Freya

Capitulo 1

4 de enero.

Me gustan los viajes.

Hoy mis padres y yo nos mudamos en un pueblo. Han pasado 2 horas desde que dejamos nuestra antigua casa. Nos dirigimos a un pueblo llamado Eternel.

-¿Papa, puedes poner un poco de música?.- Pregunto.

Mi padre asiente y pone alguna canción de Halsey.

Siempre me ha gustado la naturaleza. Eternel está rodeado por un gran bosque según mis padres.

-¿Cuanto falta?.- Pregunto mirando a mi hermana.

-Y yo que se, no soy adivina Scarlet.- Dice mi hermana Daniela. Mi hermana tiene el pelo lacio de color rubio. Tiene un buen cuerpo. Es alta con ojos marrones. Ella siempre ha llamado más la atención que yo.

Tengo el pelo castaño con algunos mechones rubios. El pelo rizado como mi madre. Y los ojos de color miel. Mi cuerpo es delgado no tiene casi nada de curvas.

Una chica de lo más normal.

-Falta 10 minutos.- Me dice mamá.

Asiento y miro afuera del coche.
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Cuando llegamos a la nueva casa me quede recorrió un escalofrío.

¿Como una casa me puede causar eso?

La casa se me hizo reconocida no sé porque. Es como si lo hubiera visto en mis sueños.

-¿Te gusta la casa Scarlet ?.- Pregunta mi padre.

-Sí, no está mal. ¿Cual es mi habitación?

-Está en la segunda planta, explora un poco la casa.- Murmura eso último como si fuera una orden.

A si que sin más, entro a la nueva casa y me pongo a explorar. Una cocina pequeña pero acogedora. Un comedor normal, tres habitaciones —Una de matrimonio— dos cuartos de baño.

Una casa normal. Pequeña pero acogedora.

El timbre suena.

-Scarlet ves tú, yo no puedo !.- Grita mi madre.

-Ya voy!.- Grito yo. Camino hasta la puerta y la abro. Me encuentro con una señora de cuarenta años, y al lado suyo dos chicos.

-Hola! Soy Estela tu nueva vecina, y estos dos chicos de hay son mis hijos. Este es Arion y el otro es Eros.- Dice Estela entusiasmada señalando a sus dos hijos. Inmediatamente analizó a sus hijos. Arion debe de medir más de un metro ochenta tiene el pelo negro, ojos de color verde, su rostro podría ser de un modelo, tiene un cuerpo musculoso que se deja ver por su camisa negra. Eros es un poco más alto que Arion, ojos grises, pelo negro y un cuerpo musculoso. Sin duda los dos podrían ser modelos de la Gucci.

-Encantada soy Scarlet.- Le sonrió un poco nerviosa.

Arion me analiza con su mirada fria, mientas que Eros me mira con una chispa de diversión.

¿Es que ha notado mi nerviosismo? ¿Tanto se me nota ?

También es normal, no todo el mundo tiene de vecinos unos modelos de la Gucci.

-Hola soy Itziar, la madre de Scarlet.

Mi madre me saca de mis pensamientos.

Estela le sonríe y se presenta otra vez .

-He traído unos pastelitos.- Dice Estela.- Los ha hecho mi hijo Eros!

-Espero que sea de su agrado.- Salta Eros, oh santa papaya de la Virgen María, menuda voz!

-Muchas gracias! .- Dice mi madre.- Scarlet comenzará el lunes las clases en Mencher —La Universidad—.

- Perfecto mis hijos también estudian en Mencher! Eros creo que tiene la misma edad que tú!.- Dice Estela mirándome.

-Voy a primer curso.- Murmuro.

-El mismo que Eros! Eros el lunes vienes a buscar a Scarlet y le enseñas la Universidad.

-Estaré encantado de enseñarte Mencher Scarlet.- Dice Eros con una sonrisa de superioridad.

-Si, si me disculpas tengo cosas que hacer. Gracias Estela.-Dijo entrando otra vez a casa y subir a mi nueva habitación.

Me ha molestado esa sonrisa, no voy a juzgarle porque no lo conozco, pero me a parecido un mujeriego. Sin duda sería el chico perfecto de mi hermana Daniela.

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Odio los Lunes. Este fin de semana no he salido de la nueva casa, he tenido que guardar mis cosas y ordenar todo.

Hoy supuestamente viene Eros a buscarme para enseñarme Mencher.

Llevo puesto el uniforme de la Universidad, una falda de cuadrados que me llega tres dedos por encima de la rodilla y una camisa blanca con el nombre de Mencher.

Estoy afuera de casa, hace frío, parece que va a nevar.

-¿Vas estar todo el día mirando el cielo?

Me sobresalto y miro a aquella persona que me a hablado.

-No, te estaba esperando.- Le digo . Llevaba puesto el uniforme. ¿Es que este chico le queda bien todo ?.

-Vamos.-Me dice frío.

¿Y yo que le hecho ?

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Cuando llegamos a Mencher. Eros me enseña las aulas.

-Esta es nuestra clase.- Dice indiferente.- Espero que te a quedado todo claro.

Asiento, la verdad es que no me he enterado de nada, ósea me he quedado mirando otras partes, además de que soy olvidadiza.

-Gracias Eros.

-No lo he hecho por ti, solo por mi madre, olvídame. Gracias.- Salta el marchándose.

De nada, majo.

Entro en clase.

Ok, llego tarde, todos los alumnos se me quedan viendo.

-¿Eres Scarlet Ponx?.-Dice un hombre de unos cincuenta años.

Asiento.

-Siéntese allí.- Señala el profesor.

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Llega la noche, el día de hoy a ido normal, no me hecho ninguna amistad. La verdad es que no soy muy social.

Después de cenar, me tiro en la cama y inmediatamente me quedo dormida estaba muy cansada.

Frío, nieve, sangre.

Sangre por todos lados, siento que alguien me observa, estoy paralizada. Estoy atrapada, nadie me salvará, nadie ni si quiere él.

Porque sabe que yo soy el monstruo.

Porque sabe que yo puedo.

Porque sabe que merezco esto.

La muerte.

La sombra se acerca y me susurra en el oído.

-Despierta.

Me despierto agitadamente, casi siempre tengo la misma pesadilla.

Mi corazón late fuertemente.

-Necesito aire.- Susurró.

Me levanto y abro la ventana y me quedo unos minutos recuperando mi respiración.

Pero...

El me vigila...

La sombra...

Está delante mío...