Y fue justo ahí, en ese momento en que me golpeó la verdad...con el ímpetu de una bala, causando un daño considerablemente peor que el de un arma de fuego, porque en este caso era un corazón lo que se había roto, y cuando la herida es justo ahí no tiene cura...os puedo asegurar que nunca jamás deja de doler, solo aprendes a vivir con el dolor, como mismo tu olfato puede acostumbrarse a un perfume y llegar el momento donde ignora su presencia. Supe entonces también que cargaría toda la vida con el recuerdo de alguien a quien le entregué mi primera vez mas importante, y no me refiero al sexo, sino a quien le entregué por primera vez mi corazón, mi ilusión...alguien que no había correspondido mis actos, por lo menos no de la manera que yo necesitaba. Hoy en día podéis estar seguros que no se si alguna vez él me quiso, si alguna vez sintió el más mínimo resquicio de lo que sentí yo...pero lo que os puedo asegurar es que si alguna vez lo hizo, no fue de la manera correcta.
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Hola por aquí!
Solo me paso a decirles que este escrito es un fragmento de una historia en proceso.
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Somos Instantes
Short StoryEsto NO es una novela. Solo son mis pensamientos. Los que escribo cuando no se como expresarme con palabras, y solo la pluma y el papel me ayudan. Si decides leer, aquí encontrarás algunos escritos tristes, otros mas alegres y quizáz alguno que otro...