•Número Desconocido• [MinRon]

Capítulo 2

[MinHyun]

¿Cuánto tiempo tenía sin verlo? ¿2 años? Quizás un poco más. Lucía más delgado, seguramente no estaba comiendo bien, siempre fue un descuidado con sus horas de comida. Su ropa estaba planchada, seguramente estaba lavando en tintorería, no puedo imaginarme a Aron planchando una playera de esa tela, le explota el cerebro con sólo tener que pensar en usar una toalla húmeda para evitar quemar la ropa con la plancha. Sus ojos se veían aún más grandes debajo de sus cejas pobladas, ¿es posible que sus ojos hubiesen crecido en este tiempo?

- Se veía más bajito.

Una pequeña risita se escapó de mis labios, Aron moriría si escuchase lo que acabo de decir.

Esa idea anidó por mi mente manteniendo mi sonrisa unos segundos pero poco a poco se fue desvaneciendo terminando en un gesto sereno. Lucía exactamente igual. Sentí el pecho cargado de mil cosas. No parecía que le fuera mal, eso me alegraba. 

Una orda de recuerdos vino a mí sin siquiera darme tiempo de prepararme. 

Aron sonriendo mientras me miraba - MinHyunnie - Casi podía escucharlo llamándome con esa voz juguetona que hacía mientras me abrazaba. Luego vino otro recuerdo donde sostenía la manga de mi chaqueta detrás mío - Por favor... - El nudo en mi garganta me hizo levantarme a la cocina por un poco de agua.

- Idiota.

Jong

Estás listo?

6:38 am

Ya casi.

6:39 am

Llámame cuando estés afuera.

6:39 am

La universidad no quedaba muy lejos de donde me estaba quedando, mi mamá había movido cielo, mar y tierra por encontrarme un departamento decente cercano a la escuela pero las mensualidades eran demasiado altas para nosotros, la escuela no era muy barata tampoco así que nos decidimos por uno que estaba a una parada de bus de distancia, aún así JongHyun se había ofrecido a llevarme, le quedaba de camino a su universidad.

- Que elegancia - Sonrió en cuanto abrí la puerta del copiloto -.

- La verdad estoy un poco nervioso.

- Ten - Extendió una barra de cereales hacia mí, la tomé e inmediatamente la abrí - Supuse que no habías desayunado bien.

- Sólo tomé un licuado. Gracias.

El auto de Jong era espacioso. Un 2015 negro que mantenía su estética intacta tanto por fuera como por dentro. Se lo había comprado a su madre en nuestro último año de preparatoria y desde entonces no se bajaba de él.

10 minutos fueron los que tomaron llegar a la escuela, la idea inicial había sido llegar mucho antes pero por alguna razón siempre se me va el tiempo en cosas que ni siquiera recuerdo.

- Diviértete en tu primer día.

- Gracias por traerme.

- De nada. Suerte.

No es que fuese el primer día de clases en la universidad para todos, era mi primer día de clases en esta universidad, acababa de transferirme en mi tercer cuatrimestre, por suerte no había sido un gran problema por parte de la escuela.

Aula 18 decía el papel pero no decía dónde estaba la bendita aula. Me había detenido a preguntar a otro estudiante, supongo que se me notó que era nuevo porque me hicieron la novatada de la vida, a 1 minuto de iniciar clases yo me encontraba en el baño de quién sabe qué edificio siguiendo las indicaciones del chico de gorra roja.

Por fin di con el salón que para mi suerte aún no tenía profesor. Me senté en la segunda fila de izquierda a derecha, no había muchos asientos disponibles así que sólo me senté en la primera mesa. Poco a poco los asientos disponibles se fueron acabando y una chica de cabello oscuro se sentó a mi lado.

- Hola - Debía dar una buena primera impresión, no quería pasar el resto de mi vida universitaria sin amigos -.

- Hola - Sus ojos eran grandes y sus labios pequeños. Se dio media vuelta para sacar un libro de su mochila y ponerlo sobre la mesa -.

- ¿Te gusta Harry Potter?

- ¿Porqué otra razón llevaría un libro en mi mochila? - Sonrió divertida. Primero 3 minutos y ya parecía un tonto -.

- Si, tienes razón.

- ¡Aron!

Alguien detrás de mí gritó ese nombre, no pude evitar voltear, era el chico de la mesa de atrás, vi como levantó su mano, estaba saludando a alguien.

- Te guardé lugar. Ven.

Voltee hacia adelante, hacia la puerta para ser más preciosos, y ahí estaba él en un pantalón de mezclilla negro, una playera gris sin estampado y una chaqueta verde olivo, colgaba su mochila del hombro derecho y llevaba una gorra azul marino con la visera hacia atrás. No tardó mucho en verme también. Sus enormes ojos se postraron sobre mí. Me saludó con la mano y yo devolví el gesto.

- Buenos días - Dijo una voz grave detrás de Aron, lo que le hizo correr a su asiento al lado de su amigo - Soy el señor Kim SungHo y estaré a cargo de impartirles Tendencias sociales. Comenzamos la clase.