Ishizaki y los demás fueron a la estación de trenes a esperar al tren que los llevará a la casa de Sanae.
─Oigan, chicos. Me siento mal por gritarle a Tsubasa, bueno, mejor dicho a la ilusión de Tsubasa─ se lamentó Ishizaki.
─Tal vez debimos haber hecho de cuenta que era el verdadero Tsubasa─ dijo Misaki.
─Pero es imposible que vuelva de la muerte. Ya está. Se fue de este mundo, y tenemos que olvidarlo para seguir adelante. No ganaremos nada en la vida si seguimos aferrándonos al pasado. Hay que pensar sobre el futuro─ dijo Wakabayashi.
─¡No te hagas el maduro! ¡Sabemos que también quieres llorar!─ lo acusó Sanae.
Genzo bajó la mirada, y comenzó a sollozar.
─¡TSUBASAAAA!─ gritó. Las personas lo observaban extrañados.
─Ya, Genzo, tranquilo─ Misaki trató de consolarlo.
Sanae tampoco resistió las ganas de llorar, y se recargó en el hombro del de rasgos delicados para liberar todo el llanto.
─Los padres de Tsubasa fallecieron en aquel accidente automovilístico hace dos años. Bebieron de más por la depresión antes de subir al auto, y al final los arrolló un camión─ dijo Ishizaki.
─¡Si no se hubieran distraído, él seguiría con nosotros!─ acotó Genzo, sin dejar de llorar─¡Maldita sea!
─¡TSUBASA, POR FAVOR REGRESA!─ gritó Ishizaki al cielo, hasta que...
Un chico encapuchado lo empuja hacia las vías del tren. Salió corriendo para no ser atrapado.
─¡OYE, REGRESA AQUÍ, HIJO DE PUTA!─ le gritó Genzo al joven desconocido.
─¡ISHIZAKIIII!
El joven rapado ya estaba en el aire, listo para ser embestido por el tren que estaba a centímetros de él.
─¡AAAAAH!
En ese momento...
─¡ISHIZAKI!
─Tsu-tsubasa...
El azabache lo toma de la cintura, y lo empuja hacia atrás, salvándolo de ser arrollado.
Ishizaki cayó encima de él.
─¿Pe-pero qué pasó...?
─Te salvé la vida, Ishizaki─ sonrió.
─Una ilusión no te puede salvar así, entonces...─ Genzo quedó anodadado.
Tsubasa sonrió, y lo abrazó con todas sus fuerzas. Wakabayashi tuvo una corriente cálida que hizo que su piel se erizara, y su corazón latiera rápido.
─Tsu-tsubasa ... ¿En verdad eres tú? ─ Sanae se tapó la boca, y las lágrimas le surcaban el rostro.
─Jeje─ rió.
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𝗘𝗡𝗧𝗥𝗘 𝗩𝗜𝗗𝗔 𝗬 𝗠𝗨𝗘𝗥𝗧𝗘 ❱ 𝗖𝗧 ✔
Historia CortaTsubasa, un niño de tan sólo ocho años de edad muere en un catastrófico accidente: un camión lo arrolló cuando el joven iba a buscar su balón que se había ido a la calle. Cuatro años después, regresa como un espíritu y se vuelve a encontrar con sus...