Solo había oscuridad ... y de repente apareces tú. Me acerco silenciosamente, incrédula, perpleja, emocionada; examino mi alrededor, busco pruebas de que seas tú.
Te observo detalladamente, repaso tu rostro una y otra vez; tu cabello, tus ojos, tú sonrisa, todo está ahí: frente a mi.
Como si a gritos mi corazón lo pidiera tu mirada fijas en mi; Puedo verte tan claramente que mi corazón se detiene, quedo sin respiración y todo a mi alrededor ya no está: Solo te veo a ti.
Y aunque no encuentro lógica o explicación a lo que está sucediendo simplemente me dedico a observarte: recorro línea a línea tu rostro, escudriño tu mirada, admiro tu cabello y grabo esa sonrisa que derrite el universo.
No se cuanto tiempo transcurre y sigo ahí, atrapada en un hechizo del que no quiero salir, inmersa en ese trance que me hace tan feliz.
Luego todo vuelve a la normalidad y tú no estás. Simplemente fue un sueño que parecía ser verdad. Un sueño que al igual que tu recuerdo, poco a poco se va.
ESTÁS LEYENDO
Mundo entre palabras
PoesíaMas que solo letras en un papel, un poema es un mundo entre palabras. Los invito a explorar diversos mundos y sensaciones junto a mi.
