Capitulo Siete

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Skye seguía pensando en él cuando llegó el trueno. Tenía miedo de la tormenta. Deseó estar con Chase. Estar con él siempre le quitó sus miedos. Quería apoyarse contra él como la noche anterior y sentirse protegida. Cerró la puerta de su casa para revelar una foto de ella y Chase el primer día que lo conoció. En la foto, Skye llevaba el sombrero de policía de Chase. Ella recordaba el día en que se conocieron. El cansancio la conquistó y se quedó dormida.

En su sueño, había vuelto al día en que se unió a la Patrulla Canina. Skye estaba en el bosque cuando escuchó un aullido. Todavía era muy temprano. Ella sabía que tenía que huir de eso. Anduvo huyendo de lo que le estaba persiguiendo desde la última vez que vio a sus padres, que fue hace una semana. Estaba cansada de correr. Estaba cansada de tener miedo. Estaba cansada de estar sola. Pero ella no tenía otra opción. Ella no sabía qué hacer. Ella solo siguió corriendo.

Después de lo que pareció una eternidad, corrió hacia el borde del acantilado. Estaba a plto de caerse. Al fondo del acantilado, el mar chocó contra las rocas. Se dio la vuelta para ver si todavía la seguían. Después de unos segundos, algo crujió en los arbustos. Un perro saltó de los arbustos. Por primera vez, bajo la luna llena, pudo ver a su perseguidor. Era un galgo gigante. Tenía los ojos rojos y el pelaje gris. Era grande y alto. Tenía un corte sobre su ojo derecho.

El perro gruñó y saltó hacia Skye. Antes de que la tocara, otro perro alejó al galgo. El otro perro gruñó al galgo. El galgo intentó atacar de nuevo. Pero el otro perro, un pastor alemán, se apartó del camino a una velocidad tremenda. Cuando el galgo aterrizó, el pastor alemán lo agarró por la pata trasera y lo arrastró. Cuando lo soltó, el galgo salió corriendo inmediatamente.

Una vez que el galgo se fue, el pastor alemán se dio la vuelta. Cuando salió a la luz, Skye estaba asombrado. El pastor alemán parecía ser un poco mayor que ella. Tenía hermosos ojos color ámbar, pelaje claro y marrón oscuro. Tenía orejas puntiagudas. Ella pensó que era guapo. Él comenzó a acercarse a Skye, lo que la asustó. Ella estaba a punto de correr cuando él comenzó a hablar.

"No tienes que preocuparte", dijo el pastor aleman. Su voz era tranquila y relajante. “Ya nada te hará daño. Lo prometo. Estás a salvo ahora ". Ella quería creerle, pero no se sentía segura. El pastor alemán se acercó. “Mi nombre es Chase. ¿Que es el tuyo?"

"S ... S ... Skye", dijo con voz temblorosa.

Chase sonrió. “Vamos, te ves frío. Vamos a meterte adentro ".

Cuando dijo eso, casi de inmediato la Skye se dio cuenta de lo fría y cansada que estaba. Ella trató de moverse, pero se cayo. Chase se volvió, caminó hacia ella y la puso sobre su espalda. A pesar del frío, su pelaje era calido. Caminó lentamente hacia una torre gigante.

Atravesó unas puertas correderas y la dejó sobre un cojín cerca de una chimenea. Chase se sentó en un cojín cercano. Skye se acercó y se acosto justo a su lado. Junto a él, sintió una sensación instantánea de protección. Ella también quería estar con alguien después de estar sola por mucho tiempo. Skye finalmente se durmió. Ella durmió durante unas horas y luego se despertó. Chase estaba sentado a su lado mirando la chimenea. Se levantó, se fue y regresó un minuto después con un plato de comida. Puso el plato justo en frente de ella. Skye se acercó al plato de comida. Ella comió la comida bastante rápido.

"Eres un cachorrito hambriento, ¿verdad?" Chasepregunto.

"Uh, sí, bueno, no he comido en mucho tiempo".

"Bueno, ya no tendrás que preocuparte por eso. Estás con la Patrulla Canina".

"¿El qué?"

"Es un equipo que ayuda a proteger esta ciudad".

Carrera Contra El Tiempo-Una historia del Paw PatrolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora