Jacob y el niño bajaban las largas escaleras para ir a la piscina a relajarse y nadar un rato pero un fuerte sonido los asustó, de pronto se quedaron helados al ver cientos de seres golpeando las puertas de vidrio del frente y la del pasillo que lleva al estacionamiento, corriendo subieron a avisar a los demás, desesperados golpeaban en las habitaciones y de forma urgente corrieron a tomar las pocas cosas que tenían y sus armas. Bajaron a pasos gigantes debían salir antes que estos seres por la entrada que llevaba al depósito de la cocina, esa era su única opción, debían hacer el mayor de los silencios porque ya estaban adentro, enojados y hambrientos.
Cruzaban lentamente sobre las puntas de sus pies mirando con terror la furia y el vacío en sus ojos, accidentalmente el niño engancha un sartén y cae...todos se quedaron expectantes de aquel estruendo que causó..se miraron y una criatura que estaba de pie detrás de la puerta entra violentamente a la cocina, se frena y comienza a olfatear en el aire en ese momento grita a todo pulmón, el alarido más doloroso y sus ojos se inyectaron de sangre, se abalanzó sobre ellos y todos corrieron lo mas rapido que podian, la puerta estaba cerca y cuando llegaron a ella torpemente la abrieron pero la criatura tomó el brazo del niño lo jaló tan fuerte que sus uñas se enterraron en su piel, Hee le golpeó con un hacha de cocina de tal forma que le cortó la mano y lograron escapar. La única meta ahora era buscar un nuevo lugar donde esconderse y estar a salvo, ya estaban cerca del punto de encuentro, el ocaso se acercaba y se metieron en un galpón enorme, se descuidaron de si estaba habitado o no ellos solo necesitaban un lugar para refugiarse y ver las heridas del niño. El pequeño sangraba sin parar pero no expresaba dolor no se quejaba de su herida y en ese momento se dieron cuenta que algo en el no estaba bien, no era normal que en un niño de diez años semejante herida no le causara dolor, este era el tiempo correcto para explicar quién era, jacob le curó la herida y el pequeño le pidió que se reuniera con los demás, había algo importante que decir.
- Los reuní a todos porque debo hablarles de algo muy importante, se preguntaran porque no he demostrado emociones y ninguna expresión de dolor, también entiendo que estarán impactados por mi forma de hablar, bueno, dejenme confesar que no soy un niño normal, vine aquí para enmendar un gran error que mi gente ha cometido, hemos liberado por accidente un virus que para nosotros es no más fuerte que una gripe pero para ustedes es mortal, no tengo tiempo para explicar de dónde vengo exactamente, pero debemos llegar a un lugar muy específico y mi gente nos estará esperando, yo cargo la cura aquí conmigo, es algo muy valioso así que por favor les ruego que me ayuden a llegar a salvo.
- como sabemos que no es mentira niño...- dijo Hee mirándolo con enojo
- Deberán confiar en mí, luego que estemos ahi veran que no les he engañado.
A partir de ese instante todo se volvió raro e incómodo, nadie confiaba en él, pero bueno no había tanto más que perder si era mentira, el mundo estaba en llamas ya. Al amanecer salieron del galpón, solo faltaban 8 km para llegar al destino, fue una caminata silenciosa, todos estaban cansados tristes y decepcionados, pensaban en sus familias y amigos, quee ra o que seria de ellos si fallaban, una de las chicas lloraba en silencio concentrada e inmersa en sus pensamientos no notó que una de las criaturas se arrastraba hacia ella y sintió un dolor inmenso en su tobillo por lo que gritó y cayó al suelo, pronto todos fueron a salvarla aunque fue inmediato era tarde, ya la habían mordido, Bj aplasto el cráneo de esa maldita cosa con una furia que jamás habían visto, el niño corrió hacia los árboles, levantaron a Stella y fueron detrás de él. Luego de avanzar varios metros se dejaba ver algo, sus miradas atónitas ante lo que estaba frente a ellos los dejó helados mas sin miedo dieron varios pasos y ahí estaba, era como un castillo gigante, oscuro, el niño estaba parado en la entrada y de pronto stella tosiendo este líquido negro se desmayó, jacob la levantó en sus brazos y comenzó a caminar a la entrada y con una voz fuerte entre lágrimas y angustia grita
- te entrego al niño!! ayudala por favor no dejen que muera!!!
Cae de rodillas con un llanto incontrolable pero interrumpe una luz muy brillante que hace que cierre sus ojos y la abrace fuerte, de esa luz unos seres bellísimos que no tenían forma humana emergen y se llevan a Stella y jacob con ellos, el resto los sigue aunque con miedo y desconfianza, una vez adentro el niño quien ya no se ve como uno, los espera , la puerta se cierra detrás ellos.
- Por favor no tengan miedo, los han estado esperando con la esperanza de que fueran capaces de sobrevivir.
- De qué diablos hablas explicanos que es esto, nos engañaste todo este tiempo déjanos salir!, dijo Jb
- Lo siento no puedo dejarlos ir, su mundo como lo conocen necesita llegar a su fin, pero con ustedes cuatro lo podemos reconstruir, son perfectos, los hemos seguido durante toda su vida incluso sus padres saben que fueron creados para salvarse, lo siento pero este es su destino aceptenlo.
La nave comenzó a elevarse hasta desaparecer, mientras tanto el caos y la destrucción siguió su curso ellos debían ser testigos, ellos siempre fueron la cura.
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