|E p í l o g o|

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Quisiera poder darle un final a estás partes desfragmetadas, pero incluso escribir esto mal redactado me tomo tres años, porque lloraba y me desmoronaba cada vez que lo intentaba, es increíble lo mucho que dolío.
Ahora estoy en universidad, en la misma en la que Alex estaba y a veces observo su edificio recordando las veces que él estuvo ahí. Las cosas han sido difíciles, he aprendido que la depresión es un estado emocional propio que no depende de nadie y he aprendido a quererme, he continuado con Jesús y sobre eso podría escribir todavía más aunque no sería tan dolorosa como está.
Alex, al inicio cuando te fuiste llamabas al menos una vez a la semana y vídeo hablábamos, incluso tenías sexo por videollamada, pero yo jamás he sido muy atrevida, así que siempre supe que te aburrirías de mi. Ahora es julio y he perdido la cuenta de cuando fue la última vez que hablábamos.
Alex, solo espero que estés bien, que la vida te sonría y aunque tengo la leve sospecha de que estás con alguien más, una parte de mi se alegra, porque de verdad eres un gran hombre, ahora tengo una nueva perspectiva de lo nuestro, si es que se puedo incluir un "nuestro" en esto. Aún espero el día en el que te pueda volver a ver, se por tus estados de WhatsApp que has salido y te has divertido, que en tu vida todo va mejor.
Supongo que lo más difícil fue la partida de tu abuelita en marzo, dónde me avisaste un día antes de que te fueras solo para coger y recalcarme que no fui la primera persona a la que buscaste.
Alexander, te ame de una manera asombrosa y patética al mismo tiempo, incluso aún ahora, espero el día en el que me suba a un autobús y te encuentre de nuevo, me estoy esforzando al máximo en mi carrera, tanto como tú solías hacerlo, cuando hago algo mal recuerdo tu moral, tu recuerdo aún me motiva y te juro que vivo aunque no estés y aunque duelas de vez en cuando.

El Chico Que Me Rompió El CorazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora