Un fracaso y una misión.

1K 132 49
                                    

***

La chica que perseguía a la pareja, se llamaba Leiko y tenía un aspecto sombrío, el cual se acentuaba gracias a su pelo y ojos oscuros, además de por su su vestido negro y de manga larga.

"Vaya, vaya, qué coquetos están en la vía pública. Se nota que están muy confiados de que no haya nadie por aquí, a excepción de mí."-Pensó mientras tomaba las fotografías con su cámara profesional.

Eijirou y Katsuki continuaban su camino como si nada, lo que le daba tranquilidad a la muchacha.

-Oye, Kirishima. ¿Lo has notado tú también?-Le preguntó Bakugou.

-Sí, lo he notado. Es demasiado evidente.-Contestó.

"Umm... Parece que están hablando. Ojalá pudiera oírles."

-¡Rayos! Debí traer algún aparato electrónico para detectar sus voces. De esa manera podrían darme más dinero por el material que les voy a proporcionar.

Leiko trató de avanzar más y lo habría hecho de no haber sentido una presencia tras ella.

-Vaya, parece que te lo estás pasando bien persiguiéndonos, ¿verdad, zorra?

En ese instante, muy asustada, se giró.

-¡Tú...!-Exclamó al ver a Bakugou.

-No te lo esperabas, ¿eh?

-No, la verdad es que no lo vi venir. Pero bueno, ya hice muchas fotos. Así que, marcho. ¡Ciao, Bakugou!-Dijo estando ya preparada para echar a correr.

Sin embargo, Katsuki no lo permitió, ya que la agarró por detrás antes de que intentase escapar.

-¡Eh! ¡Suéltame, imbécil!-Le gritó tratando de zafarse de él.

-No lo haré hasta que vea que borras las putas fotos.

-¡Jamás lo haré!

El rubio cenizo, ante la respuesta, se enfadó e intentó arrebatarle la cámara a la fuerza.

-¡Dame la maldita cámara!

-¡No!

Forcejeando, a la chica se le ocurrió gritar lo siguiente:

-¡Socorro! ¡Katsuki Bakugou me está intentando violar!

El mencionado se indignó en demasía.

-¡Serás desgraciada! ¡Muere!-Le gritó amenazándola con su kosei.

Katsuki se puso más agresivo hasta que por fin Kirishima apareció y le detuvo activando su quirk.

-¡Red Riot! ¡Sálveme de este violador, por favor!

El pelirrojo se acercó más a ellos y miró a la chica con seriedad.

-Bakugou, no deberías amenazar a una civil con tu kosei.-Le advirtió para después mirar a la chica.- En cuanto a ti, no está bien acusar a alguien de un delito así cuando es mentira, ¿sabes? Es rastrero.-Dijo arrebatándole la cámara.

-¡No me la quites, por favor! Borraré las fotos delante de vosotros si me lo pedís.

Eijirou la miraba con desconfianza.

-No me fío de ti, así que las borraré yo.

La joven se alteró.

-¡No! ¡Tú no vas a saber, estúpido!-Gritó mientras era inmovilizada por Bakugou.

El héroe se molestó mucho y sacó la tarjeta de memoria para romperla en pedazos con la ayuda de su kosei.

-¡Nooooo!

Acto seguido, Katsuki la soltó y cayó de rodillas.

-Toma, tu cámara de fotos.-Dijo Kirishima entregándosela con su quirk ya desactivado.

Leiko se la quitó de mala manera y lo miró con odio.

-¡¿Cómo te has atrevido?! ¡Esas fotografías me iban a hacer rica!

-¿Y por qué no pruebas a ganarte la vida de manera honesta?

Ella no respondió.

-Con la honestidad no se gana tanto dinero, así que puedes meterte tu consejo de mierda por dónde te quepa. Además, os voy a advertir algo: Esto no quedará así.-Les amenazó antes de irse.-

Katsuki quiso ir a por ella de nuevo pero Eijirou le detuvo poniendo una mano sobre su hombro derecho.

-Déjala ir, Bakugou. Ella ya no tiene las fotos , así que no es necesario que vayas a por ella.

-Lo sé pero...¡Me cabrea!

-Lo entiendo perfectamente, sin embargo, no me gusta que no sepas controlarte. Creo que debería enseñarte.

-¿Tú? ¡Pero si tú eres el que me descontrola, idiota!

-Eso lo sé muy bien~

El pelirrojo acercó al más joven hacia él y le besó.

-De todos modos, contrólate, ¿vale? No puedes dirigirte de esa manera a los civiles, ni tratarlos de forma agresiva. Trata de corregir eso, ¿de acuerdo?

-Está bien.

Eijirou le sonrió.

-Bien, ahora vamos a casa.

Volvieron a tomar sus manos y se dirigieron a casa de Katsuki. El héroe no quiso hacer notar su presencia y se despidió de su novio para después marcharse.

Aquella noche se quedaría en la casa que había comprado para ellos. Ya se iría por la mañana temprano a la ciudad pues era un poco tarde ya.

***
Entre tanto, Yō iba junto a Shigaraki, Toga y Dabi. Los villanos lo estaban llevando hacia un barrio bastante concurrido en horario nocturno. Ellos permanecían ocultos en un callejón oscuro desde el que se podía ver a la gente pasar sin ser vistos.

En él era habitual ver todo tipo de locales desde los más normales, en los que los trabajadores se relajaban tras acabar la jornada laboral, hasta lugares en los que se consumían drogas sin ningún tipo de disimulo y se saciaban los fetiches más oscuros.

Shindou no había estado nunca en aquella zona, por lo que se hallaba impresionado ante lo que veía.

-Shigaraki...¿Qué se supone que debo hacer aquí?

El villano esbozó una siniestra sonrisa y le respondió:

-Estás aquí para sembrar el caos. Si eres original, no habrá más pruebas.

Shindou sudó como nunca pues la imaginación no era su fuerte.

"Estoy perdido."

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!

You can't resist Daddy after all.[Kiribaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora