haber nacido, me quería morir. Pero sabía que sí lo hacía le iba a dar placer a mis padres, compañeros de clase, y este chico que nose como se llama.

Sentía los ojos hinchados de tanto llorar, aún tenía el uniforme de la escuela, estaba algo sucio por que
desde que me desperté solo estaba en el suelo.

Intente abrir la puerta, pero me fue imposible. Me intenté dormir, y lo logré, por que los ojos los tenía muy hinchados. Y llorar hasta quedarse dormida, es una de las cosas que hacía mayor mente todos los días.

NARRA FINN

Estaba llegando a la cabaña, tarde 50 batardos minutos en llegar, pero valió la pena.

Entre con las malditas compras y me las acomode en la cocina, fui a ver a la princesa. Se me hacía bastante raro no escucharla llorando.

Abri la puerta y ahí estaba ella, acostada en el suelo, durmiendo con los ojos hinchados.

*Pobre estupida*-Dijo mi subconsciente.

Parece que la chica se percató de mi presencia y se sentó, me miró algo extraña.

-¿Me puedo bañar?-Pregunto derrepente. Me dieron ganas de reír, a lo mejor pensaba que yo era uno de esos secuestradores que son buenos con sus víctimas. Pero por alguna razón me molestó que dijera eso.

NARRA _______.

E

staba despertando, cuando vi una sombra. Era el chico, el maldito chico.

-¿Me puedo bañar?-Solte derrepente, yo estaba acostumbrada a bañarme todos los días. El solo me miró frío y con desagrado.

-Ven.-Me tomo bastante fuerte del brazo y salimos de la habitación, no pude ver el resto de la casa muy bien por que el me llevo afuera. Hacia un frío de mierda y no sabia donde estábamos, habían árboles y un río que corría bastante rápido.

-¿Que hacemos aquí?-Dije. Pero fue un error.

cuando me di la vuelta para verlo, tenía una mangera en la mano, la encendió y me llenó de agua, el agua estaba fría, y me hechi agua como a un animal.

-¿Querias bañarte? Pues hazlo.-Dijo molesto, lo entendía por qué.

Con la mangera me hecho agua desde la cabeza hasta los pies, con todo y el uniforme, el agua estaba fría. Sentía bastante frío.

Derrepente el agua se detuvo, el chico me había dejado de echar agua. Me volvió a tomar del brazo con bastante fuerza para entrar otra vez a la casa.

Entramos a la habitación en donde me estaba "Quedando" y me tiró sin ningún remordimiento. Cai al suelo y me golpeé la cabeza, el cerro la puerta de golpe. Y yo me quedé en la misma posición en la que me había caído.

Sentía escalofríos, estaba acostada en el suelo. ¿Como alguien puede ser tan cruel? Temblaba del frío, asu que decidí acostarme en la cama. No logré conseguir quedarme dormida después de 10 minutos.

Juro que iba a morir de hipotermia en cualquier momento.

_______________________________________________

Hola, solo quiero decirles que en esta historia, el Finn va a ser bastante cruel con la rayis. Pero poco a poco se van a empezar a enamorar jsjs.

Admiren la belleza de ese Dios griego.

Arios dijo Snapchat 💥🌠