Vas A Volver - Trueno (TERMINADA)

capítulo 63

-Andate, no quiero problemas- le susurré a Nicki, quien carcajeó

-no vengo a hablar con vos- se cruzó de brazos

-que lastima, si necesitas algo hablá conmigo, Mateo está ocupado- traté de sonar tranquila

-si, dale, me chupa tres huevos, tengo que hablar con él- volvió a insistir con cara de sobradora y una sonrisa sínica

-está desnudo, en mi cama, recién me término de coger, ¿qué necesitas?- largué también con una sonrisa sínica, los cables se me habían cruzado

-nada, dejalo ahí, ya voy a volver- negó fastidiada y se dio vuelta comenzando a caminar por el largo pasillo rodeado de habitaciones, cerré la puerta suspirando y encontré a un Mateo cruzado de brazos con su típica sonrisa picara

-desnudo, en tu cama, ya que recién terminamos de coger se rasco su pera y me reí

-¿Querés ir a hablar con ella?- señalé la puerta y negó rápido

-no, ni loco- se acercó a mi cuerpo y me abrazó, lleve mis manos a su pecho descubierto comenzando a dejar suaves caricias, su suave piel se hacia notar, dejé varios besos y por fin me separé dispuesta a acomodar el bolso

-cambiante así vamos- le tiré su remera y una vez terminé de armar todo, me dispuse a ver como Mateo se miraba en el espejo.

Acomodaba sus cejas con uno de mis cepillitos, se miraba los dientes en el reflejo del espejo y por ultimo se acomodaba los rulos

-Dale, apurate que quiero ver a mi hijo- lo llamé cansada

-te me calmas turra- me señaló con un dedo

-ésta calmame boludo- le enseñé el dedo medio mientras me reía

-cuando quieras bebé - subió y bajó sus cejas a lo que le revolee un almohadón - sos re agresiva negra- negó y se paro frente a mí- vamos, dale - retiró su mano en mi dirección a lo que la tomé, pero en vez de pararme lo tire sobre mí, enrede mis piernas en su cadera y comencé a besar su cuello - la puta madre Roma- puteo a techo llevando sus manos a mi cintura

-acá se hace lo que digo yo, ¿entendimos?- le susurré en su oído para seguidamente morder el lóbulo de su oreja despacio

-si- susurró besando mi clavícula, como pude lo dejé debajo de mi y besé su frente

-vamos turro- palmee su pecho riendome , me paré, agarré el bolso y salí de la habitación

-te odio- entrelazó su mano junto a la mía cuando me alcanzó, negué riéndome y toque la puerta de mis amigos

-Buen dia- susurró un Mauro lleno de ojeras

-¿Qué te pasó a vos?- le pregunte entre carcajadas

-tu hijo no se durmió hasta las 4 de la mañana- me reprochó entre gritos/susurros

-con una mamadera antes de acostarse se dormía al toque- lo miré confundida

-si, le dimos la mamadera y lo acostamos en su cuna, pero no se quería dormir- refrego sus palmas de las manos por su cara

-es que no se pude dormir solo, siempre se duerme agarrando mi cadenita, a upa- me reímos con Mateo

-esto no es nada comparado a los primeros días de nacido- le palmeo el hombro mi novio y entramos a la habitación cuando el tomatito se corrió de la puerta

-hola gorda- besé la frente de mi amiga quien tenia a benjamín durmiendo en modo bolita a su lado, tapado por la finas sabanas de la cama

-hola beba- me saludó