Pasaron 15 días aproximadamente y decidí no llorar más por alguien que no iba a volver a estar conmigo.
Me dí cuenta de que era verdad que somos realmente incompatibles y decidí irme con mis amigas que son las que siempre van a estar conmigo.
Yo se lo conté a mis amigas y sus reacciones fueron:
Hay más chicos y tu tienes una vida entera por delante. Disfruta de lo que tienes y no de lo que quieres.
Y yo me quedé con que estoy mejor así y con que no hace falta tener novio para hacer amigos en el instituto.