#MíaDeNadieMás.
Por sus expresiones parecían malas noticias, por lo que Victoria espero a que cortara para preguntar.
V: ¿Qué sucede, Heriberto? (cuestionó preocupada)
H: parece que hubo un accidente, necesitan que vaya lo antes posible al hospital
V: bueno, ¿Y qué esperas? Vamos, debe ser muy importante
H: enserio lamento tener que cambiar los planes (un poco afligido)
V: no te preocupes, sé que es por fuerzas mayores (se voltea con cuidado para darle un beso en la mejilla) ya ves que eres un doctor muy importante (musita con un toque de gracia)
H: eso está muy claro, amor (responde con un tono egocéntrico para luego soltar una gran carcajada)
La amena charla continúo hasta llegar al hospital, entre bromas y risas se aliviano un poco el ambiente.
Para cuando estaban en la puerta del hospital ya Heriberto se encontraba maquinando más la situación que estaba por encontrar.
Ingresaron al estacionamiento y Heriberto se bajo rápidamente para abrirle la puerta a Victoria.
V: me llamas cuando acabes, ¿Te parece?
Sujetada por un brazo de Heriberto volteo la mirada en busca de una respuesta.
H: ¿Te vas? (cuestiona confundido)
V: pues sí, debes subir a trabajar y prefiero no molestar (recalco insegura)
La situación para ella era muy clara.
"A los hombres no nos gusta sentirnos vigilados ni molestados en el trabajo".
Palabras exactas de Osvaldo.
H: ¿Molestar? (cuestionó)
Recalcó la pregunta bastante confundido.
H: cariño, pero si me fascina la idea de tenerte aquí (tomando entre sus manos las de ella)
Victoria frunció su ceño un tanto perdida, a lo largo de su matrimonio nunca había escuchado una declaración parecida.
V: ¿Seguro?
H: ¿Por qué no lo estaría?
V: no quiero que sientas que invado tu espacio laboral, Heriberto
De los mismos nervios se soltó involuntariamente del agarre de él.
H: no estas invadiendo nada, Victoria (tomando su rostro entre sus manos y propinándole un beso) vamos y me esperas en el consultorio en lo que resuelvo ¿Te parece?
Victoria asintió con una media sonrisa plasmada en su rostro.
Heriberto entrelazo su mano con la de ella e ingresaron juntos al hospital, tomaron el ascensor directo al consultorio. Luego de dejarla acomodada camino en busca de información.
Tantos pensamientos pasaron por su cabeza, si bien le dijeron que era importante que fuese al hospital era debido a quien era el paciente no tanto por la situación.
¿Quién podría ser?
¿Quizás un amigo?
¿Algún familiar?
Hasta donde él sabía no tenía ningún pariente en la ciudad.
Llego a la sala de reuniones, ingreso y allí se encontró con uno de sus compañeros.
H: cuéntame que ocurre, Ignacio ¿Por que la urgencia?
I: lamento haber interrumpido tu noche, Heriberto
