Capítulo 7

1.9K 144 57
                                    

#MíaDeNadieMás.


A duras penas y por cuestión de aire en sus pulmones.

Se fueron separando lentamente pero sin romper esa conexión que habían adquirido sus miradas.

V: estamos dando un gran espectáculo, Ríos Bernal (susurró agitada)

H: tú, eres un gran espectáculo, cariño, y puedo dar fe de eso (susurró en su oído en tono meloso)

Ese comentario le ocasiono una pequeña corriente por todo el cuerpo.

V: Heriberto, por favor compórtate (regañó)

H: y ahora, ¿Yo que hice? (sonando inocente)

V: tú sabes mejor que nadie que hiciste, ¿Cómo se te ocurre besarme en frente de todos?

H: tienes razón, debí haberlo hecho en mi auto cuando estuviésemos a solas

V: eres un...

Victoria estaba por soltar una palabrota cuando se acercó la mesera con los platillos de ambos.

Xx: su pedido, señor y señora Ríos Bernal (repartiendo los platos respectivamente)

H: muchas gracias (sonrió cortes)

Xx: ¿Puedo ofrecerles algún vino en especial?

V: un Eiswein, por favor

Xx: perfecto, en un segundo se los traigo

Dio media vuelta y fue en busca del pedido.

H: buena elección (le tomó una mano sobre la mesa)

V: no me hables (volteó el rostro) sigo enojada contigo

H: no estés así, Victoria, por favor

Y nuevamente en un descuido de ella, Heriberto la halo y deposito un beso en sus provocativos labios.

V: ¡Heriberto!, vas a gastar mi labial (reprochó)

H: bueno, cariño, ahora si a comer se ha dicho (con una gran sonrisa en sus labios)

La mesera se acercó a la mesa con el vino y dos copas en sus manos.

Xx: disculpe, ¿Señora Ríos Bernal?

V: ¿Si, diga?

Se daría por vencida esa noche, no explicaría la confusión.

Aunque la idea no le resultaba incomoda.

Xx: el señor de la otra mesa (señalando una mesa muy del fondo que debido a la poca iluminación no dejaba ver quien se encontraba ahí sentado) le manda esto (entregándole un papelito)

V: gracias (dijo confusa)

La mesera sirvió el vino en ambas copas y luego de terminada su labor se dispuso a marcharse, la mirada nerviosa de Victoria combinada con la seriedad de Heriberto la hacían querer alejarse cuanto antes.

H: ¿Qué dice la nota? (preguntó molesto)

V: no lo sé, déjame ver (respondió nerviosa)

Con los dedos un poco torpes por los mismos nervios se le cayó el papel, pero rápidamente lo alzó y leyó.   

"Pero mira nomas que fichita me saliste, ¿Por él fue que no me quisiste perdonar? Te vas arrepentir Victoria, te lo juro"

H: ¿Qué dice?

V: nada importante

H: te hice una pregunta, ¿Qué dice la nota?

Al no encontrar donde tirar la nota sin pensarlo la echó en la copa de vino, ganándose una mirada interrogativa de parte de Heriberto.

Mía de nadie más - V&HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora