Stuck in a rollercoaster

I

El inicio de un bien fin de semana

Becky se levantó al momento sonó su alarma, solo para recordar que era sábado. El lunes y martes que venían son feriado por un santo que no logró recordar.

El miércoles había un examen importante, pero raramente sus amigos le agarraron de rastas para ir a un divertido día.

¿Por qué iría a una montaña rusa si podía estudiar el fin de semana completo y asegurar su 10? Además no le gustaría tener en su expediente una nota menor que 8, necesitaba una beca para ir a la universidad.

Sin tener nada que hacer, Becky miró su celular. Las siete de la mañana.

El grupo de sus amigos había estado activo durante la madrugada. Pero pasó de los...¿3.503 mensajes? Decidió llamar a Chloe.

—¿Hola?— dijo, y escuchó un gruñido.

—Becky. Son las siete de la mañana con quince minutos y once segundos. Es sábado, y creo que ayer me quede hasta las las doce hablando con nuestros amigos. Prefiero descansar y como mi mejor amiga deberías entenderlo— dijo bostezando entremedio de aquella declaración.

— Chloe, yo... perdón pero no tengo nada que hacer— la interrumpió—. Si te despertarás más tarde...— dijo rodando los ojos por detrás del teléfono.

— Perdón, creo que entonces llamaré a Annie...quien al parecer es mejor amiga que tu...

—¿...Cómo va tu vida?— se apresuró Chloe, incorporándose.
— Ya sabes, quiero ser médico y...no debería ir a esa montaña rusa cuando puedo mejorar, pero dejándolo de lado,¿Escuchaste lo de Charli y Chase? Pobre Charli, ¡Chase la engaño con la ex de Bryce!

—¡Si verdad! Además Nessa lo confesó, ahora la carrera de la Hype House estaba acabada...Además se funaron a la Addison Rae— dijo Chloe más animada con el chisme.

—Están exagerando, lo de Addison es puros celos y envidia.

— Además creo que es un filtro...¿Pero viste a Noah Beck de la Sway house?

Hablaron animadamente por un par de minutos y ya era hora de tomar desayuno.

—¡Mamá!¿Comió Ollie?— dijo gritando para su madre le escuche.

—¡No!¿Puedes darle?— dijo gritando también.

—¡Ya!

Agarró el plato de su perro y le echó comida dejándole dos tazas de "Dog Chow". Su cachorro— Aunque tiene tres años— le agradeció dándole un laguetazo en la mano.

Se entró a su cocina y tomó un buen y balanceado desayuno.

Se visitó y fue al punto de encuentro con sus amigos. Obviamente llegó de primera. La puntualidad era una sus destrezas y su defecto. Eso le demostró que por llegar antes, descubrió que la madre de Mark—Su amigo, que debería estar aquí hace catorce minutos— le era infiel a su padre.

Estaba yendo a su cumpleaños y en el local vio a la señora Gaunt muy cerca del payaso del cumpleaños. Y luego procedieron a besarse.

Una pequeña Becky— En el momento tenía siete— se perturbó. Aún más con el payaso. Por eso tiene un pequeño trauma con esos.

Por fin llegó alguien, y no era nadie más que Annie.

—¡Anne!— dijo de cariño Becky.
— Becka, sabía que ibas a ser la primera en llegar.
— Obvio— dijo en un tono arrogante, falso, claro.
—¡Becky— Gritó Albert a una distancia bastante lejana—, Annie!
— Aleluya— dijo Becky haciendo la señal de la cruz—¿Dónde esta Mark?— mencionó un poco ruborizada.
— Debería llegar...ahora— dijo apuntándole a un auto.

Mark salió de mala gana y gritándole a su madre.

—¡Mejor en vez de dejarme con mis amigos deberías ir con ese payaso! ¡Literal!— dio un fuerte portazo—. Becky...— dijo un poco más tranquilo.

—Mark...¡Estás media hora tarde!— dijo poniéndose más seria.

—Bueno...Lo siento...—dijo un poco nervioso y llevando su mano a si cuello, y sonriendo nervioso.

Chloe llegó luego de cuarenta y cinco minutos, consiguiendo una regaño de Becky.

Llegaron a el parque de diversiones.

—¿Sandwich?— dijo Mark dirigiéndose a Becky.
— Si cariño— dijo Chloe detrás de Mark.—. ¿ La pagarás tu?
— Yo...le decía...
— Oh ¿A Albert le decías?— Dijo sarcásticamente.

Becky y Annie rieron, Mark se fijó en una risa en especifico.

Llegaron a la mayor montaña, la más monstruosa de todas; "Auschwitz" se llama. Becky estaba aterrada, siempre tuvo un problema con las alturas.

— No te preocupes beck, Mark te cuidara— Dijo Chloe con un codazo.

— Annie,¿ Quieres algodón de azúcar?— dijo Albert.
—Ok.
Becky estaba al punto de colapso y solo tenía a Chloe.
—Oh Chloe, no puedo subirme.
— Beck, no te ofendas. Pero cut the bullshit.—dijo un poco cansada.
Becky abrió la boca en una perfecta "O".

—Mira, no va haber un accidente...no estamos en una película americana y cliché.
— Pero...
—...No.
Becky se quedó callada. Dedujo que estaría mejor si no luchaba con ella.

—¡Dejen de luchar y vamos a "Auschwitz"— Gritó Albert con una característica alegría.

—Ya vamos— Dijeron los otros cuatro al unsonio.

Muchas vueltas. Muchas vueltas tenía el "Auschwitz". Eso hacia que Becky se quedará intranquila. Subieron. Y empezó.

Un cosquilleo llegó a el estómago. Becky sintió su desayuno llegando. Pero dirigió una mirada a Mark y la tranquilizo.
Terminó más rápido de lo esperaba.

Bajó y miró a todos lados. Se sentía terrible.

— Oh Beck estás pálida...— dijo Annie preocupada.
— No importa Anne, estaré bien— dijo Becky tranquilizando a Annie.

—¡Vamos a otro! ¡A Juice Wrld!— dijo Albert emocionado.

Y se pasaron la tarde ahí. De montaña a montaña. Era el momento de irse ya a su casa.

—¿...Y si no nos vamos?— inquirió Albert.
—Al, si nos descubren estaríamos en muchos problemas y nos pueden poner un castigo— dijo Becky mordiéndose las uñas.

—Beck, Becka, Becky,  deja el drama. Todo estará bien, te tenemos y eres una Einstein— dijo Chloe guiñando un ojo—. Además somos adolescentes, necesitamos un poco de rebeldía.

—No es que no me convence...pero no me convence...— Dijo Mark sin confiar mucho.

—Harás que tu madre venga y la volverás furiosa...— Annie fue interrumpida por el mismo Mark.
—¡...Estoy dentro!—Gritó con euforia.

—Beck, sólo faltas tu...— dijo Albert poniendo su mano en el hombro de Becky.

—De acuerdo, pero si nos descubren...no tomaré responsabilidad. Será la culpa de todos.

—¡Genial!— gritaron todos menos Becky.

— Espero sepan lo que hacen...